CAPITULO#20: Ya no puedes confiar en nadíe(FINAL) PARTE II:

825 49 0
                                    

Cuando él estaba apunto de conseguir lo que se proponía, tener mi colgante literalmente, ya que, sus arrugados dedos rozaban la fría cadena del colgante, y casi lo tenía entre sus manos. Colin, con paciencia y sigilosamente, logró con exito derretir las cadenas, sin tener ni un solo rasguño o quemazón. Se levantó de la silla, apartándo fuertemente al Director, estampándolo contra una de las paredes de la sala:

-Ali no! No se lo des.-Me advirtió Colin devolviendome el colgante.

-Colin...-Dije en un hilo de voz, miéntras me ponía el colgante ágilmente.

Apenas parpádeando un par de veces, frente a mí volvía a estar el Director, que con agileza había logrado levantarse y mantener la compostura. De pronto, la escena cambió. En un instante vi a Alex, mi mejor amiga y compañera de cuarto, sujetándo a Colin de los brazos fuertemente, y apuntándole a la cabeza con una pistola. No entendía nada, tan solo no podía apartar la mirada de la pistola  que estaba a escasos centimetros de la cabeza de Colin:

-¿Alex?¿Que haces aquí?-pregunté inmóvil.

-Hola Ali.-Dijo sonriendo.-Ya me puedes estar dando el colgante, ya sabes que sino esto acabará muy mal.-Añadió con un gesto de apretar el gatillo.

-Espera! Alex, ¿Que haces? Eres mi mejor amiga no me hagas eso...-Dije en un intento de convencerla y sacarle esa mala idea de la cabeza.

-Dame el colgante y nadíe saldrá herido.-Respondió fría e intimidante.

-Jamás!-Respondí furiosa. Algo tenía ese colgante de especial, así que mejor me lo quedaría.

-Lo siento, son negocios.-Y apretó el gatillo apuntando a Colin, que estaba sudoroso y su mirada reflejaba nerviosismo.

Tenía que pensar en algo, esto no podía estar pasándome. No me imaginaba una vida sin Colin, tenía que hacer algo, y ya. Cogí valor y pensé en algo ingenioso. Era impresionante como mi mente pensaba en apenas un par de milésimas de segundos. Agarré con fuerza el colgante, sintiendo otra vez esa energía extraña. Mis manos se volvierón frías y tiesas, apuntando cerca de la cara de Colin, junto a la pistola y la mano de la que la sujetaba. Finalmente reaccioné y siguiendo apuntando en la misma direccion, un gélido rayo salió de las palmas de mis manos. Parpadeé nerviosa agitando mis pesadas pestaña, encontrándome al entre cerrar los ojos, con la mano congelada de Alex seguidamente con la pistola:

-¿Pero que has hecho inútil?-Dijo furiosa miéntras rompía la fina capa de hielo agitando la mano congelada.

Volví a repetir el mismo acto, haciendo que, se congelase otra vez su mano, pero con más escarcha, inmovilizando su mano para no poder disparar. Fije mi mirada en Colin, espera. Esto no podía estar pasando. Colin estaba inmóvil con la mirada ardiente fijada en mi. Lo había congelado a él, aparte de la mano de Alex sujetando la pistola. Estaba inmovilizado por una gruesa capa de hielo translúcido y frío. El Director, se acercó insistiendo de nuevo:

-Dame el colgante.-Repitió frío miéntras golpeaba con un objeto duro contra la mano de Alex .- Ya has visto lo que pasará sino nos obedeces.-Añadió Alex agitando la mano. Su mano volvía a estar bién menos la pistola, que seguía congelada en la gravedad.

-He dicho que nunca, nunca os lo daré. Por lo que veo, lo quereís con muchas ansias, así que és importante. Y por eso, nunca os lo daré.-Dije seria.

-Así?-Dijo el Director.- Pues tu lo has querido, ¿Quieres jugar? Pues que empiezo el juego.-Añadió desvaneciéndose de la nada junto a Alex.

Cuando se fuerón ya no sentía furia dentro de mi, ni amenaza. Solo tristeza, ¿Y ahora que haría yo? Estaba sola en esto y no podía escapar. Corrí con torpeza hacía a un congelado e inmóvil Colin. Estaba frío y al tocarle el rostro un escalofrío recorrió mi cuerpo. Su ardiente mirada estaba fija en mi, provocandome una extraña sensación:

Ella de hielo, él de fuego:(TERMINADA)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora