Juego de gemelos

Capitulo I

— ¡Niños! — exclamo _______ desde la sala y por las escaleras bajaron los dos hermanos de 10 años

— ¿Qué pasa mamá? — cuestionaron a la par.

— ¿Tienen sus cosas listas? — cuestiono _______ y los dos niños asintieron. Eran mellizos. Aún que, bueno, faltaba Teddy.

— Yvette, tu tendrás que estar con las niñas, y tu Andy, no hagas travesuras. — dijo seriamente y los niños asintieron mientras cruzaban sus dedos detrás de su espalda. — Ahora vayan a cenar — dijo y los dos rubios asintieron para dirigirse a la cocina.

La madre de ambos suspiro al verlos ir a la cocina, le recordaban tanto a él, pero todo había terminado hace 7 años. Y tenían que hacerse pasar por una familia de humanos.

Entro a la cocina donde estaban Dominik y Mabel, esta ultima con un vientre abultado. Y Dominik frente a su sobrina Makalah.

¿Quién era Makalah? Bueno...Makalah es su última hija, y también, hija de ella con Bill tenia apenas un mes cuando se separaron, pero no le dijo. No quería que el pensara que lo hacia para retenerlo. Esa niña ahora tenia 7 años — o al menos los aparentaba — puesto que, dentro de unos siglos mas, ya no llevaría la cuenta.

— ¿Si ira Makalah? — cuestiono Dominik mirando a su hermana.

— Si, estoy segura que Ivy no quiere ir sola, y Makalah esta emocionada por conocer los campamentos de los humanos.

— Sera divertido — dijo la niña sonriendo.

Los tres niños siguieron comiendo en silencio mientras los adultos tomaban platica del embarazo de Mabel.

Por su parte Bill vio a Edward, o Teddy, el cual no dejaba de dar saltos en su lugar, emocionado por el campamento, Daryl y Hayleen también, pero estos, ahora se reían del niño el cual solo balbuceaba “Campamento, campamento campamento”.

Mabel G y Will se asomaron y Marcus rió. Mabbel G tenia una bebe de cerca de 2 años en sus brazos. Brinn.

— Venga ya, en paz, o los tiro por la ventana — dijo la castaña y los tres hijos de Bill se detuvieron al instante.

Edward miro a su padre, y su corazón se estrujó al ver los ojos de aquella chica que le había robado el corazón y que cuando desapareció también se lo llevo.

— ¡Es qué! ¡Queremos ir al campamento! — dijeron Hayleen y Daryl al mismo tiempo.

— A la tía Mabel G. no le interesa solo quiere que nos callemos — dijo el niño y fue a su habitación.

Los gemelos lo siguieron y cuando bajaron ya tenían sus mochilas con las cosas que llevarían al Campamento Wiedervereinigung. Nombre raro, sí, pero los humanos eran raros.

— Vamos ya, o se les hará tarde — dijo y sus hijos asintieron, salieron de la casa y se dirigieron al aeropuerto.

Al día siguiente en Holanda los tres niños se despertaron emocionados y se arreglaron lo mas rápido que sus poderes podían. En menos de cinco minutos estaban listos y tenían sus cosas listas.

— ¡Rápido! Se les hará tarde — exclamo su madre y los niños corrieron a la entrada con sus mochilas colgadas en sus hombros.

— Adiós niños — dijo Dominik y los abrazo.

— Adiós pequeños, disfruten el campamento — dijo Mabel sonriendo levemente.

— ¡Adiós tíos! — exclamaron los tres y salieron de la casa.

Subieron al auto de su madre y se dirigieron al aeropuerto.

Al llegar a la zona de abordaje ______ se acerco a ellos, sus ojos se habían cristalizado. Y la escena de cuando se fue y vio por última vez a Hayleen Daryl y Andy le llego a la mente, destruyendo todo lo que había trabajado para reponerse.