Aquí estoy de nuevo... escribiendo de algo que hace mucho no he sentido, son las 6:17 am y he estado despierta por casi dos horas. Y debo decir que me dormí a las 2 de la mañana.
Sucede que a inicios de año deje está historia por situaciones que tanto en la vida de Margarito y en la mía sucedieron, situaciones realmente desafortunadas, perdimos seres queridos y aunque después de eso seguimos tendiendo comunicación y algunos encuentros coincidentes, nos alejamos. Debo explicar razones, el pasaba su último año de preparatoria, y yo mi primer año, se acercaba su graduación y él se encontraba pasando por momentos verdaderamente confusos, yo trataba de darle su espacio, lo que sea que necesitará. Pero sucede que no fue suficiente, justo una semana antes de su graduación me dejó de hablar por completo. Fueron momentos desgarradores para mi, a pesar de eso, lo vi por algunos otros días en su graduación porque resulta que un primo mío que estaba en la misma escuela y es de la edad de él, también se iba a graduar. Sabíamos que estábamos en el mismo lugar, llegamos a toparnos cerca y ni el ni como yo hicimos esfuerzo alguno de saludarnos, yo estaba muy confundida, todo era perfecto, estábamos... más cerca que nunca, tanto tiempo conviviendo y teniendo estos sentimientos como para este repentino acontecimiento. No lo saludaba por dignidad, no fallé en nada como para que me dejara con dudas y sola. Después de un tiempo, yo trataba de no lucir mal por su ausencia, pero muchas veces lloraba en mi casa cuando nadie estaba, lloraba mucho, lloraba porque lo único bueno que tuve por meses se fue y sin dar explicación, me dolió mucho... escribí tantas cartas y poemas; y sólo en uno le dije cosas malas. Hoy, día 27 de diciembre, apuntó de cerrar este año, volví a esta historia por lo siguiente que sucedió y que ha sucedido.
ESTÁS LEYENDO
Jardín Azul De Margaritas De Oro
RomanceNacido desde el poema de Amado Nervo "La raza de Bronce"