Mi Mayor Accidente

31 - Dolores de cabeza.

Tengo una resaca que nunca pensé que tendría. Tengo vagos recuerdos de anoche, y uno de ellos es cuando estaba hablando con Noah. Dios mio. ¿Yo hablé con Noah? Me caigo muerta acá. No me lo creo.

Llamada con Sam:

S: Buen día.

B: Epa ¿Que es ese humor? 

S: Nada, estoy cansada. ¿Que tal todo?

B: Creo que bien, tengo una resaca bien fuerte y mi estomago revuelto, pero bueno.

S: ¿Tomaste alguna pastilla?

B: No, ahora iré.

S: Okay. Entonces ¿Por que llamabas? ¿Que no recuerdas?

B: A veces me asusta que me conozcas tanto .

S: A mi también, pero no importa.

B: Sam ¿Realmente está todo bien?

S: Si, Barbara. Si.

B: A las 5 estoy ahí.

S: *Suspira* Okay. ¿Que quieres saber de anoche?

B: ¿Hablé con Noah? - Digo emocionada. Si chicos, estoy emocionada.

S: Si Bar, hablaste con el. Y muy pegados la verdad.

B: - Pego un grito- Que hermoso por dios. Hable con el Sam. ¡Hable con el!

S: Si Barbi, todos lo sabemos. Estaban en el medio de la pista.

B: Sam.. 

S: ¿Que?

B: Creo que voy a vomitar.

S: Oh no, no voy a escuchar eso. - Y cuelga. Maldita perra. Y no tuve tiempo de reaccionar que tuve que ir corriendo al baño ya que sino vomitaba todo el piso de mi habitación. 

Alguien entró en la habitación y no pude ver quien era ya que el inodoro me llamaba.

- ¿Estas vomitando? - Francisco, como no.

- No idiota, estoy abrazando al inodoro porque se sentía mal. - Digo levantando la cabeza para mirarlo mal.

- ¿Necesitas algo? - Me pregunta como si fuera una obligación. Si idiota, necesito un hígado nuevo.

- ¿Me traes una pastilla para la resaca? - Digo antes de volver a vomitar.

- Ya vengo. - Y escucho sus pasos apresurados alejarse. 

Mientras espero, escucho que tocan el timbre. Y al escuchar que Francisco se hacía cargo, no le di importancia. No hasta que escuche la voz de Sam gritándole.

- ¡Solo dame las pastillas y déjame en paz! - Okay, no creo que sean solo las pastillas lo que la tengan así.

Siento como cierran mi puerta de un portazo y se acercan a mí.

- Oye, tranquilo vaquero. - Le digo sentándome bien en el suelo. 

- Lo siento - Suelta una risa nerviosa - ¿Como te sientes?

- Bien, como si hubiera peleado contra Mayweather, pero bien.

- Eres tonta - Se ríe. - ¿No sera como cuando te viene?

- ¿Como? - Digo tirando de la cadena y tratando de levantarme, a lo que viene y me ayuda.

- Cuando te viene te descompones y eso, ¿Estas en fecha? - Me deja sobre el lavabo.

Hago cuentas mentales - Se supone que me tendría que venir en esta semana. 

- Bueno, estamos a tiempo antes de preocuparnos. - Me termino de lavar los dientes y nos dirigimos a nuestro cuarto. Si, nuestro cuarto. Tiene su cama contra una pared y la mía esta en la de enfrente.