♔Capitulo 7♔

5.8K 585 21
                                    

             La música que sonaba alrededor de Leonor la tentaba a moverse, el ambiente estaba impregnado de una festividad que ella incluso podía sentirla en la punta de sus dedos, a menudo Ser Arthur Dayne le señalaba lugares históricos e import...

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

             La música que sonaba alrededor de Leonor la tentaba a moverse, el ambiente estaba impregnado de una festividad que ella incluso podía sentirla en la punta de sus dedos, a menudo Ser Arthur Dayne le señalaba lugares históricos e importantes y ella respondía con asentimiento de cabeza educado, su acompañante era tan silencioso como ella y eso no hizo más que agradarle el doble.

          Un millón de veces escuchó a su padre mencionar a "La espada del alba", todas las grandes hazañas heroicas que había cometido a lo largo del tiempo, cuando Leonor hablaba con los aldeanos, veía el orgullo de los padres tras decirle a sus hijos que debían ser como "La espada del Alba" incluso llegó a ser una leyenda para Leonor, alguien a quien tal vez jamás iba a tener el placer de conocer.

          Pero ahí estaba, codo a codo con Ser Arthur mientras él la escoltaba y le mostraba gentilmente todas las instalaciones; Leonor se detuvo frente al puesto de un aldeano que vendía grosellas por montones, metió la mano en su bolsa con la intención de comprar un poco, pero Ser Arthur tomó desprevenidamente su mano y ella fijó sus ojos en la espada del Alba con nerviosismo.

         —No — dijo él — permíteme.

          El Ser entregó un par de monedas de oro al hombre y recibió a cambio una pequeña bolsa con grosellas dentro, Leonor la recibió algo consternada y Arthur Dayne le sonrió como si quisiera tranquilizarla.

          —No era necesario, Ser, yo podía pagarlo — murmuró avergonzada

          —Quería tener el placer de complacerla, Mi Lady — respondió de vuelta, emprendiendo el camino otra vez — No recuerdo la última vez que comí grosellas.

           Leonor le devolvió la sonrisa y abrió el paquete, dejando caer unos cuantos frutos en la palma de su mano, entonces se detuvieron frente al puerto, barcos zarpaban y otros se marchaban, Lannisport era una ciudad linda.

           —Gracias — Ser Arthur se llevó unas cuantas grosellas a la boca y luego de disfrutar su sabor, volvió sus ojos hacia la chica junto a él y ahí permanecieron más tiempo del que hubieran esperado en realidad.

            Ser Arthur le contó que era gran amigo de Rhaegar, también le contó que el Rey Aerys había comprometido a su hijo mayor con una chica de la casa Martell.

             —No se siente preparado para enfrentar el desafió, pero así es como debe suceder — dijo él, Leonor ocultó sus manos en la espalda y Arthur puso su mano en la empuñadura de su espada Albor la chica observó la espada con un entusiasmo que Arthur jamás vio en otra chica de su edad, el viento de la costa zarandeó el vestido turquesa que Catelyn le había hecho

            —Supongo que es el costo por ser de la realeza — repuso ella entrecerrando los ojos.

           Había crecido en medio de ríos y peces, pero amaba el mar... el sabor a salado y el viento. Era como renacer, así que cerró los ojos y escuchó el sonido de las olas golpeando las rocas de los riscos, el murmullo de la gente del mercado, el sonido de los caballos al pasar junto a ella, el sonido de las espadas, todo sonaba tan armonioso para ella, que no se dio cuenta de que el joven Ser Arthur Dayne la estaba mirando fijamente, como si estuviera viendo un enigma; para cuando los abrió, Arthur apartó los ojos esperando que ella no se hubiera dado cuenta.

          —¡Leonor! — oyó a lo lejos; Ambos, Leonor y Arthur se giraron a sus espadas, para encontrarse con Catelyn

          —¡Cat! — la chica levantó una mano sobre su cabeza y su hermana se acercó a ellos mirando con curiosidad al hombre junto a Leonor — Cat, te presento a Ser Arthur Dayne, miembro de la guardia Real y guardia personal del Príncipe Rhaegar.

          Arthur tomó la mano de Cat para besarla cortésmente y se apartó volviendo a poner su mano sobre la empuñadura de su espada que, colgaba de su armadura ligera. Leonor notó que su hermana examinaba al joven con curiosidad.

          —La prometida de Brandon Stark, Catelyn Tully — murmuró Arthur — es un placer conocerla, mi lady.

          —El placer es mío, Ser... He oído mucho sobre usted — Catelyn sonrió ante el joven y luego miró a su hermana — Creí que dijiste que estarías en las graderías

         Leonor sonrió a modo de disculpa y entonces Arthur titubeó moviéndose de su lugar.

         —Eso me recuerda que debo ir a prepararme

          —¿Competirá en las justas, Ser? — preguntó Catelyn

          —Así es — Arthur se giró frente a Leonor y tomó su mano desprevenidamente, la llevó a sus labios y la besó mientras la veía a los ojos, era la primera vez que Catelyn veía a su hermana ponerse de todos colores — hasta volverlas a ver.

          Hizo una pequeña reverencia ante el Ser, tratando de no parecer una idiota y luego éste se alejó a paso veloz por entremedio de la gente, de pronto Catelyn se interpuso en su campo de visión y recordó que no estaba a solas.

          —Cat — musitó nerviosa

         —¿Sabes que es un miembro de la guardia real, ¿verdad? — Leonor giró los ojos, pero asintió — y que ellos hacen un juramento donde dejan fuera el matrimonio, los hijos y las mujeres, ¿Sabes eso, no?

         —Claro que lo sé Cat — respondió colérica — no soy tonta.

          —Te conozco — le susurró enganchando su brazo al de ella para emprender el camino — te gusta, no me puedes decir que no.

          Leonor abrió la boca para protestar, pero la mirada inquisidora de su hermana le hizo cerrarla y bajar los brazos derrotada, no había mucho que decir la verdad. Porque su hermana tenía razón, de alguna manera el poco tiempo que pasó con él fue suficiente para imaginar toda una vida a su lado. 

-R♚  

kissed by fire ━ Jaime Lannister │1│Donde viven las historias. Descúbrelo ahora