"Demuéstrate a ti mismo que no tienes que demostrarle nada a nadie". Diego Américo
Tu casa es la vida que te fue dada para vivir en ella, cuán hermosa llegará a ser, si la construyes con entrega, dedicación y sobre todo, con esfuerzo y valentía. Nadie echa por tierra la casa que edificó si no le gustó, por el contrario, trata de mejorarla hasta que sea de su buen agrado.
El edificador de su casa, es decir, su vida, quiere que sea amplia y moderna, cálida y acogedora, llamativa e imponente, llena de luz, de fachada bonita, con un jardín florido y cimientos fuertes por si el enemigo la intenta derribar.
La casa que decidiste construir a tu manera, es decir, la vida que escogiste, no está hecha para ser mostrada a nadie. Pues, solo tú estás llamado a vivir en ella, cuidarla, mantenerla, arreglarla, consentirla, pasearla, vestirla, gozar de su confort, atender a los invitados, levantarla si llegase a caer, a morir en ella cuando llegue la fatal hora.
No está tu vida, la casa en que vives, en venta o en algo que se le parezca, ella está para ser solo tuya y de nadie más. No sometas tu vida a la opinión equivocada de la gente que suele intervenir en lo que no conoce y se atreve a dar malos consejos.
No es mostrarte es realizarte, no es impresionar es inspirar, no es tener es ser. Recuerda, no vives para tratar de convencer que eres tú, lo que otros quieren que seas, eres lo que estás llamado a ser, nada más que eso.
En tu casa, es decir, la vida que vives, experimentarás amargos momentos por el hábito de mostrar lo que es solo para ti. Tu vida no se puede reducir al descolorido carnaval de exhibiciones al que te lleva el ruido del mundo para decidir quién es el que puede o tiene.
Los buenos momentos los vivirás cuando te demuestres todo a ti mismo. En razón, a que es tu vida y de nadie más; porque eres tú quién va a vivirla o sufrirla, gozarla o llorarla, bendecirla o maldecirla, pues, nadie la podrá vivir por ti.
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TU VIDA -RECORDANDO LO OLVIDADO-
SpiritualEn este libro encontrarás reflexiones prácticas sobre aprender a vivir, escucharte a ti mismo, vivir en tu propia vida, instruirte para no destruirte, vivir en el amor, buscar tu felicidad en el lugar correcto, dejar de explicar tu vida a los demás...