Deep |BTS| 1

Capítulo 18

—Yo las ayudare, por favor quédense un día más

—¿Por?

—Voy a cobrar unos favores y a ayudar a Rebecca

—¿A mi? — pregunto ella sorprendida.

—Ustedes no se preocupen...

—¿Pero si ese vampiro nos encuentra?

—Solo será un día más...

***

Estaba en la habitación, empacando mis cosas, estas vacaciones si que fueron realmente cortas, estaba algo frustrada ya que pronto regresaría a casa. Lo bueno es que ya no estaría sola, tendría una compañera de habitación.

—Rebecca, por favor pásame esa pila re ropa.

—Claro...— luego de que terminamos de empacar casi todo, nos sentamos en sobre la cama y empezamos a platicar sobre el plan que realizaríamos.

—Creo que hay un problema...

—¿Cuál?

—Necesitas un pasaporte y un boleto de avión para ti, para que ingreses a Estados Unidos

Las cosas desde aquí se tornaron algo más difíciles.

—Chicas...— mi abuelo abrió la puerta de la habitación. —¿Interrumpí en algo?

—No...

—Bien, Rebecca, esto es para ti. — le entrego lo que a mi parecer era unos documentos.

—¿Para que es? — pregunto ella algo confundida.

—Déjame ver...— se lo quite de sus manos y empecé a revisar. —Abuelo...— Era su documento de identidad, carnet de conducir y un pasaporte. — ¿Cómo es que...?— antes de terminar de preguntarle como los consiguió, este me interrumpió.

—Cobre unos favores...

—Abuelo, aun me sigues sorprendiendo.

—Ya del pasaje aéreo, se encargaran ustedes.

—¡Claro! Muchas gracias abuelo. — lo abrace fuertemente, aunque yo no era la persona que debía de agradecerlo, mire a Rebecca, la jale del brazo y ella se sumo en el abrazo de agradecimiento. Luego de eso mi abuelo fue llamado, asi que tuvo que ir a atender el hotel.

—Solo faltaría comprar el boleto aéreo.

—¿Qué se necesitaría?

—Dinero, por suerte tengo la tarjeta de papá. — rei.

—Me gustaría apoyar también. — exclamo ella. —¿Cómo es el dinero?

—Algo asi...— saque un billete de mi bolsillo.

—¿No usan monedas?

—Hay, como estas...— saque unos centavos de mis bolsillos.

—¿No es de oro, no?

—No, pero el oro también es valioso aquí...

—¿En serio? — se mostró entusiasmada. —¡Entonces acompáñame! — tomo mi muñeca y salimos corriendo de la habitación.

—¿A...a donde?