CAPÍTULO 2 || NO ESTAS BIEN

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Adrien

- ¿Dupain-Cheng?- pregunta la profesora Bustier.

- Falto profesora - Contesta Alya al parecer.

- ¿Otra vez?. - susurra Nino.

- ¿Como que otra vez?- pregunto susurrando.

- Viejo, ¿Eres ciego oh te haces? -dice incrédulo- Mari no se a presentado hace 4 cuadro días y con este 5 .

- ¿Alya sabe lo que le pasa a Marinete? - niega.

- No logra comunicarse con ella.

- ¿En serio?- asiente.

Cuando iba a decir hago pero gusto unos cuantos papeles doblados en un rollo se estampa con la carpeta que comparto con Nino, por instinto, ambos alzamos la mirada y vimos a la profesora con una sonrisa que ciertamente parece algo escalofriante.

- Por favor, no se distraigan en clase ¿Vale? - ambos asentimos de inmediato.

La profesora Bustier puede ser alegre todo el tiempo pero llego a punto que su sonrisa parece escalofriante en vez de dar calidez . Aún así, ella es compresiva al contrario de la profesora de química. Las clases siguieron su curso hasta llegar la hora de receso donde seguí conversando con Nino y Alya, sobre cual era la razón o el porque Marinette había dejado de asistir a las clases toda esta semana. Quisiera creer que quizás se halla enfermado pero algo, algo dentro mío, me dice que no lo es.

- Quizás esta enferma- comenta Nino.

- ¿Y si no es así?- pregunto- ¿Qué tal si le ah sucedido algo?.

- Es la primera vez que te veo tan preocupado por ella - dice Alya.

- Es mi mejor amiga - contesto- ¿A caso no debería preocuparme por ella?

- Tampoco es para que conteste así - dice serio Nino.

- Lo siento - me disculpo.

- La última vez que fui a su casa, vi a sus padres discutiendo - sincera Alya- supongo que no es nada facil ver a sus padres discutir a la vez tratar de superar el rechazo del chico que le gusta.

- ¿Quién es el chico que les gusta? - pregunto por curiosidad. Ambos me miran- esperen, ¿Dicen que soy el chico que le gusta?- me señalo a mi mismo y ambos asienten.

Entonces recuerdo la confesión que me hizo hace una semana, pero ella me lo dijo que era una simple broma. Rayos.

- Pensé que era una simple broma... ademas, le dije que me gusta otra persona. - confieso.

- Bro, lo siento, se que soy hermoso pero no voy por ese bando - bromea Nino. Recibe un codazo por parte de Alya.

- Idiota - murmura y luego se fija en mi- no te culpo, a veces Mari actúa un poco... tonta - parece que le costo decir esa palabra.- ¿Conocemos a esa chica que te gusta?- niego.

- Es alguien a quien conoci en mi trabajo- me excuso- pero ella ya tiene a alguien mas al parecer- dijo con tristeza- pero aún así, quiero enamorarla.

- Escucha, se que esta aconsejar al chico que le gusta mi mejor amiga para que conquiste a otra.

- La verdad, si suena mal- interrumpe Nino y Alya lo mira mal. - ¿Qué? Es la verdad, es como traición para ambos géneros.

Justamente toca el timbre indicando que teníamos retomar las clases, como siempre, todo a su curso. Todo normal, cuando vuelve a tocar el timbre, para todos es libertad menos a mi. Ya visualizo la limusina al igual que el guardaespaldas que contrato mi padre o como mi mejor amigo lo suele llamar "Gorila".

[...]

Visualizo a mi padre llegar, el fotógrafo va a hacia él y por su rostro, seguramente se esta quejando de mi. Pero solo lo mira con la misma expresión de siempre. Cambia su vista hacia y yo la esquivo de inmediato, escucho unos pasos acercándose y se que es él. No quiero hablarle pero de todos modos tengo que hacerlo. ¿Por qué mi vida es tan difícil?!.

- ¿Ahora qué sucede?- pregunta con frialdad.

- Nada. No sucedé nada- digo- como si te importará- murmuro por lo bajo.

- ¿Que dijistes?.

- Nada. -lo escucho suspirar.

- Agradece que eh venido. ¿Sabes cuanto dinero estoy perdiendo por estar aquí? Incluso pierdo dinero porque no haces bien tu trabajo. -dice mientras pone su mano sobre su frente, sus palabras duelen- eres igual a tu madre. Irás a casa. - ordena.

Sin decir nada, los dos nos vamos e ingresamos al auto negro que estaba estacionado afuera. En el camino no dijo nada y lo agradezco, mis pensamientos se concentran en Marinette, la duda y la preocupación me invade. Sin darme cuenta, ya habíamos llegado, salí del auto y antes de cerrar la puerda del auto lo mire fijamente.

- No te eh pedido que vinieras para empezar menos te eh amenazado o apuntado con un arma, tampoco hice un escándalo. Yo no pedí ser modelo y no soy un empleado, soy tu hijo. y con mi madre no te metas, el asunto es entre tu y yo, no ella - dicho eso cerra la puerta del auto en su cara y me diriji hacia la casa.

- Veo que el niño tiene carácter- comenta Plagg ya fuera de su escondite.

- Plagg, escóndete no estamos en mi habitación. -ordeno.

- Tampoco es para tanto- dice y vuelve a meterse en mi mochila.

[...]

- ¡Plagg!

- ¡Yo no fui fue esa mujer!- contesto rápidamente.

- ¿Que?.

- ... Nada. - volvió a su postura desinteresada - ¿Qué quieres ahora niño?.

- Estaba pensando en visitar a Marinette, pero no sabría decir con que personalidad debería ir.

- ¿A que te refieres?.

- Si debería ir como alguien solitario y falta de cariño o alguien alegre y coqueto - digo- ¿Que opinas?.

- Que eres un idiota. Ni los anteriores portadores que me tocaron eran así de estúpidos por una humana - responde Plagg y frunzo el ceño.

- Gracias por la ayuda. - digo sarcástico.

- Solo se tú mismo, un chico estúpido con problemas de personalidad - sugiere.

[...]

La visualizo, esta apoyada sobre el balcón por lo que veo, me acerco con mucho cuidado y sigilo y cuando estoy literalmente a sus espaldas le toco los hombros y siento como se estremece. lo que si no me espere, fue recibir un puñetazo directo a mi mejilla. Cayendo directamente al suelo.

- ¡¿Chat Noir?! -la escucho gritar. y va hacia a mi ayudándome a ponerme de pie- ¿Estas bien? ¿Te duele demasiado?.- dice mientras toca mi mejilla.

- Bueno golpe, princesa - digo con una media sonrisa- pero debería mejorar su fuerza porque ni si quiera me dolió - digo con seguridad mientras que por dentro me quejo de dolor. ¿Es que acaso entrena?.

- ¿Qué haces aquí? - pregunta seria.

- Quería pedirle un favor - digo con sinceridad- sobre si me podías ayudarme a conquistar el corazón de my lady.

- Lo siento Chat, no estoy de humor para ayudar a nadie. - dice decaída.

Y es cuando la mire con atención, sus ojos no mostraban brillo y parecen estar rojos, ah llorando y de cierta manera, me duele verla así.

- ¿Hay algo que te preocupa Marinette? - pregunto pero ella niega.

- No, no es nada .

- Sea nada o no sea importante puedes decírmelo, se que... no somos cercanos pero puedes confiar en mi. Pero se que no estas bien. - afirmo-No se como... pero te ayudaré y te protegeré, pero no me mientas, no te mientas -la envuelvo en mis brazos y siento sus delgados brazos rodearme.

- Toda mi vida fue una mentira- dice para después llorar en mi pecho.

Nuestro Mejor Error [Cancelada]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora