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El día siguiente luego de haber conocido a Jimin, fué complicado, caía un día sábado y se supone que Yoongi iba a hacer horas extra este día pero al final las canceló, su jefe no podía decirle nada tampoco ya que nunca ha fallado en su trabajo.

Jungkook también por otro lado tenía ganas de juntarse con él pero, sinceramente Yoon prefería estar con Jimin y enseñarle las cosas básicas que a este se le olvidaron, según el hibrido dijo había muchas cosas que le costaba hacer solo.

Min se había levantado un poco temprano, hacía un hermoso sol afuera junto con algo de calor, por lo que al bajar apagó la chimenea sin hacer mucho ruido ya que Jimin dormía muy tranquilo y se le veía cómodo.

Pasó las manos por su cabello ordenándolo mientras veía al jóven dormir placidamente en el sillón, por como estaba desordenado y algo de la ropa que traía dejaba ver un poco de su piel pudo notar aún más esas pequeñas cicatrices que tenía, dió un corto suspiro a sí mismo decidido a hacerle un rico desayuno.

Fué directamente a la cocina mientras bostezaba algo cansado, dispuesto a hacer unos ricos hot cakes para el recién llegado, le colocaría algo de miel o si este quería podía ser caramelo.

Mientras Yoon cocinaba por otro lado Jimin abría sus ojos perezosamente luego de una maravillosa noche donde dormió como nunca antes, el causante de que este despertara era el delicioso aroma que provenía de la cocina.

Se levantó poco a poco aún adormilado para azomarse a la cocina observando al pelinegro cocinar el desayuno, apoyó su cabeza en el marco de la puerta prestando atención como movía su mano con el sartén en esta esperando que se hiciera aquella rica masa.

En un momento Yoongi se giró para dejar ciertos platos en el mesón de enmedio donde comerían, entonces pudo ver a Jimin el cual le sonrió.

—Hey, buenos días... ¿Hace cuanto estás ahí parado?

El hibrido rió y se aproximo para sentarse en un lado de la mesa decidido a hablar con él ya no tan tímido.

—¿Unos minutos? Huele muy bien.

Observó aquellas masas planas acumuladas en un solo plato, su estómago rugió por el hambre y eso lo avergonzó, Yoongi escuchó eso y tomó el gran plato dejandolo sobre la mesa para sentarse frente a él esperando que decidiera comer.

—Aquí tienes, sírvete.

Jimin mordió sus labios sintiendo el aroma entrando por su nariz totalmente fascinado, admirando la rica comida.

—Okey.. Yo lo haré.

Yoongi soltó una pequeña sonrisa y con su tenedor le dejó varios panqueques a su plato, por último agarró la miel extremadamente líquida y empezó a echarla sobre las masas.

—Mira... Agarras el tenedor así y el cuchillo así.

Yoon le enseñó a Jimin en pocos minutos como cortar los Hot Cakes y comerselos, por otro lado el hibrido estaba en el cielo, disfrutando cada bocado de la comida tan rica que le había preparado Yoongi.

Su boca se encontraba algo llena, masticando poco a poco siendo observado por el contrario, entonces cubrió su boca, de seguro se veía como un cerdo, pero al tragar todo, habló.

—Lo siento, sólo que está... Muy rico.

Sonrió nervioso sintiendose algo intimidado por la profunda mirada del contrario.

—No te preocupes, la mayoría de las comidas se comen así, con ambos utensilios, así no te ensucias ni nada.

Jimin asentía obediente a lo que él decía, entonces Yoongi con ambas de sus manos agarró la jarra con jugo de durazno aproximándolo al vaso de vidrio que era para Jimin.

¿Hibrido?¿Mi Mascota? [EN EDICIÓN]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora