Moon Night II

Cap 19

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Largo por ustedes <3

Ela

Su cabellera rubia caía sobre sus hombros con elegancia. Su mirada era una mezcla de ira y duda. Giré el rostro hacia Ayden, quien se levantó y colocó al frente, cubriéndome por completo de mi tía. Sabía que ella era peligrosa, pero no iba a hacerme daño.

-Tranquilo es hermana de mi madre, la gran luna.

Dania comenzó a caminar hacia ambos.   Chasqueó sus dedos y escuché como algo cayó sobre el suelo. Loreine estaba frente a ambos, llevaba sus prendas de dormir y sus ojos bañados en lágrimas.

-Me encontraba en mis tierras Ela. Uno de mis fieles se quedó para cuidarte cuando partí, se encargó de vigilarte e indicarme si cometías alguna falta.

-No tuviste porque hacerlo, sé cuidarme sola.-solté enojada.

-Cuida tu tono, pequeña reina. Me notificó que andabas muy cercana a tu guardia personal. Tenía que venir a confirmarlo, pensé que eran rumores hasta que vi a tu dama llorando en el pasillo.

Loreine soltó un sollozo. Tyson, hermano de la gran luna y mi tío apareció detrás de una columna. Tomó a mi amiga de los cabellos y tiró.

-¡Basta! ¿Qué crees que haces?

-Tratando a los sirvientes como se merecen. ¡¿Qué crees que hacías zorra?!- golpeó sus costillas.- No tienes derecho a husmear detrás de las puertas de tu reina.

-Suéltala.-pedí temblorosa.

Tyson la dejó.

-He decidido darte una pequeña lección, querida sobrina.-prosiguió la luna.

-¿De qué hablas? Yo no he hecho nada.

-Aún, esta es solo una advertencia.

El cuerpo de Loreine comenzó a removerse, sangre brotaba por sus fosas nasales. Su respiración cada vez se hacía más rápida hasta que soltó un grito.

-¡No!-grité con todas mis fuerzas.

El cazador me tomó entre sus brazos y me apretó con fuerza. La vida se desprendía de ella. Sus ojos azules no dejaban de perder su brillo. Temblores invadieron mis extremidades. Quería matarla.

-No lo hagas.-susurró en mi oído.

Estallé, los vidrios de mis ventanas se rompieron. Una lámpara cayó al suelo. Dania soltó una leve risa, Loriene había perdido la vida.

Un charco de sangre rodeaba su cuerpo. El cazador trató de retenerme, sin embargo, el dolor me consumió.

Alcé mi brazo derecho y apreté mi puño. Dania comenzó a tocarse el cuello, pero solo duro unos segundos. Una sacudida me llevó lejos.

-¡Ela!

El cazador me cubrió con su cuerpo. Sus ojos se tornaron diferentes. Unos colmillos cubrían sus labios. Traté de ponerme de pie, pero mi pierna se había incrustado con uno de los vidrios. De su pecho salió un gruñido.