Sangre, tinta y un poco de romance [Rohan×Reader]

Cap. 4: Traslado desde el hotel a... ¿casa?

-Vi tu anuncio en el periódico. Tengo una habitación para ti, si te interesa- me dijo una voz al otro lado de la línea.

Conocía esa voz, pero ¿de dónde?

-Bien, sería necesario concretar una cita para disponer todos los términos- dije, luego de aclarar mi garganta. Había estado llorando hasta hace poco, y la voz aún me salía algo nasal.

-Oye, ¿estás bien? Te oyes algo extraña...

-Ehhh... sí, estoy bien- contesté, extrañada - Por casualidad... ¿te conozco de algún lado?

Una risa burlona se hizo audible. Pero no hubo respuesta a mi pregunta.

-Nos encontraremos mañana si te parece bien- dijo simplemente, y luego me pasó la dirección del café al que había ido el día anterior.

Y después de eso, simplemente colgó.
Me quedé de una pieza, y al instante me sequé la última lágrima que estaba corriendo por mi mejilla.

Time skip

Después de la llamada de ese sujeto, comencé a organizar mis pocas pertenencias, dispuesta a llevar a cabo la mudanza lo más pronto posible. Sé que aún tenía cosas que arreglar y discutir (cómo cuánto me costaría alquilar la habitación, dónde quedaba su casa, sin mencionar que ni siquiera sabía quién era ese tipo), pero ya quería estar lista para dejar ese hotel lo más rápido que se pudiera.

Me había costado dormir a la noche. No podía dejar de darle vueltas al asunto de la muerte de Higashikata, ni al tema de mi inminente mudanza.
Deseé con todas mis fuerzas que quien me había llamado no se tratara de un estafador o algo por el estilo.

Desperté sobresaltada con el sonido de mi reloj de mesa. Me había quedado dormida sin siquiera notarlo, y comprobé sobresaltada que no fuera tarde para mi cita. Gracias al cielo, me había despertado a tiempo para prepararme y salir pitando hacia el café.

Me vestí más formal de lo que normalmente lo haría (debía quedar bien ante el sujeto que me alquilaría). ¡Incluso me tomé la molestia de ponerme algo de perfume!

Llegué al café antes de tiempo, ya que soy una persona que se puede jactar de ser capaz de prepararse con rapidez. No sabía cómo reconocería al tipo, ya que no me había dado ningún rasgo suyo, pero decidí confiar en mi instinto.

-Me sentaré por ahora... y ya sabré cuando lo vea- me dije por lo bajo, tomando asiento en una de las mesas.

Esperé un rato, hasta que vi un lujosísimo deportivo rojo estacionarse en la vereda. Traté de hacerme la desinteresada, pero realmente aquel auto resaltaba a la vista, y era muy difícil no fijarse en él. Me quedé observando hasta que el conductor bajó.

Mis ojos no creían lo que veían.

-No. Puede. Ser...- solté, sintiendo que se me aflojaban las mandíbulas.

No era otro más que el presumido-sensei de cabello verde y bandana en la frente...
Rohan se acercó a mí al verme, y con descaro apoyó su mano sobre mi mesa, inclinándose hacia mi.

-Buenos días, detective-chan- dijo, en tono de burla.

-Qué tal, fracasado-kun- contesté, imitando su tono.

Él sólo rió, y tomó asiento frente a mí.

-Oye, oye compañero, que hoy ese asiento está reservado para alguien más- le advertí, cruzando los brazos.

-Oh, he de suponer que tienes una cita entonces... No imaginaba que (T/N)-chan fuera del tipo "sociable".

-Me tratas con demasiada confianza, Kishibe-kun... Ahora, fuera de aquí, antes de que llegue quien estoy esperando- mientras decía ésto, lo espantaba con un movimiento de manos.