Dark.

I

Un ruido agudo me hizo despertar de un brinco de la cama. Mi hermano de 6 años, Luke, tenia puesto un silbato en mi oido.

- ¿Pero qué estas haciendo Luke? Te he dicho mil veces que me dejes en paz por las mañanas. Que pesado es dios.

Estaba de mal humor, lo cual era normal en mi. Siempre estaba cabreada o cansada y mi caracter no era precisamente el mas dulce del mundo.

Tambien era tímida, lo cual, junto con mi mal carácter hacian un cóctel explosivo.

- Me dijo mamá que te despertara - Dijo Luke.

Luke, un niño pequeño más, me llevo 12 años con el, lo cual hace mas dificil todavia la convivencia porque el solo quiere jugar y yo paso del pilla pilla.

Cuando tenia 6 años mis padres decidieron engendrar a un mini yo, algo que, desde mi punto de vista fue un error. Nadie quiere a un pesimista en su vida y mucho menos si son dos.

- Bueno, sal de mi habitacion y dile a mama que ya bajo.

Luke salio de mi habitacion y me sente en el borde de la cama. Era otro Lunes mas, y a la vez otro menos que me quedaba para acabar el instituto.

No habia cosa que deseara con mas ansia que salir de aquella cárcel llena de idiotas.

"Un poco más" me repetia todas las mañanas al salir de casa.

Me duche y me vesti lo mas rapido que mis dormidas extremidades me permitieron y salí de casa con toda la tranquilidad del mundo.

Al llegar al instituto, me encontre con Jade, mi, por asi decirlo, compañera.

No era la mejor del mundo encuanto a lo que hacer amigos se refiere. Nunca habia sido social y si alguna vez lo fui, mi caracter lo arruinó.

- ¡Hola! - Dijo Jade.

Jade me caia bien por el hecho de que ella era todo lo contrario a mi, alegre, positiva y sociable, aunque a veces no la soportaba.

- Hola. - Seca y ronca, asi sonó mi voz.

- Valla, parece que alguien se ha levantado de buen humor esta mañana...

- Tu con tu ironía como siempre Jade.

Las dos entramos dentro del edificio y Jade se fue a su clase.

Me estaba haciendo pis porque no me dio tiempo esta mañana en mi casa asi que fui al baño de chicas donde siempre estaban las mismas. Cloe, Dana y Trish, o como yo las llamo, el trío de plástico.

Pasé por delante sin ni siquiera mirarlas a los ojos y me senté en el water donde me quedé dormida.

A los 20 minutos, me desperté de un salto y mire mi reloj.

- Mierda... llego tarde. - 20 minutos exactamente. Que bien, tarde a la primera clase de la mañana.

Corrí escaleras arriba hacia el ultimo piso y llamé a la puerta del aula.

- ¿Se puede? - Pregunte casi sin aliento. Espero que no me eche la bronca este hombre porque es lo unico que me falta.

- Si, se puede llegar antes señorita Evans.

- Lo siento, me quedé... - Estuve a punto de decir water pero gracias a dios mi cabeza se habia despertado y reaccioné a tiempo. - traspuesta en mi cama. No volverá a pasar.

- Eso espero. Y yo..

Entré y me senté. Me habia salvado a mi misma de una situación de ridiculo asegurada. Saqué mis cosas de la mochila aunque no se muy bien para que porque hize de todo menos atender y tomar apuntes.