XXVIII

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Llegé a casa y Jade estaba sentada en el salón.

- Hola Jade.- Cerré la puerta detrás de  mi y lanzé las llaves a uno de los cajones de la entrada.

- ¿Qué pasa?- Tiré mi bolso al suelo y me senté a su lado en el sofá.

- Esta mañana me llamó un numero desconocido diciéndome que tuviera cuidado.- Jade se incorporó un poco para prestar más atención.- Me dijo que Harry ya no me pertenecía.

- Será algún loco Alex, no hagas ni caso.

- He estado en casa de Harry y había salido con una tal Carly, ¿Sabes quien es?- Jade negó con la cabeza y encogió los hombros.- Pues yo tampoco.

- A ver, veámos el lado positivo, probablemente esta tal Carly quiera ligarse a Harry pero él aún te quiere Alex, seguro.- Suspiré.- El otro día estuvo aquí. Abrí los ojos y la boca casi al mismo tiempo.

- ¿Cuando?

- Cuando habías salido para comprar.- Rodé los ojos.- Llamó y no me esperaba que fuese él la verdad.

- ¿Y qué te dijo?

- Me preguntó por ti y me dijo que te dijera que te extrañaba mucho.- No puede ser.

- ¿Y ahora me lo dices?

- Me olvidé, lo siento tía.

- No pasa nada.- Me acerqué a ella y la abrazé.

Cogí mi móvil del bolso y llamé a Harry.

Narra Harry:

Mi móvil volvió a sonar después de tres veces.

- Harry, cógelo.- Dijo Carly sin aliento.

- No, da igual.

No me iba a estropear el momento. El orgasmo estaba por asomar y no quería parar.

- Ah...- Gimió.

Carly era una chica nueva en mi vecindario y ya la tenía en la cama. La conocí ayer por casualidad cuando llamó a mi casa en busca de un poco de sal.

Al acabar ella salió de su habitación y fué al baño.

Cogí el telefono y miré las llamadas: 5 perdidas de Alex y 3 de Jade. Pensé que debía llamar a Alex, para ver que era eso que tenía que contarme tan importante como para llamarme tantas veces. Siempre he sido yo el que iba arrastrándose detrás de ella y ya me he cansado. Si ella va a seguir jugando a dos bandas, que se olvide de mí.

- ¿Harry?

- Hola Alex, ¿Cómo estas?- A pesar de todo lo que había pasado entre nosotros y que yo me acababa de follar a otra, su voz seguía provocandome escalofríos solo de imaginarla en mi oido.

- Necesito hablar contigo Harry, te necesito.- <<Te necesito>>. Nunca había oído esas palabras de la boca de Alex y mucho menos pensaba oirlas después de tanto tiempo.

- Voy a tu casa.

- Te espero.

Colgué el telefono y me vestí. Salí de aquella casa como pude mientras que Carly se duchaba. De nuevo huyendo Harry...Necesitaba ver a Alex. Estaba claro que Carly solo era una distracción para mi a pesar de que yo tratara de convencerme de lo contrario.No tardé en llegar a la casa de Alex. Abrió la puerta y me quedé embobado mirándola. Estaba despeinada con una camiseta larga que si no recuerdo mal, era mía, y descalza. Perfecta, pensé.

- Harry...- Entré y la atrapé en mis brazos enpotrándola contra la pared.- Te quiero Harry.

- Alex, dios mio, te he echado tanto de menos...- su boca estaba en mi cuello acariciándolo lentamente mientras mis brazos agarrában sus delgadas piernas provocando que Alex se alzara.

- Ven aquí.- Cuando sus labios comenzaron a rozar a los mios, pensé que había muerto y vuelto a nacer. Echaba tanto de menos esos labios que pensé en comérmelos.Alex se quedó abrazada a mí después de besarme.

- Prométeme que no volverás a irte.- Dijo en mi oido.

- Jamás me he ido, Alex, te amo.- Cuando besé su cuello ella gimió. Extrañaba que esos gemidos nacieran por mi culpa de ella. Encogió sus hombros por las cosquillas de mis labios en su cuello y sonrió.Estaba tan perfecta que no besarla habría sido delito.

- Te he extrañado tanto Harry...- Ahuequé su cabeza en mis manos y rozé su nariz con la mía.

- Jamás lo harás de nuevo pequeña.- Una sonrisa brotó de sus labios al escuchar mi nuevo mote. "Pequeña". Sonaba genial si se lo decía a ella. Sus brazos volvieron a enrollar mi cintura y su cabeza se posó en mi pecho.

Alex era tan diferente a todas.

Normalmente si veía a una tía que estaba buena, mi mente se ponía en modo depredador y solo pensaba en follar. Pero con Alex, eso desaparecía. Con ella solo quería tumbarme encima y besarla cada parte de su cuerpo por pequeña que fuese. Con ella solo quería acariciarla hasta que sus ojos se cerrasen de sueño. Con ella todo era diferente. Ella me hacía diferente.

Alguien rompió el precioso momento que estabamos teniéndo en el sofá. Ella estaba tumbada sobre mi pecho acariciando mis tatuajes y besándolos uno a uno. Se levantó y fué hacia la puerta. Se quedó paralizada al ver a la persona que había al otro lado.

¿Quién sería el o la idiota que había roto este momento? ¿Y porqué Alex se había quedado quieta?

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Chicaaaaaaaas!

Siento no haber subido cap ayer but se me olvidó por completo pero ya esta, ¡aqui está el nuevo cap de esta semana!

Os quierooooooo

Dark. Donde viven las historias. Descúbrelo ahora