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Capítulo 6: Ahora o Nunca.

"Ya hemos pasado por todo eso, pero tú nunca pudiste decirlo por mí. Intentando hablar con una pared, pero nunca pudiste derrumbarla por mí".

Now Or Never – Halsey.

D I A   1 7   -   P A R T E   D O S  :  L U S T F U L   S I N

Ignorando el estado de su mejor amiga, Lena volvió a su trabajo. Entró a la sala de descanso y se cambió rápidamente, incapaz de escuchar los sollozos de Luna gracias a los suyos propios. Tenía que calmarse, quizás Minhyuk no valía la pena después de todo. Se miró al espejo y retocó su maquillaje mientras escuchaba en sus audífonos alguna canción ruidosa de las que Luna mantenía en la banda sonora de su auto. Se colocó bien los zapatos, se secó por última vez las lágrimas y decidió ir con J–Hope primero, ni de chiste iba a ir con Jimin así.

El pelirrojo la miró cuando atravesó la puerta, dispuesto a recibirla con una de sus enormes sonrisas hasta que notó sus ojos hinchados. La preocupación se hizo presente en su rostro, mientras la chica se disponía a caminar hacia sus medicinas y tomaba una pluma para escribir en el tablón de su informe. Se acercó a ella, con un poco de miedo.

– Lena, ¿estás bien?– le preguntó, mirándola atentamente.

La pelirroja se secó las lágrimas y miró hacia arriba para contenerlas.

– Sí, J–Hope, estoy bien, tranquilo– le mintió, terminando de escribir las medicinas que debía darle. Pero a pesar de que no le tembló la voz, Hoseok estaba lejos de ser estúpido.

– ¿Fue Minhyuk? – le preguntó, haciendo que Lena parara en seco.

– ¿Cómo sabes sobre Minhyuk?– preguntó ella, decidiendo voltear a mirarlo.

– Luna vino hace un rato a verificar que estuviera bien, le pregunté dónde estabas y me dijo que estabas con él –contestó, alzando los hombros–. Tranquila, no te estoy acosando.

– Bueno...

Lena no pudo evitarlo y volvió a llorar como una idiota, odiaba llorar frente a la gente. Sin embargo, J–Hope reaccionó rápidamente y la enterró entre sus brazos. Era la primera vez que Lena abrazaba a alguno de los pacientes, pero necesitaba tanto ese abrazo que no dudó en aceptarlo. Las manos de Hoseok acariciaban su cabello, mientras él intentaba arrullarla con una canción que ella no conocía muy bien, pero se la había escuchado un par de veces a Luna en su estudio. Le pareció raro que Hoseok la cantara, pero no emitió ningún comentario.

– Vales mucho más que esto, Lena –murmuró–. No llores por él, no vale la pena.

Los ojitos de Lena se toparon con los de J–Hope, quien la miró con ternura. Hoseok y V le recordaban tanto a Luna, eran simplemente personas dignas de amar. El pelirrojo secó sus lágrimas con sus pulgares y la motivó a seguir.

– Ya, ¿sí? Todavía falta un tiempo para que vuelvas a casa y tienes que ir a ver a Jimin. Todo va a estar bien, te lo prometo. Y si necesitas algo, estaré aquí.