El sonido de los disparos aún yacen en mi memoria.
Aún recuerdo su sonrisa bajo un cielo en llamas, su vestido azul marino le llegaba hasta las rodillas y sus rubios rizos hasta su escote. Sus ojos color almendra tenían una suave expresión risueña y su risa... Podía llenar el vacío de miles de corazones.
Recuerdo el brillo de sus ojos al llegar al campo repleto de tulipanes, recuerdo el tacto de su mano sobre la mía. De sus labios sobre los míos, dulces como viento primaveral. Recuerdo su dulce voz al decir; "Sastian... Eres mi razón de vivir " y como mi cuerpo se desintegró ahí mismo, como mi alma se fundió con los tulipanes y antes siquiera de darme cuenta de mis actos percibí mis manos sobre su cintura y las suyas sobre mis hombros. Sentí sus dulces labios sobre los míos, y olvidándome de la necesidad de respirar me dejé perder entre aquel beso bajo un cielo en llamas.
Bajo un cielo en llamas...
Caminábamos sin rumbo, tomados torpemente de las manos cuando lo escuché. Un inconfundible sonido seguido de un dolor desgarrante, caí sobre los tulipanes manchándolos de un rojo carmesí y sobre un cielo en llamas vi sus ojos, el brillo se había disipado y su sonrisa era un amague de confusión. La oía decir mi nombre incontables veces y eso dolía más que la bala en mi pecho, eso dolía más que estar muriendo.
El sonido de los disparos aún yacen en mi memoria.
Aún me despierto en mitad de la noche viendo su rostro.
Aún me despierto en mitad de la noche pronunciando su nombre.Sastian...
Oí los disparos antes de verlo caer, de repente las flores eran de un fresco rojo carmesí. De repente sus ojos se habían apagado... Recuerdo decir su nombre, como si eso hubiera podido salvarlo pero incluso en ese momento de desesperación, él había aceptado su muerte y me había regalado una última sonrisa.
Aún voy al campo de tulipanes, y me recuesto en el suelo como si fuera su pecho.
Aún lloro bajo el cielo en llamas.Aún lo amo.
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Las historias de Lucia
PoetryY es que he abierto mi alma a un cuaderno sin causa explicíta, ni interes de ser complice de mis tontos sentimientos. Pero siento que cada palabra que va llenando poco a poco los renglones de este cuaderno, se vuelve parte de algo indirecto , escond...