Capítulo 7.

26.4K 2.6K 528
                                    

Mi respiración está entrecortada, no digo ni la más mínima palabra. Sophie me observa con algo de temor, sus ojos muestran algo de arrepentimiento tal vez pensando que no debió decir aquellas palabras... y no debió decirlas, no quería que dijera algo así para ablandar mi corazón.

—Es extraño escuchar... eso.

—Lo siento, no debí decirlo.

Sophie coloca su brazo por encima de mi cintura y me lleva hacia ella, acaricia mi cabello con su mano izquierda mientras empieza a tararear una canción.... Una muy conocida. Por un momento mis pensamientos se despejan y mis músculos se relajan; Eli me cantaba hace años sea canción cuando no podía conciliar el sueño, según mamá la inventó para sus hijos.

Cierro los ojos y concentro cada célula de mi cuerpo en los tonos que entona mi hermana, de alguna manera me hacen sentir más cerca de mamá. Sophie para un momento, levanto mi mirada hacia ella y veo que unas lágrimas han sido soltadas.

—¿Estás bien?—pregunto preocupada.

—Ella va a estar ahí, ¿verdad?

Pienso un poco antes de responder, asiento.

—Claro que si, Soph.

Estoy segura que quería escuchar aquellas palabras.

Otro silencio largo se pronuncia entre nosotras hasta que ella vuelve a tomar la palabra.

—No puedo decir nada a favor de Gaston, Hanna—masculla ella en voz baja—, pero tienes que tener en cuenta que todos pensamos que lo tuyo era un enamoramiento nada más... No pensamos que fuera tan serio. Por Dios, tan solo tenías diez años cuando lo conociste y hasta entonces...

Se interrumpe.

—Y hasta entonces no he hablado con él—termino por ella. Me mira disculpándose—. No me mires así, Soph, es así.

—Lo siento.

—¿Sabes que es lo que realmente me molesta? Sophie, estuvimos más de tres meses compartiendo, y él lo prometió, prometió que llamaría, que mantendríamos el contacto siempre, solo duró unas cuantas semanas, luego... rompió su promesa.

≫Sabes que en ese entonces no tenía amigos, me era difícil hacerlos. Gaston llegó como una nueva oportunidad, y sí, tal vez era una pequeña niña, pero todos me decían que era muy madura para mi edad y me lo creí.

—Lo eras, Hanna. Era impresionante como podías mantener una conversación seria y profunda con adultos. Incluso Elizabeth no podía hacerlo en algunas ocasiones.

—Bueno, solo me gusta leer y mantenerme informada sobre el pasado y presente—hago un encogimiento de hombros algo extraño por la posición en la que me encuentro—. Después de que Gastón dejó de llamar y preguntar por su libro... me sentí mal. Me sentía algo sola, solo mis libros me reguardaban. Eli empezó a salir con Tyler, Papá le dedicaba más tiempo a Patricia, Connor se fue a la universidad con Daisy y tú estabas muy lejos de aquí. Fueron meses difíciles... hasta que conocí a Liana y ella me enseñó a saber integrarme un poco más con los demás. Luego vino América y Logan en un combo con sus problemas amorosos.

Río un poco recordando aquellos momentos de esos dos. Ahora Logan y América estudian en los Estados Unidos, específicamente en la Universidad de Alabama.

—¿Por qué nunca me llamaste?

—Porque no era lo mismo, Sophie. Además, no quería molestarte, ya tu tenías hecha tu vida en Francia.

—Me siento mal—me incorporo rápidamente.

—No te dije esas cosas para que te sintieras mal, solo querías que supieras porque reacciono de esta manera, Soph.

—Prometo patear las bolas de Gaston cuando lleguemos a Paris.

—Tendré que verlo en algún momento, ¿verdad?—pregunto con algo de temor.

—Sí, Hanna. Eres mi hermanita adorada y eres una de las personas más importantes en mi vida. Pero Gaston también lo es y no puedo dejarlo a un lado.

—Lo sé, no me molesta eso.

Ella se endereza sobre la cama moviendo sus manos nerviosamente. Tiene miedo de decirme algo. Le pido que me diga que le sucede.

—Le pedí que fuera el padrino de la boda... y como pensé que aun hablaban... le dije que quería que tú fueras su acompañante.

—Oh.

—Puedo decirle que olvide esos planes y...

—No, Sophie—niego con la cabeza con convicción aunque en este momento me sienta como una mierda. Debo hacerlo por mi hermana. Esa chica hizo mucho por mí, ahora yo tengo que devolvérselo con este pequeño gesto—. Es tu boda y si tengo que caminar junto a Gaston tal vez en asqueroso vestido rosado de dama de honor, lo haré. Te ayudaré en todo lo que necesites y te prometo que este paso tan grande que darás nunca en tu vida lo olvidarás.

Wow, primero no pensé que el capítulo saliera tan largo (No me acostumbro a llegar a las 800 palabras, siempre son 500) y segundo, no tenía planeado subir algo hoy

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Wow, primero no pensé que el capítulo saliera tan largo (No me acostumbro a llegar a las 800 palabras, siempre son 500) y segundo, no tenía planeado subir algo hoy. Pero como siempre, Hanna lo impuso, esa niña no me deja descansar xD

Ya sé, ya sé, estamos por llegar al capítulo diez y aun no aparece Gaston, ¿dónde está? Pronto, les prometo que cuando menos se lo esperen llegará. Solo necesito atar algunos cabos sueltos :)

¿Opiniones sobre el capítulo de hoy?

Capítulo dedicado a una persona que no sé cómo se llama pero el cual tiene escrito en su perfil *Inactiva*... No estás tan inactiva en esta historia 7w7 Gracias por tus comentarios.

Sé que me piden dedicaciones, esta vez lo estoy haciendo diferente a los otros libros y los escojo entre sus comentarios completamente al azar :) Para que sea un poquito más justo. Trataré de colocarlos a todos, pero son pocos capítulos y son demasiadas personas las que leen. Quiero darle gracias por darle una oportunidad a mis historias, nunca pensé que fueramos a ser tantos... ¡Y vamos por más!

Nos leemos pronto, intocables :)

Nos leemos pronto, intocables :)

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Entre campanas de boda| Los Intocables #8Donde viven las historias. Descúbrelo ahora