Capítulo 17.

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Él está aquí y creo que es la cosa más incómoda del mundo. Mis hermanas, Tristan y Gaston hablan tranquilamente sentados en los sofás de la casa, yo también estoy ahí pero solo escuchando las cosas que hablan sobre boda. Trato de no intervenir... al menos no demasiado, más aun cuando Gaston me lanza algunas miradas desde el sofá frente a mí en el cual se encuentra sentado.

Quisiera subir y encerrarme en la habitación para leer algún libro, pero no quiero hacerle ese desplante a mi hermana, tenía meses sin estar junto a ella y a pesar de que está intensa trato de seguirle la corriente y pasar el mayor tiempo posible cerca de ella.

He querido hablar con ella sobre lo que Liana me contó el otro día. ¿Existe la posibilidad de que mi hermana esté embarazada? Lo sospeché por un momento y cuando Liana me dijo aquello se intensificaron mis dudas. Si fuera así estaría feliz por Sophie, también por Tristan, harían los papeles de padres increíblemente bien.

—¿Aún lo tienes, verdad?—escucho la pregunta de Gaston pero no me doy cuenta de que es conmigo hasta que siento la mirada de los presentes sobre mí.

—¿Qué?

Él sonríe con ternura y me provoca clavar un tenedor sobre su ojo para hacerlo sufrir. Vale, muchos libros de terror, ya están afectando mi cerebro.

—El libro edición limitada, tapa dura, firmado por Ann Phillips. ¿Aún lo tienes?

Ah, el libro.

—Está en un lugar seguro, prometí que lo cuidaría y yo no rompo mis promesas.

—¡Auch!—exclama Sophie.

No soy consciente de lo que dije hasta que mi hermana suelta aquella exclamación. ¿Cómo pude decir tal cosa? ¿No se supone que ya lo habíamos arreglado, cerebro? ¡Joder! Un silencio pronunciado se forma en la sala, la tensión en el aire puede cortarse con un cuchillo. Siento la mirada penetrante de Gaston en mí y es en ese momento que sé que tengo que decir algo.

—Entonces... ¿Ya elegiste el pastel de la boda, Sophie?

¿En serio Hanna, realmente dijiste eso?

—Uhm no, aún estamos probando...

Le agradezco a mi hermana por no decir el deberías saberlo, Hanna, has estado para arriba y para abajo conmigo y sabes todo lo que está sucediendo con los planes de la boda. Aunque todo el mundo es consciente de eso.

Elizabeth afortunadamente elimina un poco la tensión iniciando la plática de que pronto Tyler estaría con nosotros, al igual que Connor y Daisy, pero eso no significa que el ambiente haya cambiado completamente, Gaston ya no habla y eso me hace sentir un poco mal.

No debí decir aquello.

Me disculpo con todos con la pobre excusa del dolor de cabeza para poder encerrarme en mi habitación, no espero a que nadie responda cuando empiezo a subir de dos en dos las escaleras. Me interno en la habitación sencilla que Sophie había preparado para mí y sin pensar tomo un libro para empezar a ojearlo... pero no cualquier libro sino aquel de edición limitada, tapa dura, firmado por Ann Phillips del que había hablado Gaston.

No me doy cuenta de que la puerta es abierta hasta que le escucho hablar.

—Tienes razón, tu si cumples tus promesas.

—Tienes razón, tu si cumples tus promesas

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Hola, hola, perinola.

Solo diré una cosa: La indirecta que dio Hanna fue un completo TDFW.

Capítulo dedicado a una chama xD MedicenNiuska, espero que te guste :)

Recuerden que le dedico capítulo a las personas que estén comentando :) Por cierto, hoy seguí a algunos de ustedes <3 

Ahora si, me voy porque me siento malita :(

Nos leemos.

Nos leemos

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Entre campanas de boda| Los Intocables #8Donde viven las historias. Descúbrelo ahora