11. Enfermedad y familia

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[Tres días después]

Narra Lindsey

Kyle y yo estábamos en un avión rumbo a Corea. No negaré que me asusta volver con mi familia al igual que a él, pero mi madre está delicada y debo estar con ella. Pasaron las horas hasta que finalmente aterrizamos y como me esperaba, ya habían personas aguardando por nosotros en el aeropuerto.

- ¿Crees que haya sido buena idea venir?

- Si te soy sincera, no. Pero ya es tarde para lamentarse, Kyle. -se le notaba muy nervioso pero sobretodo preocupado. Él sabe tan bien como yo que mi padre hará todo a su alcance para que no me vaya; incluyendo usar a mi madre enferma.

- Bienvenida señorita Lindsey y... joven Kyle. El amo estará complacido con su llegada. -dijo con arrogancia el mayordomo y mano derecha de mi odioso padre.

- Gracias, Jeffry. Y ahora si nos permites, queremos ir a ver a mi madre.

- Por supuesto señorita, suban. -y así sin más, nos dirigimos a casa en un incómodo silencio. Estos sin duda serán días incómodos.

[Mientras en San Fransokyo]

Narra Hiro

Lindsey y Kyle se habían ido a Corea por un asunto familiar por lo que yo y los chicos nos ofrecimos para ayudar en el café. Después de todo, con algunos arreglos no sería mucho problema. Baymax y Wasabi se encargarían de la cocina y los demás ayudaríamos en la atención. 

Pasaban los días y todo parecía ir bien aunque no contaba con mucho tiempo libre para investigar sobre la chica de la carta.

Otro día de trabajo había terminado y me hallaba ordenando algunas cosas antes de cerrar. Ese día Sophy se había quedado para ayudarme y fue entonces que entre charlas y bromas surgió el tema de cómo conocieron a Lindsey y Kyle.

- Bueno, es una larga historia. Por mi parte estaba buscando un nuevo empleo ya que eso de trabajar en un puesto de jugos en el mercado como que ya me estaba agotando, y fue entonces que mientras atendía a algunos clientes la conocí. Comenzamos a hablar y me contó que estaba planeando abrir un café temático en la ciudad y me ofreció trabajar ahí. Obviamente acepté y tras renunciar a mi otro empleo, comencé a trabajar en Beautiful Melody. Con las otras fue más o menos así y finalmente nos convertimos en la gran familia que somos ahora; claro que no todo fue siempre perfecto. -se podía percibir cierta nostalgia en su voz y mirada mientras me contaba dicha historia, pero lo último me confundió.

- ¿Qué quieres decir con eso? ¿Pasó algo malo? -no pude evitar preguntar con cierta curiosidad por sus palabras, cosa que ella notó con rapidez.

- Se podría decir que sí. Pasó poco tiempo después de que conocimos a Ruby. Ella siempre ha sido de carácter fuerte y algo rebelde y aquello no hizo más que traer problemas. -respondió con una seriedad muy inusual en ella.

- ¿Problemas?

- Verás, desde el día que conocimos a Kyle, este dejó muy en claro que debíamos seguir órdenes sin reclamar y mantenernos a raya respecto a su vida personal y la de Lindsey. Ruby pareció no entender aquello y buscaba a cada hora del día saber de dónde se conocían, hace cuánto y demás cosas. No había un día en que no estuviese acosando a Lindsey por respuestas pero un día sobrepasó la línea. -ante aquello, su rostro mostró tristeza y dolor por lo que dudé sobre si debía seguir preguntando.

- Mira, si es algo delicado no tienes que contarme. Entenderé. -comenté con una voz comprensiva. Al oírme, ella sonrió débilmente y se limpió unas pequeñas lágrimas que sin querer habían escapado de sus ojos. Luego de ello decidió continuar con su relato.

¿Por qué no me dijiste? -Hidashi- [EDITÁNDOLO]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora