¿Por qué no me dijiste? -Hidashi- [EDITÁNDOLO]

16. Dulce aroma

Bueno, antes de empezar debo darles aviso de que el siguiente capítulo puede llegar a causar severos problemas de depresión y el conocido síndrome de "voy a matar a la escritora" por lo que les pediré dejar sus armas (✂ 🔫 🔪 💣), vegetales (🍅 🍆) y chanclas (👡) en esta caja 📥.

Agradezco su compresión y que disfruten de su lectora.

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Narradora

- Les agradezco que vinieran. Sé que últimamente he sido un tanto mezquina con todos ustedes, pero tengo una buena razón. -dijo Lindsey con semblante serio a los presentes. La amenaza de su padre ya no podía ser ocultada más, ellos debían estar informados.- Por su seguridad no puedo explicarlo todo pero si les puedo decir esto. Yo jamás quise ponerlos en peligro, sin embargo, mi antigua vida finalmente logró alcanzarme y ahora todos ustedes corren peligro.

Nadie decía nada por la sorpresa de aquella noticia. Si bien las chicas del café estaban al tanto del pasado de Lindsey; los grandes héroes no tenían ni idea de en qué se habían metido.

- Bueno, si es tan importante e involucra nuestra seguridad. ¿Por qué no están aquí Hiro y Kyle? -preguntó Honny Lemon algo extrañada por la situación.

- Kyle es consciente de lo que ocurre y no necesitaba notificarle esto. Y Hiro... A él no deseo verlo por un tiempo, pero igualmente necesitaré que ustedes le den el mensaje.

- ¿Y cuál es? -preguntó Fred extrañamente preocupado.

- Para resumir, mi padre es el líder de la conocida Mafiosa Roja y debido a que me negué a casarme con el hijo de otra banda, mi padre amenazó con secuestrar a uno de ustedes. -su voz tan fría y falta de emociones causó que un escalofrío recorriera el cuerpo de todos los presentes; incluidas sus amigas.

- ¡E-Espera un segundo! ¡¿Estás diciéndonos que eres algo así como hija de un yakuza?! -sin duda alguna, Wasabi estaba pálido y al borde de la histeria. ¡Estuvo todo este tiempo conviviendo con la hija del jefe de los criminales y asesinos a sangre fría más temidos del mundo!

- Sí, y aunque él me crió para ser como él; yo jamás aceptaré una vida así. La razón por la que les cuento esto es para que tomen medidas y salvaguardase de mi padre y sus matones que llegaron hace poco a San Fransokyo.