Sin Querer - OnTae

Nueve

Onew daba vueltas en su casa, pensaba en qué hacer. Ahn Woo Yeon le había dicho que reposara ese día, aprovechando que no había clases. Mordió su labio inferior y se cruzó de brazos ¿Debería ir a ver a TaeMin? Fue hacia su ventana e hizo una mueca al ver el clima. El viento soplaba demasiado fuerte, torciendo los arboles ligeramente. Pero eso no era suficiente para detener a Jinki, así que tomo un suéter, se colocó los zapatos y salió a la casa que tanto extraño.
Caminar entre esas olas de aire era difícil, pero no borraban la ligera sonrisa que Onew llevaba, su cabello se movía con el aire al igual que las tiras que colgaban de su suéter. Visualizo la casa de TaeMin y dio pasos más largos, llego a la entrada y toco la puerta con una enorme sonrisa. ¿Qué le diría TaeMin? ¿Lo habrá extrañado esos días? ¿Se pondrá feliz al verlo? Todas esas preguntas pasaban por la cabeza de Onew, y su corazón se aceleró al escuchar los pasos del menor acercarse a la entrada. Froto con nerviosismo sus manos y sonrió ampliamente al notar que la puerta fue abierta. Dejando ver a un TaeMin vestido demasiado casual, tenía el cabello desacomodado y los ojos un poco hinchados, seguramente acabando de despertar. El menor, abrió los ojos sorprendido al ver a Jinki frente a él, sonriendo como si todo estuviera bien.

- Buenos días TaeMin –

TaeMin parpadeo un par de veces y frunció el ceño viendo directamente a los ojos al mayor, el cual solo sonrió de lado, extrañado por la expresión de TaeMin.

- ¿Qué quieres? – pregunto TaeMin haciendo una mueca.

Onew rio nasalmente y se alzó de hombros. – Pensé que... Podríamos almorzar juntos –

TaeMin no hizo nada, ni tampoco cambio su ceño fruncido.

- Déjame hacerte una pregunta JinKi – Onew asintió un poco confundido - ¿Eres sordo? Acaso ¿Tu cerebro no funciona correctamente? –

- ¿Qué? – Pregunto extrañado y frunció el ceño ligeramente, demostrando que no entendía a lo que el menor se refería - No – contesto casi en susurro.

- ¿Entonces? ¿Qué parte no entiendes de que te alejes de mí? -

Onew borro toda expresión en su rostro, miro a TaeMin. Directo a los ojos. No entendía porque se comportaba así, pero podía ver que no era una broma. La mirada de TaeMin le transmitía tanto odio que decidió apartar la vista hasta ver el suelo.

- No...No entiendo – titubeo.

TaeMin aventó un poco a Jinki para que pudiera cerrar la puerta, pero antes de que lo hiciera, la mano de Jinki detuvo la puerta. TaeMin frunció el ceño y aplico más fuerza pero fue en vano.
Jinki levanto la vista y TaeMin se encogió un poco por la mirada de enojo que Jinki le ponía, sus ojos brillaban y no por la luz, sino por el agua que se acumulaba en ellos. Onew negó un poco y arrugo la frente.

- No hagas esto TaeMin – su voz sonaba más gruesa de lo normal, al igual que su rostro no mostraba la sonrisa que siempre regalaba. TaeMin paso saliva y se acomodó en su lugar, poniéndose más derecho.

- Lárgate JinKi – dijo serio – No quiero que estés cerca de mí –

Jinki rio nasalmente y sonrió de lado unos segundos, ya que volvió a poner su rostro inexpresivo, cerró los ojos y suspiro. Al ver de nuevo a TaeMin y notar que este no pensaba cambiar de opinión asintió levemente. – Veo que Seulgi tenía razón de ti –

TaeMin apretó los labios al escuchar aquel nombre. A su mente llego la escena que vio en el hospital de ellos besándose. Volvió a ver Onew y su coraje aumento. – Es bueno que lo tengas en cuenta, no soporto estar aquí, mientras más rápido me vaya mejor –

Onew bajo la mano, la cual seguía recargada de la puerta y la metió a su bolsillo. – Pues entonces ya vete – dijo y TaeMin frunció el ceño. – Deja este maldito pueblo de una buena vez... Vuelve a tu vida de ensueños, así no tendrías que soportarnos -