Diecisiete

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Abrió los ojos con pereza. Sonrió un poco al ver a TaeMin durmiendo a lado suyo, se veía tan cómodo que no quiso despertarlo. Se paró de la cama matrimonial que tenía y fue directo a la cocina.

Sonrió de nuevo al recordar la mini pelea que habían tenido. Él se ofreció a dormir en un futón y TaeMin en la cama, pero este se rehusó, diciendo que él era el invitado y debía dormir en el futón. Comenzando así una pelea para que terminaran los dos durmiendo juntos. Se sirvió un vaso de agua y tomo las medicinas que debía.

Camino descalzo hasta llegar a la puerta corrediza que daba al patio trasero, se quedó ahí, viendo el hermoso paisaje que ofrecía la mañana. El cielo estaba cubierto por nubes y el viento soplaba sutilmente, se acercaba el invierno. Onew soltó un suspiro, no estaba seguro de que TaeMin se quedara a vivir con él, no estaba seguro si era correcto corresponder a los sentimientos del contrario, sabía que, si el pelinegro se acostumbraba a él, lo terminaría lastimando.

De pronto su vista fue bloqueada por unas manos, Onew sonrió de lado y tomo las manos para quitárselas. TaeMin bufo y se sentó a un lado de él.

- Despertaste - sonrió cuando sus miradas se toparon. El menor asintió. - ¿Dormiste bien? -

- Si - sonrió - ¿Y tú? -

- También -

Después de un rato estar en silencio se levantaron y Onew hizo el desayuno. Insistió en que TaeMin cocinara, pero este se negó rotundamente, solo lo ayudo en lavar el arroz y acercarle lo que necesitaba.

Almorzaron juntos y se cambiaron para ir a la escuela. Onew se subió a la motoneta al igual que TaeMin, sonrió un poco, TaeMin no dijo nada acerca de ir en moto, a comparación de la primera vez que no quería ni ver. Sintió las manos de TaeMin rodear su cintura y sonrió, encendió con un poco de dificultad el motor viejo y condujo hasta la escuela.

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La campana sonó anunciando el descanso, los ahora amigos salieron a almorzar a donde siempre, con la diferencia que ahora una nueva persona se les unía, Lee TaeMin.

- Que bueno que comes con nosotros – dijo Chanyeol sonriente.

- Si – sonrío un poco apenado TaeMin.

- ¿Son novios ahora? – cuestiono Chanyeol.

Onew sonrío al mismo tiempo que se sonrojaba. TaeMin a su vez, que tomaba una banana milk, se ahogó un poco con ella. Chanyeol y Kibum rieron por sus acciones.

- S...si – contesto TaeMin sonrojado.

- Vaya, ya era hora – rio el más alto.

- Verdad que si – agrego Kibum.

Siguieron bromeando con la nueva pareja. Hasta que llego Suho y se llevó a Chanyeol y Onew, supuestamente un profesor los buscaba.

Kibum y TaeMin quedaron solos, no era nada incomodo, ambos ya se habían acostumbrado a estar el uno con el otro. Comían en silencio hasta que TaeMin hablo.

- Kibum – dijo llamando la atención del contrario.

- ¿Si? -

- Aun... - jugo un poco con sus dedos – ¿crees que pueda volver a trabajar? –

Kibum abrió sus ojos con sorpresa, no esperaba que el menor le hiciera esa pregunta.

- Pues, no lo sé – contesto aun sorprendido – Hablare con mi madre –

TaeMin le dedico una sutil sonrisa, aún seguía algo apenado. Sabía que había cometido un error cuando trabajo en el minisúper, pero esta vez se esforzaría, si es que le daban trabajo nuevamente.

Sin Querer - OnTae Donde viven las historias. Descúbrelo ahora