Sin Querer - OnTae

Veintidos

Onew y TaeMin estaban esperando a que el doctor Ahn los atendiera, mientras esperaban jugaban a piedra, papel o tijera. Onew subía y bajaba un escalón, ya que perdía y ganaba en el juego. Y TaeMin permaneció siempre en el mismo lugar. Reían entres ellos. La puerta por fin se abrió, dejando ver a un sonriente doctor y un paciente salir.

Onew entro al consultorio en cuanto Anh le hizo una seña, y TaeMin solo sonrió despidiéndose de Onew, tomando asiento en las escaleras para esperarlo.

- ¿Cómo has estado Onew? –

Pregunto el doctor arreglando los medicamentos que le inyectaría a Jinki.

- Esta semana no tuve espasmos – dijo, por lo menos había algo bueno.

El doctor solo asintió y preparo el brazo del castaño. La inyección ingreso en su vena y Onew solo apretó un poco los ojos.

- Te suministrare diez veces más medicamentos inmunosupresores. Quizá te protejan un tiempo, pero te causaran molestias – dijo con una mueca.

Onew suspiro, estaba cansado de los medicamentos y de todo, pero sabía que eran necesarios para estar ahí, con TaeMin.

- ¿Cómo cuáles? –

- Cansancio, mareos, náuseas, fiebre, dolor en el pecho – pauso cuando vio que Jinki desvió la mirada – Onew debes ser fuerte –

Por tu bebe, pensó.

- Si – musito.

- Bien –

Siguió con la rutina que ya habían plasmado.

- ¿Y cómo ha estado TaeMin? –

Pregunto Ahn demasiado curioso, más por el embarazo. Sin embargo, no quería preguntarle directamente, ya que no sabía si Onew estaba ya enterado y no quería echar todo a perder como cuando le dijo lo de la herencia.

- Últimamente ha actuado muy extraño – dijo con un puchero – siento que está ocultándome algo con Kibum, están muy cercanos este mes... Incluso un día salió con Kibum y Seulgi – dijo sorprendido. El doctor solo contuvo una risilla, sabía perfectamente lo que era – Estoy seguro que se van a comer a otro lado –

Su seriedad hizo al doctor reír.

- ¿Por qué tan seguro? –

- TaeMin está subiendo de peso –

El doctor negó con una sonrisa y termino, diciendo un "listo" para que Onew se pusiera de pie.

- Gracias – dijo Onew acomodándose el suéter.

- De nada... Por cierto – se acercó a darle un abrazo – Feliz cumpleaños –

Onew rio y correspondió el corto abrazo que Ahn le daba. – Gracias –

Ahn abrió la puerta y ambos salieron. Onew se quedó de pie y sonrió involuntariamente al ver a TaeMin sonriéndole a un niño de aproximadamente 4 años, entregándole una pelota. Su sonrisa era una de las cosas que amaba de TaeMin, eso calmaba su enfermo corazón demasiado. Pensar que llego siendo tan egocéntrico, y ahora, estaba ahí, solo como TaeMin... su TaeMin.

- Felicidades Onew – lo saco de sus pensamientos Ahn.

- Ya me habías felicitado – respondió obvio.

Ahn sonrió de lado y se alzó de hombros para cerrar por fin la puerta, porque no lo felicitaba por su cumpleaños, sino por él bebe que TaeMin esperaba.

Cuando Onew volvió la vista a TaeMin este ya estaba de pie y lo veía con una enorme sonrisa, una mejor que la que le regalaba al niño anterior.

- ¿Nos vamos? - pregunto coqueto abriendo el paraguas azul en cuanto Jinki asintió.