MILEVEN ONE SHOT

Un error

"No hay peor error, que provocar lágrimas en una cara que nos a regalado sus mejores sonrisas"

-Por amor de dios Mike, deja de seguirme - se encontraba enserio enojada, todo había pasado tan rápido y no se encontraba en condiciones de hablar, aceleró el paso lo ultimo que quería era lastimar a alguien solo quería estar en casa, en su cama sin nadie que la pudiera molestar.

-No hasta que hablemos - Dijo con voz firme el chico, esa chica era rápida, casi tenia que correr para alcanzarla, y cuando lo hizo la tomó del brazo a trayéndola hacia él.

-No- le dio una falsa sonrisa, se soltó del agarre del chico y continuo su camino.

-Okey no hablemos - metió sus manos en los bolsillos de sus jeans y camino al lado de su novia, el trayecto era incomodo, nadie hablaba solo era una caminata larga a la casa de los Hopper.

El otoño ya comenzaba, la verdad Eleven se arrepintió en el primer momento que dio un paso fuera de la casa haberse puesto ese vestido que le llegaba un poco arriba de las rodillas y su chaqueta de mezcilla no ayudaba mucho el frió, y se repetía a ella misma porque demonios no se cambio el vestido por unos cómodos pantalones, a claro, porque se le hacia tarde para la escuela. Se abrazo a si misma protegiéndose del fuerte viento que hacia, sintió como un peso extra se colocaba en sus hombros, el frió disminuyo, y el grato olor a su novio le inundo sus fosas nasales, el chico le había sedido su chaqueta, sin importar si el tenia frío, volteó a ver a su novio y le dio una pequeña sonrisa en agradecimiento y regresó su vista al suelo.

Solo quería poder llegar a su casa, encerrarse en su cuarto y poder llorar sola, así como se sentía ahora, le dolía mucho todo lo que estaba pasando, tener que recordar toda esa escena le partía el corazón, quería abrazar a Mike, besarle y decirle cuanto lo quería, soló quería pasar una linda tarde de lluvia viendo una película con su novio, pero al parecer las cosas habían cambiado, demonios le dolía tenerlo cerca, una lágrima recorrió su rostro y ella no la detuvo, ya no faltaba mucho para llegar.

-El, yo...- Mike trataba de hablar, acercase, cualquier cosa que le hiciera sentir que las cosas se podían arreglar, le dolía ver como las lágrimas salían de sus ojos y el no podía secarlas, ella no lo quería cerca.

-Mike no- su voz sonaba frágil tal y como ella se sentía, su vista no se levanto del suelo y jugaba con una banda azul que se encontraba en su muñeca como siempre hacia cuando se encontraba nerviosa.

Siguieron así por un buen rato, la calle por la que caminaban estaba totalmente sola no era muy transitada a no ser que pensaras salir del pueblo, la casa de los Hopper se encontraba lejos en medio del bosque y eso le favorecia en momentos como estos nadie la vería llorar y así el Jefe no se enteraría.

El frío se hacia cada vez más notorio y la tensión entre ambos se podía cortar con una navaja, en la mente de la chica solamente se repetían las imagenes de dicha escena y con cada una de ellas su corazón se encogía provocandole un gran dolor en el pecho.

Llegaron a la vivienda cuando ella trató de introducir la llave en el cerrojo simplemente no pudo su mano -y su cuerpo- se encontraban temblando, una vez que lo consiguió entro rápidamente dirigiéndose a su habitación y cerrando la puerta detrás de ella.

-Por favor, El no podemos estar sin hablar de lo que paso te mereces una explicación -Dijo Wheeler al otro lado de la puerta

-No- fue lo único que dijo la chica todavía pegada a la puerta, puede que solamente una tabla de madera los separara pero en ese momento la distancia era mucho mayor, pues así se sentían en ese momento; separados- No quiero eso, fue más que claro todo lo que vi, no tienes que explicarlo soló quiero que me respondas algo ¿La quieres? si es así esta bien yo me alejó los dejo no voy a mentir me va a ser difícil pero...