Capitulo 6

239 19 1
                                    

Me despierto al notar un frío glacial. Estamos en verano, ¿de dónde coño sale tanto frío? Obtengo las respuesta al levantar la cabeza y ver un cubo en las manos de mi padre. Cuando menos se lo espere le hecho cubitos de hielo en los calzoncillos.

-Levantate. -Me ordena serio-. Tienes una hora para ducharte y parecer que no tienes resaca. Si tardas más tiempo atente a las consecuencias.

-¿Qué hora es? -Pregunto sentándome en la cama.

-Las cinco de la tarde. Date prisa. -Y sale cerrando de un portazo.

Menudo humor de perros, y soy yo a la que le han echado un cubo de agua fría. Cojo unos shorts rosas y un top en el que pone “summer lovers”. Entro en la ducha y tardo lo menos que me permite el quitarme las manchas pegajosas de alcohol, no es conveniente enfadar más a mis padres. Salgo y me visto, al pasar por delante del espejo retrocedo para verme otra vez. Joder, mi pelo es rojo con mechas californianas rubias, no sabíamos que tuviera colores fantasía entre los tintes, pero al menos me queda bastante bien para que me lo haya hecho una borracha. Como no voy a ir a ninguna fiesta en la que mis pies corran peligro me pongo unas sandalias abiertas marrones. Abajo están mis padres esperándome. Joder que miedo.

Sin decirme nada cogen las llaves del coche y abren la puerta principal para dejarme pasar a mi primero. Nos montamos en el coche en un incómodo silencio y conducen hacia no sé donde. Esto empieza a ser muy tétrico, espero que no quieran llevarme a ningún lugar donde esconder mi cadáver.

-¿A dónde vamos? -Pregunto sin obtener respuesta.

Me resigno y dejo que mi padre conduzca al lugar donde me están llevando. A los minutos empiezo a reconocer las casas y las calles. Vamos a casa de India, ¿para qué? El miedo empieza a invadirme. Y Lo peor es que no tengo ni idea de porqué vamos a esa casa.

Al llegar no solo está India con sus padres. Kate, Cara y los demás padres. Oh, joder. India lleva el pelo morado, el de Kate es rosa y el de Cara azul, ¿cómo hacemos para que nos sienten tan bien esos colores? Todas nos miramos sorprendidas, pero poco hemos podido lucir nuestro nuevo pelo, porque si estamos aquí las cuatro es para que nos puedan enterrar juntas.

-Sentaros. -Nos ordena la madre de India señalando un sofá.

No tenemos cojones de replicar y obedecemos. Todos empiezan a echarnos la bronca al mismo tiempo y solo puedo escuchar ciertas palabras y frases cortas como “menuda vergüenza”, “irresponsables”, “parece mentira”, “castigo”, “desobedecer”, “sinvergüenzas”, “deshonra”, “cansados”, “rebeldes”, “escapar”, “no volveremos a confiar”, “mentirosas” y bastantes más de las que ya no me puedo enterar por el escándalo que están haciendo. En resumen, lo de siempre. Que ignoramos lo que nos dicen y hacemos lo que nos da la gana.

-Y para colmo ha llamado la policía. -Dice el padre de Kate provocando que el color en nuestras caras desaparezca-. Habéis destrozado el cuarto de la hermana, estoy muy decepcionado. La multa que hemos tenido que pagar es impresionante.

-¿Y cómo saben que fuimos nosotras? -Le pregunta Kate a su padre desafiante-.

-Las únicas que salieron de la fiesta con el pelo de otro color fuisteis vosotras. Y su cuarto de baño ahora está peor que un arco iris. -Nos contesta. Mierda-.

Nos quedamos calladas. Ahora sí que nos han pillado. Como no contestamos todos suspiran al mismo tiempo y me entran ganas de reír ante la impaciente precisión que tienen todos, pero no quiero meter más la pata.

-Creo que ya habéis abusado de nuestra confianza. Todas. -Dice mi padre cruzándose de brazos-. Y habéis ido a parar muy lejos. Joder, que habéis destrozado parte de una casa.

Todo lo que no puedes controlarDonde viven las historias. Descúbrelo ahora