One Shots- Damie

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-Me parece que te has equivocado de persona- educadamente, y soltando una risita, le comento al florista que inesperadamente ha llegado hasta mi oficina con un hermoso jarrón de flores. Tulipanes, por cierto, y para mi sorpresa (y no tan no sorpresa al no ser para mí), mis favoritas.

- ¿La señorita Johnson, cierto? ¿Dakota Johnson? – con el ceño un poco fruncido, asiento- Pues efectivamente... son para usted señorita. Necesito que me firme aquí – me pasa una tablita con un papel y un bolígrafo para que lo firme, y con escepticismo lo hago y coloca las flores sobre mi escritorio – Que tenga un lindo día- dice amablemente y se retira de una vez.

Intrigada me paro de mi silla y rodeo mi escritorio hasta llegar hasta dicho obsequio. Tienen un color medio rosado y se ven totalmente delicadas. Son hermosas. Su aroma se esparce por todo el lugar. Busco con la posibilidad de encontrar una tarjetita que señale su remitente y luego de unos segundos la encuentro, pero sin indicio alguno de quien pudo haber sido.

"Los tulipanes rosados son una anomalía. Podemos encontrar rojos, morados, amarillos o blancos, y cada cual guarda un significado en particular. Los rosados por su parte representan ojos hermosos. Así tal cual como los tuyos"

Con mis mejillas ardiendo, una leve sonrisa tímida y mi corazón latiendo a mil por hora me siento nuevamente en mi silla giratoria un poco atontada con este lindo e inesperado detalle que me ha alegrado la mañana. El misterio de todo esto me pone de alguna manera emocionada. Pienso en que talvez pueda ser un mérito de mi trabajo, pero retiro ese pensamiento cuando recuerdo que no he hecho nada particular para recibir tal cosa. Por la otra parte, no estoy saliendo con nadie y tampoco tengo compromisos con nadie hasta donde recuerdo. Quisiera contestar para al menos decir gracias, pero no tengo modo alguno. Y si se trata de un admirador secreto, no pienso jugar a la detective. Simplemente seguiré el flujo.

El único hombre que me interesa en el momento es un poco complicado y reservado. Todas las mañanas llega con su termo de café, un periódico y vestido de tal manera, que no me vuela la tanga porque estoy en el trabajo y me comporto. Es un hombre un poco serio, pero a la vez carismático. Cuando sonríe, sus ojos se achinan un poco y sus ojos se iluminan dándole un color más intenso, sus mejillas se ponen rosadas y su sonrisa... ¡sus dientes rara vez hacen acto de presencia! Y cuando soy yo quien logra hacerlo, me siento como ganar la lotería... Aunque lo he pillado varias veces observándome disimuladamente (claro, mientras yo también lo miraba a él), creo... que no está interesado en mí. Hemos hablado poco en horario de trabajo y estrictamente profesional... solo eso.

Sacudo mi cabeza y despejo mis pensamientos. Me levanto y abro la puerta de la oficina para ver si hay alguien pendiente, pero solo veo el ajetreo diario que maneja la empresa. Me doy la vuelta para continuar con la revisión de documentos, cuando una voz medio agitada llama mi nombre. Me vuelvo a girar y lo veo ahí, a él, llegar hasta mi puerta deteniendo su rápido paso.

-Dakotaaa- dice casi en un susurro y mi corazón vuelve a latir irracionalmente... mas ahora que lo tengo frente a mí. - ¿Cómo estás? Uhm, ¿estás muy ocupada? ¿Se puede pasar?

Jamie's POV

¿Alguno se imagina lo que es estar 2 años trabajando con una inteligente, brillante y hermosa chica, sin atreverte a decir lo que en realidad sientes? No malinterpreten. No es que sea un cobarde... o bueno tal vez un poco. Pero ¿que podría haber hecho si toda mi vida amorosa ha sido un fracaso? Me han lastimado y, admito, que tengo un poco de miedo a enamorarme nuevamente. No hace mas de 3 años estoy divorciado de mi ultima pareja. Cuando nos casamos pensamos que era lo correcto para formar un futuro estable, pero la inestabilidad parece haber sido un concepto que vino con el paquete entero. Claro está, no todos los matrimonios son así. En esto tuvimos ambos la culpa. Yo no estaba preparado para el casorio y ella dijo que yo no cumplía con los requisitos de marido que ella tenía en mente.