One Shots- Damie

XVII

Antes que nada, es un capitulo un poco diferente. Voy a incluir el tópico de TDAH o conocido en ingles como ADHD, pero prometo que no será mucho para no aburrirlos. Es simplemente para poder seguir la idea que tengo en mente .

Dakota's POV

- ¿Qué escogen? ¿Cara o cruz? – pregunta la profesora con cara desafiante – a quien le salga cara comienza el debate ¿vale? – culmina levantando una ceja.

- Cara – dice el chico que le toca presentar contra mi sin pensárselo dos veces y yo volteo los ojos ante tal gesto arrogante; no me queda más que escoger el opuesto.

- Cruz- digo con un poco de reticencia en mi voz.

- Bueno, aquí va- dice la profesora y tira la moneda al aire. La moneda gira dramáticamente lento y luego de lo que parecía una eternidad, cae sobre su mano y ella la voltea sin mirar. Nos la enseña – Cara- y la cara del chico parece valer oro. Toma su computadora con lo que me parece prepotencia y la coloca en unos de los podios que hay frente al resto de la clase y yo me coloco en el otro más que lista para debatir mi punto.

Ese chico es Jamie. James Peter Maxwell Dornan. Aunque no suele ser un chico arrogante, hace ese papel a la perfección cada vez que tenemos debate en clase. No falla. Y no es que no nos llevemos bien, pero es como si fuésemos la competencia del otro, desde el primer año de universidad. Ambos estamos en el programa de psicología como una segunda concentración y ésta, es la fascinante clase de psicopatología. Nos toca debatir sobre las dos perspectivas de un trastorno, es decir el científico y el cultural. La profesora nos dio el tópico de "TDAH" (Trastorno de Déficit de Atención e Hiperactividad) y yo escogí la perspectiva cultural y él, la científica.

Jamie carraspea, se presenta y comienza a exponer.

-Bueno, el TDAH, aunque muchos quieran hacerlo ver como una responsabilidad cultural, surge de un diágnostico a un chico con encefalitis. El trastorno afecta regiones del cerebro, en especial 4 tipos de genes que son los que se encargan de transmitir la dopamina y serotonina. Lo que nos notifica que este trastorno tiene una influencia meramente científica- se detiene y me señala para que debata y exponga mi punto.

-Sin embargo -comienzo a defender- lo que se te olvidó esclarecer es que en ese estudio que tomaron de ejemplo al chico con encefalitis, los daños que tenia en el cerebro, no le encontraron relación con el comportamiento que caracteriza el TDAH. Y fue por eso, que le llamaron trastorno, para que le tomaran seriedad al asunto- veo como exhala fuertemente por los orificios nasales, pero tomando todo su orgullo continúa con su punto.

-Buen punto compañera, pero si partimos por esa línea que usted esta exponiendo -dice mientras me señala con su bolígrafo- entonces, cómo es posible que el TDAH es reconocido en todo el mundo como un trastorno y dado a eso se medique a quien lo padece.

-Bueno, te explico. El trastorno es reconocido mundialmente como tal porque vivimos en una sociedad en la que lo que no encaje en lo normal, se ve como una locura -le digo mirándolo fijamente a los ojos. Sin ningún miedo- Lo normal, definido como aquello que todo el mundo sigue sin cuestionar. Y no es solo de ahora, sino desde el siglo 16 se ve esta practica de alejamiento de los 'locos'. La medicación, que es aquello que enfatizas, se ha tomado como una solución inmediata sin medirse consecuencias, simplemente como la alternativa mas rápida. Se han hecho una infinidad de estudios que demuestran que el TDAH en muchas ocasiones depende del entorno en el que se desarrolla la persona.

-De igual forma- dice esta vez saliéndose del podio y caminando hacia donde me encuentro lentamente- se ha comprobado en estudios que las razones del trastorno se deben a los desniveles de sustancias químicas en el cerebro. Por lo tanto, es un criterio sumamente esencial el medicamento para este diagnóstico. ¿No cree?