Messenger (Lauren Jauregui y tu)

#4

Hola ______, soy Dinah.

Supongo que en estos momentos ya debes estar pensando en cómo salir del país de forma sigilosa, puedes estar tranquila, solo las chicas y yo, incluida Lauren, lo sabemos. Nosotras fuimos las que te enviamos a su casa.

Sabemos que querías alejarte de todo, pero jamás pensamos que serías tan drástica, desapareciste de un día para otro dejando una nota, todas hicimos caso y no intentamos buscarte, pero por cosas del destino hemos vuelto a encontrarte. 

No te diré nada más, tan solo espero verte en la casa del algo el sábado, habrá una reunión de amigos discretita, y no queremos amenazarte ni nada, pero si no estás allí, nos veremos en la obligación de decirselo a tu padre.

Cuando Kelly terminó de leer la carta no me podía creer nada, en serio me estaban haciendo esto, aunque tampoco tenía nada que perder, sino aparecía por allí, ellas le contarían todo a mi padre el domingo, así que contaba con tres días de ventaja, así que lo mejor era continuar empacando las cosas.

- ¿Que haces _____? - preguntó la morena - en serio  sigues pensando en escapar -continuó y yo tan solo asentí para continuar con mi tarea - no conozco prácticamente nada de tu pasado, pero  piensa bien las cosas y deja de escapar de tu pasado, porque por mucho que lo intentes, te lo acabarás encontrando allá donde vayas, y tarde o temprano te alcanzará.

 - No lo entiendes Kelly, yo no me escondo de él, tan solo me alejo - respondí de una manera muy obvia.

- Tienes razón, no entiendo porque quieres echar a perder todo por tu padre- dijo y yo me comencé a reír, porque nada de esto era por mi padre, en cierto modo, ese fue uno de los motivos, pero no dejaría el país por él, más bien los dejaría por unos ojos esmeralda que aún ponen mi mundo patas arriba.

- No es solo por mi padre, también es por.... - iba a continuar pero me callé al darme cuenta de lo que estaba apunto de decir.

- También es por esa tal Lauren, ¿no? - preguntó y mis ojos se abrieron como platos - en serio todo esto es por una tía, querida, hay más peces en el mar.

- Se que hay más peces en el mar, y que un clavo saca a otro clavo - tenía pensado continuar pero Kelly vio oportuno hablar.

- Mejor deja los refranes y cuéntame que paso con tus amigas, con Lauren y con tus padres - no sabía si estaba preparada para contarle todo eso a Kelly, ella me había demostrado que era alguien en quien se podía confiar, pero aun así ese no era el motivo por el cual no se lo contaba, más bien me daba miedo tirar al suelo todos los muros que un día construí para que nada de esto me afectase.

- Te lo contaré, pero después me dejarás seguir con mi plan - ella asintió ligeramente y yo comencé a hablar - empezaré por lo más fácil, mis padres, más bien mi padre, el siempre quiso que mi hermano y yo continuásemos con su legado. Mi hermano fue el hijo perfecto a ojos de mis padres, yo fui la más inconformista con todo eso, el dinero no me hacía feliz, desde pequeña me revelé contra todos y sacaba malas notas, cuando entre en la adolescencia no mejore ni un poquito, comencé a juntarme con gente que no era buena, así que salía todas las noches a fumar y beber, llegaba de madrugada ebria y a veces ni llegaba, mi hermano me intentaba hacer recapacitar, un día me siguió hasta el local donde me juntaba con mis colegas, esa noche discutimos y el se marchó de aquel lugar sin su hermana, y al llegar a casa, era yo la que no tenía hermano, un borracho se lo llevo aquella noche - mi voz cada ver era más inaudible y mis parpados comenzaban a llenarse de lagrimas, por mi culpa el se marcho.

- Tu padre oculto todo eso, ¿verdad? - preguntó y yo asentí.

- El siempre lo oculto todo, pero la muerte de su hijo era difícil de ocultar, así que ese fue lo único que dejo salir a la luz - mi voz se quebró y las primeras lagrimas comenzaron a rodar por mis mejillas, era la primera vez que hablaba de su muerte y sinceramente, me había quitado un peso de encima. Kelly dejo de hacer preguntas y tan solo me consoló e intento convencerme de que el no murió por mis culpa.

- Bueno, y ahora que estás más tranquila, cuéntame sobre tus amigas - dijo y yo decidí continuar, necesitaba sacarlo todo.

- Esta bien, a ellas las conocí desde pequeña, al meno a Dinah y Lauren, después conocimos a Ally, cuando eramos pequeñas nos encantaba pasarnos las tardes jugando, luego empezamos a crecer, y yo me empecé a alejar de ellas por culpa de mis malas compañías, aunque de vez en cuando también las veía, Lauren siempre venía a verme y se enfadaba conmigo cuando estaba de resaca o cuando faltaba a clase, nunca entendí porque lo hizo, un día en medio de una discusión yo la bese, y bueno, una cosa llevo a la otra, ahí me empecé a dar cuenta de que ella me gustaba, y ese fue un punto de inflexión en nuestra amistad. - recordar eso me dolía, más de lo que imaginaba, después de tanto tiempo y aun seguía queriendo a esa chica - Cuando mi hermano falleció, yo me aleje de mis supuestos amigos, y ellas me acogieron como si jamás me hubiese alejado, en ese entonces conocimos a Normani, una compañera de baile de Dinah, y poco tiempo después descubrimos que eran más que amigas.

- Si si, todo eso es muy bonito - me interrumpió mi amiga- pero, ¿que más paso entre Lauren y tu?

- Cuando yo volví  juntarme con ellas, Lauren estaba cada día en mi casa, y el roce hizo el cariño, eramos amigas con derecho a roce, aunque entre nosotras se notaba que nos queríamos como algo más que eso, pero ninguna se atrevió a subir un peldaño más en nuestra relación, por lo que un año después Lauren comenzó una relación con un chico y lo nuestro se fue a la mierda, así que yo intenté olvidarla metiendo cada fin de semana a una chica distinta en mi cama, ella se enfadaba conmigo por hacer eso, me decía que no podía usar a la mujeres como si fuesen clinex, y yo la mandaba a la mierda, una noche en la que yo iba a salir tuvimos una discusión muy fuerte, a eso se le sumo que era el mismo día en que mi hermano había fallecido, así que eso desencadeno que me marchase y que seis meses después acabase contigo aquí sentada.