TODO DEPENDE DE TI

XI

Desa

Me desperté por un trueno, sentí mucho frío y voltee a ver a ivy y ya no estaban

En cambio había una nota que decía “princesa sali a comprar comida para la semana, no quise despertarte por qué te veías muy cómoda, vuelvo en un rato."

Dejé la nota y me levanté, al mirar mi cuerpo desnudo me di asco, ¿Acaso ella no vio mi cuerpo? Estoy demaciado gorda.

Seguro le doy lastima, busque ropa y encontré unas mallas negras y me las puse, encontré una camisa manga larga blanca y la tome, no tenía ropa interior pero sabía que aquí solo vivía ella.

Ahora que me doy cuenta no creo que trabaje y tiene carro y moto, seguro la mantienen sus papás, creo que le preguntare cuando llegue.

Voltee a ver a la ventana y la lluvia estaba muy fuerte, espero que esté bien.

Me senté en el sofá y me ise bolita viendo hacia la ventana, odio los días de lluvia.

Escuché la puerta abrirse y voltee, ella entró pero no venía sola, venía con un chico alto, musculoso y a mi parecer algo guapo, ningúno se percató de mi presencia pues ni uno me volteó a ver.

- ya te dije Luis y no te voy a repetir - dijo ivy y a mi parecer se escuchaba un poco cabreada.

- yo sí te lo repito, perdóname y dame otra oportunidad - le dijo el tal luis, ivy aguardaba la comida que trajo en el refri y el se acercó a ella y la volteó tomándola de la cintura.

- que estás h- le cortó besándola y ella no hacía nada para alejarle, justo en este momento me sentí estúpida.

Me levanté y sali corriendo de ahi, baje por las escaleras y escuché a ivy gritarme, la ignore y seguí corriendo.

Al salir del edificio me moje rápidamente por la lluvia, mire a los lados y corrí a la derecha, corrí y corri, llegue bajo un puente y me escondi ahí.

¿Por que todo me pasa a mi? Creo que es momento de dejar de dar lata y terminar con todo esto.

Tome un pedazo de vidrio que estaba ahí y la puse sobre mi muñeca, estaba a punto de cortarla pero sentí como me la arrebataron y la tiraban lejos.

Voltee y Vi a ivy mirándome con lo que parece ser enojo y lastima.

- ¿En qué estabas pensando ? - me susurró y se acercó, por inercia me aleje  y le di la espalda.

- gracias por todo pero creo que es mejor que te deje en paz - le asegure, estoy segura que ella no querrá una responsabilidad tan grande como cuidarme.

- nos viste ¿Cierto? - me preguntó a lo que yo sentí un dolor en el pecho.

Me sentía protegida por ella pero ¿Cómo empezar a quererla si ella en realidad lo hace por lastima? Quiero descansar.

No le contesté por qué no podía, empeze a temblar de frío y automáticamente me abrazó con mis brazos, mire al cielo.

- te estás conjelando, vamos a casa - dijo tomando mi mano y yo la retire.

Ella me vio directo a los ojos, baje mi mirada y si un paso atrás.

- no quiero tu lastima - le susurré y sali corriendo al subir por el puente sentí que me tiraba al piso, me volteó y se subió arriba de mi.

- DEJAME ¡¡SUELTAME!! ME QUIERO IR - empeze a gritarle mientras me retorcía y lloraba.

Ella tomo mi rostro y me besó yo me intenté alejar y ella no me dejaba.

- no me beses - le dije cuando se separó de mi a causa de una mordida que le di.

No dijo nada e intento besarme otra vez.

- no lo hagas, soy tu estúpido juego, ¿Cuando me ibas a decir que tenías novio? Lo haces por lastima ahora déjame - le dije mientras lloraba.

Se levantó y me levanto, intenté alejarme pero me tomo de la cintura y me llevaba a rastras a su casa.

¿Que caso tenía resistirme? Deje que me llevará a su casa, tomo mi mano y me llevo hasta su piso, en todo el camino no hablamos, ella estaba seria, al llegar cerró la puerta con llave y se fue a la cocina.

Yo me fui al baño y me encerré ahí y empeze a llorar, me senté en el piso y abrase mis piernas.

A los minutos ella entró y se sentó a mi lado, pude ver que en la mano tenía la llave con la cual abrió la puerta.

- yo no te tengo lastima - me aseguró tratando de que la mirara, pero yo no quise mirarla.

Al ver que no podía hacer que la mirara me abrazó.

- yo no te tengo lastima, el chico que viste hace un rato es mi ex y lo deje por qué me engaño, el me besó pero yo no le seguí el beso, tampoco le veía el caso forcejear por qué podía lastimarme - me aseguró a lo que yo trate de alejarme.

- no, hey , escucha yo te quiero sabes que quiero cuidarte y no quiero que pienses mal de mi - por lo que escuché su voz se estaba quebrando.

- por favor - me susurró en un intento de que la mirara.

Y lo ise, la mire y en sus ojos pude ver la culpabilidad y el dolor, pude ver una gota que bajo por su mejilla derecha y me asusté.

- yo.. yo...yo - la ise llorar y no me salían las palabras.

- tranquila, perdóname - me susurró abrazándome.

Yo le acepte el abrazo y después de un rato me metió en la ducha y se fue a hacer la comida.

Me sumergí en la bañera y sali de ella, al verme al espejo de cuerpo completo que estaba en la habitación tuve lastima de mi misma.

Lo que Vi no me gustó, Vi unos ojos azules que ahora parecían apagados y sin brillo, mis labios estaban partidos y no se diga de las ojeras, mi cuerpo estaba peor, pude ver mi estómago algo grande y al ver lo delgadas que eran mis piernas me sentí deforme.

-¿Qué haces? - escuché de la puerta, me limité a ponerme la bata y voltear a mirarla.