👓 richie

3.7K 197 65
                                    

estaba sentada en la acera junto a los chicos. aburrida, me recosté poniendo mis pies sobre el regazo de eddie y mi cabeza sobre las piernas de bill. el día estaba perfecto así que nos juntamos todos para salir un rato, beverly llegaría en cualquier momento y podríamos ir a comer como habíamos planeado. eran vacaciones y ninguno tenía nada que hacer. amaba pasar tiempo con estos chicos, con mis mejores amigos, con mis perdedores.

-si no llega en cinco minutos yo iré por mis papas fritas.- se quejó molesto ben. sonreí.

-todos queremos ir a comer ben, espera un poco más.- le dije bostezando.

-las ojeras bajo tus ojos son más grandes que mi futuro, wow.- habló richie observandome detenidamente. rodé los ojos y le solté un manotazo en la cara.

-cállate, cuatro ojos.

-al menos tiene algo más grande que tú.- se burló stan chocando las manos conmigo.

-eso es porque aún no hay visto mi p-

-¡CHICOS YA LLEGUÉ!- gritó una agitada beverly.

-¡al fin!- exclamó mike mirando el cielo.

-lo siento por tardar pero tuve que convencer a papá de que me dejara salir.

todos nos levantamos y comenzamos a caminar. era algo raro que alguien nos viera sin nuestras bicicletas ya normalmente las llevamos a donde sea que vayamos, pero richie, bill y eddie perdieron las suyas por culpa de henry y pensamos que lo mejor era ir todos caminando. las calles estaban solitarias pero se podían ver a las personas sentadas fuera de su casa o mirando desde sus ventanas con tazas de té o café. mi madre seguro era una de ellas, era un obsesionada al café.

-oh no.- se quejó eddie dando media vuelta al ver a henry y sus tontos amigos a lo lejos. lo detuve.

-no vamos a irnos, huir o dejar de disfrutar nuestra salir por culpa de ese idiota. estoy cansada de que nos moleste y si es necesario iré sola hasta allá para golpear su fea cara de puberto.- hablé molesta. realmente odiaba a ese chico, creía que tenía poder sobre todos para burlarse y pasar sobre nosotros con feos comentarios y golpes en los pasillos... y cualquier otro lugar.

-¡miren a quienes tenemos aquí!- gritó henry a lo lejos acercándose a nosotros. eddie y ben retrocedieron, pues eran los que estaban delante de nosotros.

-¿qué quieres, idiota?- le preguntó molesta beverly.

-vaya, alguien está a la defensiva. cuidado.- se burló.

-largo de aquí, maldito idiota.- di unos pasos quedando más cerca de él. ¿qué si tenía miedo? ¡por supuesto que sí! pero no iba a dejárselo saber -estoy cansada de ti y de tus estúpidos amigos. deja de meterte con nosotros porque comienzas a cansarme, ¿no te da pena tener que molestar a los demás para tener atención? ¿no te da pena burlarte de nosotros cuando eres tú el que ha reprobado el año...?

-¡hey, hey, hey!- gritó ceñudo acercándose más a mí, quise retroceder pero eso demostraría que me estoy haciendo en mis pantalones y no creo que sea bueno que henry note mi miedo -¿con qué derecho me hablas a mí así?

-con todo el que quiero, idiota.- dije empujandolo por el pecho, haciéndolo casi caer. henry se enfureció y estaba dispuesto a golpearme pero richie me tomó por el brazo y me alejó de él. eddie comenzó a correr y todos le seguimos por detrás. ibamos a morir. los gritos y las fuertes pisadas de tres chicos mayores y con ganas de golpearnos detrás de nosotros estaban muy cerca.

-¡hay que separarnos!- gritó beverly corriendo y mirando hacia atrás. habíamos tomado algo de ventaja gracias a unos autos que se cruzaron en el camino.

-¡p-p-pero así golpearán s-s-olo a uno de nosotros!- le respondió asustado y agitado bill.

-¡no porque vamos a escondernos! ¡es nuestra oportunidad de no morir!- gritó de acuerdo ben.

en menos de lo que esperaba todos ya se habían separado y seguí corriendo asustada. tengo que encontrar un lugar para esconderme ya. entrar en alguna tienda no resolverá nada porque ellos van a esperarme fuera hasta que cierren y tenga que salir. no quiero morir hoy. yo y mi bocota. ¡tengo que aprender a callarme!

corrí entre unos callejones hasta uno que se veía bastante solitario y silencioso. había varias cajas y contenedores por lo que decidí que iba a ser mi escondite. di la media vuelta dispuesta a ir hacia allí cuando me choqué con alguien. henry. me va matar.

-soy yo, soy yo. vamos.- dijo richie apresurado tomando mi mano. dejé salir el aire que había retenido en algún momento y seguí junto a él. de verdad pensaba que era henry. nos escondimos entre una caja y un contenedor con la intención de no llamar la atención. el pueblo no era un lugar muy grande para poder escondernos toda la vida de esos idiotas. iban a encontrarnos en cualquier momento.

-vamos a morir.- hablé con miedo y diversión a la misma vez. richie sonrió negando con la cabeza. me parecía adorable que sus ojos se vieran tan grandes por sus lentes.

-siempre pensé que iba a morir comiendo.- dijo mirandome divertido.

-¿crees que haya encontrado a alguno de los otros?- pregunté preocupada.

-no lo creo, deben estar escondidos en algún lugar como nosotros.- se encogió de hombros -probablemente eddie ya esté en su casa debajo de su cama.

sonreí un poco con la respiración agitada por tanto correr. nos quedamos en silencio por unos minutos hasta que escuchamos la voz de henry cerca.

-¡tienen que encontrarlos!- gritaba furioso. dios, donde nos encuentre nos va a hacer pedazos.

richie hizo señal de que siguieramos en silencio y hasta dejé de respirar. volví a escuchar como se alejaban y dejé salir todo el aire que tenía contenido en mis pulmones. henry era un tema serio.

-en algún momento va a encontrarnos y no podemos quedarnos aquí para siempre, así que si voy a morir deseo que valga la pena.- iba a preguntarle a que se refería pero no me dejó reaccionar y con sus manos en mis mejillas me acercó a él para juntar sus labios con los míos. richie me estaba besando. ninguno hacía nada. más que eso, al menos yo estaba bastante sorprendida. en ningún momento me pasó por la cabeza que richie fuera a besarme el día de hoy. ¡ni siquiera creía que eso fuera posible!

sus labios se movieron sobre los míos, comenzando un beso tranquilo y cariñoso. sus labios eran muy suaves y carnosos. sentí como una de sus manos quitaba unos cabellos que caían por mi cara y con la otra me acercaba más a él por la parte trasera de mi cuello. sus labios continuaron moviéndose sobre los míos haciendo un beso más rápido y profundo. me sorprendí un poco y hice un sonido extraño cuando sentí que su lengua tocó mi labio inferior. escuché que al instante hizo casi el mismo sonido que yo. no entendía nada pero admitía que me gustaba.

gaze🅱os  ;  imaginas y preferencesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora