Otra oportunidad. [Completo]

Capítulo 45.

Caminamos por el bosque delicadamente, mientras Johnny se aferra a mi brazo, acurrucándose, intentando proveerse de calor ya que la brisa de mitad de invierno nos llega casi sin piedad, las hojas y ramas siguen crujiendo, y cuando una suena a lo lejos hace que mi chico de un pequeño brinco buscando el origen de eso.

– Tranquilo – Le digo mientras suelto una risa – Solo es una rama a lo lejos, mi hermano me comento que por aquí suelen pasar manadas de ciervos –

– ¿Eso es posible? – Pregunta Johnny enarcando una ceja desconcertado – No creo que en esta zona geográfica pueda haber ciervos –

– Eso me dijo mi hermano, aunque también estoy en duda respecto a su afirmación –

– ¿Será buena idea si nos dirigimos a las cabañas? –

– ¿Tienes miedo a que aparezca un ciervo o pie grande? –

– La verdad es que tengo miedo lo que pueda hacerte aquí – Dice colocándose delante de mí y colocando sus manos en mis hombros – Estamos solos, y se ve escucha si llega una persona – Se sonroja demasiado.

– Sabes que no es mala idea – Digo tomando su cintura con fuerza y me lo acerco, mientras nuestros estómagos cubiertos por varias capas de ropa se tocan.

Me acerco a darle un beso en los labios mientras cierro los ojos, su cuerpo parece inclinarse hacia atrás y lo sigo lentamente, hasta que deja de hacerlo, muevo un poco las manos para sentir a donde está topando, es el tronco de un árbol, aprovecho para sentir su cintura, me sonrojo y sonrío cuando nos separamos un poco cuando apaciguamos el beso.

Quiero seguir con esto, pero algo me interrumpe, veo como Johnny me aparta poniendo sus manos en mi pecho, pienso que está a punto de quejarse, ya que creo que lo mordí antes de detener el beso.

– Creo que tu teléfono está vibrando – Dice sonriendo, y es verdad, lo está haciendo.

Saco el teléfono de la bolsa del saco, con razón no lo sentí, ya que las bolsas tienen algo de amortiguación, no pude sentir nada. Reviso quien es el que me está hablando, es mi hermano, deslizo el icono verde para poder contestarle.

– ¿Qué sucede Joseph? –

– ¿Dónde estás Theo? Las terapias de pareja están a punto de comenzar – Dice apurado, como si fuera algo sumamente importante – La instructora sólo estará hoy –

– ¿Instructora?, ¿Estás seguro de que es terapia? –

– Bueno, lo que sea, pero debes de estar aquí –

– Ya voy, desesperado – Le digo con una sonrisa mientras me cuelga, dejo el teléfono de nuevo en mi bolsa y tomo con fuerza a Johnny.

– ¿Terapia? –

– Algo que mi hermano me comento, la verdad es que no sé lo que en realidad sea –

– Los Rivas son tan confusos – Dice con sus manos en mis hombros mientras sonríe.

– Pero si bien que te encanta uno de los Rivas – Le contesto sonriéndole ampliamente.

– Ahora que lo pienso, Taylor me caía muy bien cuando la conocí, supongo es una Rivas que me encanta – Me mira curioso mientras me acerco a darle un beso en los labios. Supongo que, con esto, y la sonrisa que siento que se está formando en sus labios sé cuál es su Rivas favorito.

Estoy con mi hermano, y otros hombres, de cada pareja, en la parte superior de donde es la cafetería, ya acabado lo que mi hermano decía "terapia", lo cual ni se le acercaba a lo que esperaba, un caballero de unos treinta o cuarenta años, que nos fue explicando cómo poder excitar a nuestra pareja, varios rituales antes del sexo y demás, mi hermano parecía estar tomando apuntes de todo lo que decía, hasta cuando repetía varias veces las cosas, yo los tomaba a medias, ya que hablaba de cosas a las que solo se puede aplicar a una mujer.