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.— Por última vez, maldita sea... ¿Sientes algo por Jay? —
Escupí un poco de sangre y me removí tratando de safarme del agarre.
Habiendo ido a tomar café con Sunhee, regresé a casa lo más natural y me encuentro a Bam llorando en el sillón.
No más entré y ya estaban lloviendo vergazos.
Se abalanzó contra mi y me llevó a su habitación de la tortura. Me tiene suspendido en el aire, encadenado y me está utilizando como saco de boxeo.
Volvió a darme un derechazo en el estómago sacándome el aire y chillé adolorido.
— ¡Responde! — Volvió a soltarme otro golpe en el estómago y tosí varias veces escupiendo sangre.
— B-basta Bam... N-no me gusta Jay... — Sollocé — N-no me gusta...
— ¡PERO A ÉL TÚ LE GUSTAS! ¡ME DEJÓ POR TÍ JIMIN! — Gritó soltando varios puñetazos a mi abdomen y estomago haciéndome remover y llorar.
Sentía que me desmayaba cuando me abofeteó.
— No pienses que vas a desmayarte, Mocoso... Esto solo comienza —
Jay
Luego de pasar a comprarle una torta de webito a Jimin, regresé a casa rogando que Bam no estuviera ahí.
El tipo hostiga.
Entré a la casa y me quedé parado frunciendo el ceño. ¿Esos son gritos?
— ¡Deja de llorar, zorra! ¡Haber si así aprendes a no meterte con lo que es mío! —
— ¡Y-ya b-basta! — Escuché rápidamente el grito de Jimin y me quedé helado.
Puta mierda...
Subí rápidamente las escaleras asustado y traté de entrar al cuarto prohibido, pero este tenía seguro. Desde adentro podía escuchar los sollozos de Jimin y las risas cínicas de BamBam.
Pateé la puerta y me quedé helado viendo la escena.
Jimin estaba colgando del techo, amarrado con cadenas y solamente en ropa de interior. Su cuerpo estaba lleno se moretones empezándose a volver morados, sangrando por la boca y la nariz.
No mi bebé...
Bam estaba con las manos y ropa llena de sangre viéndome con una sonrisa torcida y lentamente acercándose a mi.
— Que bueno que vienes, Amorcito. Llevate a la zorra y ponla presentable. — Salió de la habitación. Miré a Jimin.
Me acerqué a él viéndolo llorar y mi corazón se partió en pedazos.
— T-todo esto es tú culpa... — Susurró dolido y lo vi confundido.
— ¿De qué hablas? Yo no fui el que te acaba de dar menuda paliza — Bufé y empecé a quitarle las cadenas.
— D-de no ser... P-porque tienes s-sentimientos hacia mí... B-bam no hubiera hecho esto.... — Lloró.
Lo cargué estilo princesa y lo saqué de allí escuchándolo llorar.
— Nunca podrás corresponderme, ¿verdad? — Lo miré.
El me dio una mirada furiosa y me escupió en la cara haciéndome suspirar.
— N-nunca... — Lloró — Jamás los perdonaré.
— ¿Otro ocupa mi lugar? — Asintió, Recordé a Yoongi.
— Puedo bañarme solo... — Se bajó de mis brazos y me dejó solo en el pasillo, viéndolo caminar encorvado por el dolor de abdomen.
[...]
— Renuncio — La miré desafiante.
— Recuerda que no te estoy dejando ir nada más porque tú me lo pides... Tómalo como un regalo después de tanta ayuda que nos has brindado. No olvides que esta siempre será tu casa cuando te aburras de los flacuchos brazos de tu amado. — La Señora sonrió y yo asentí mientras salía rapidamente de allí y me montaba en un taxi.
Le di la dirección del edificio al taxista y sonreí.
Cuando llegué a su edificio, subí rapidamente el elevador y vi que la puerta de su apartamento estaba medio abierta así que decidí entrar.
El peor error que pude cometer fue llegar a esta hora.
Hoseok Hyung estaba penetrando a Daddy sobre el sofá y me les quedé viendo esperando a que se dieran cuenta de mi presencia.
Daddy fue el primero que me vio y su rostro palideció más de lo que ya estaba, apartó a Hoseok Hyung de una y se tapó.
— Jiminnie puedo explicarlo... — Habló pero lo callé tirándole mi zapato.
— No hace falta — Me limpié las lágrimas — Cuando acaben me llamas...
Salí de ahí esperando a que Sunhee estuviera en casa y me recibió contenta.
Cuando le conté lo sucedido me dio algo de ropa y un lugar donde dormir.
Merezco que Daddy me pague de esta forma... Yo me metí con otros que no eran él así que es justo, ¿no?
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Dolly~ [YoonMin]
FanficSegundo libro de "Daddy~" « Donde Dolly cambió y Daddy trata de reparar lo irreparable »