Son of Magic

XL

Entraron a la ciudad en construcción por una enorme puerta que aún no estaba terminada, caminaron por las calles doradas que seguían repletas de máquinas, androides y escombro, sorteaban cada uno de esos obstáculos, por fuera parecía que todo era ordenado pero ya estando allí se dieron cuenta que no, que aún faltaban detalles y sobre todo, que era peligroso caminar por el lugar ¡Que estúpido eres, el hombre de hojalata tenía razón!  La voz en su cabeza sonaba enojada y preocupada, Loki se dio cuenta del gran error que cometió al llevar a Narfi así que caminaba con cuidado y detrás de Thor, si pasaba algo lo usaría como escudo.

Siguieron caminando por un buen rato, observando cada detalle, a pesar del desorden podían ver lo hermoso que estaba quedando el lugar, la arquitectura era similar a la de Asgard. Llegaron hasta el palacio pero no ingresaron, Thor tomó por el hombro a Loki y lo guió por un enorme pasillo despejado con hileras de árboles y arcos dorados, llegaron a lo que parecía el fin de aquel pasillo puesto que había un enorme portón dorado que dejaba ver por los barrotes una especie de jardín.

Su corazón se aceleró, empezó a imaginar lo que probablemente había del otro lado, lo que Thor exigió se construyera primero y lo que quería compartir con él sin duda alguna; Thor tomó la llave dorada que Stark le había dado antes de ingresar a la ciudad, abrió el portón e hizo que Loki ingresara primero.

Estaba completamente sorprendido y con una enorme sonrisa, no podía creer lo que veía; frente a él estaba el más hermoso jardín que pudiese existir en los nueve mundos, era idéntico al de la Reina Frigga, era exactamente igual al jardín de su madre. Un pasto verde cubría la extensión de aquel jardín como una enorme alfombra con pequeños caminos de piedras color perla que con los rayos del sol creaban un efecto tornasol muy tenue y hermoso, una fuente dorada al centro majestuosa y sutil al mismo tiempo, árboles florales en macetas de oro y arcos de rosas blancas adornaban cada rincón del lugar junto con bancas doradas, un par de sauces  que lucían ya cientos de años de vida se hallaban en lados opuestos del jardín; todo estaba protegido por enormes muros color marfil cubiertos por rosales en forma de enredaderas y con arcos dorados que dejaban ver un pasillo, en su antiguo hogar ese pasillo solo era accesible para Frigga, Odín y sus hijos y conectaba directamente a la habitación de la Reina, seguramente este nuevo pasillo conecte a alguna habitación, probablemente a la de Thor pensó Loki.

-Es hermoso ¿No crees? - Thor rompió el silencio que se apoderaba del lugar, se quedó parado en la entrada y dejó avanzar a Loki sin detenerlo, sabía que él amaba ese lugar y por ello dejó que observara cada parte.
-Lo es - su voz fue un murmullo que Thor apenas logró escuchar -. No puedo creerlo Thor - su corazón latía rápidamente, estaba feliz - ¿Cómo es posible?¿Cómo lo lograste? - Giró para mirar a Thor mientras una lágrima resbalaba por un lado de aquella enorme sonrisa que tenía dibujada en los labios.
-Recuerdo perfectamente como es este lugar - Thor se acercó a Loki y lo encerró entre sus brazos mientras besaba su cabeza -. El pasillo no conecta a mi habitación - susurró -. Este lugar ahora es tuyo - tomó del mentón a Loki y alzó su rostro para besarlo.

Aquel beso se extendió, Thor abrazaba a Loki mientras una de sus manos se colaba bajo la camisa de Loki para así recorrer su espalda.

-De...Détente - Loki rompió aquel beso largo y dulce que estaba disfrutando así como aquellas caricias que lo hacían perder la razón y que tanto le encantaban, pero se vio obligado a detenerse puesto que Narfi estaba entre sus brazos.
-Estamos solos - Thor acercó a Loki hacia él -. No pasa nada - la mirada turquesa se clavó intensa en los ojos esmeralda que parecían titubear.

-No Thor... - Sus labios fueron atrapados antes de que pudiera continuar y nuevamente se perdió en un beso.
-Será mejor que regresemos... Tony a de estar esperándonos - esta vez fue Thor el que detuvo el beso y al parecer la razón regresaba a él, dejando a Loki confundido y alterado.
-Podremos volver después - Loki suspiró y sonrió, su respiración estaba acelerada y miraba a Narfi para disimular.

Salieron del jardín, volvieron a recorrer los caminos sorteando todo obstáculo, llegaron con Stark quien parecía molesto puesto que a él no lo llevaron y lo hicieron esperar; observó a los dos asgardianos que se acercaban a él, Thor parecía tranquilo como siempre pero Loki lucía inquieto, ansioso y desviaba la mirada cada que se cruzaba con la de Thor.