capítulo 13

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*en la cabaña*

"en la noche"

12:30 PM

Se encontraba el gato al frente de la puerta con el cartel de "Yuri", entrando y viendo como Angie dormía tranquilamente. Toma su forma humana abriendo el cajón y agarrando el alma y corazón del vampiro mientras salía de la cabaña rumbo a donde se encontraba Michael Hood, no le fue muy difícil encontrarlo, ya que pudo percibir su aroma, no por nada era de los mejores (y también porque se ponía a espiar los mapas del mago y encontró marcado el lugar, cosa que Yuri nunca se preocupó en buscar porque le prometió a el mago que protegería la cabaña hasta que él fuera buscarla, y desde ese momento han pasado años y ni un rastro del Sr. Hood cerca). Luego de tres horas de viaje al fin llega a donde el brujo se hospedaba tocando la puerta.

-¿¡Mangel!?-gritó el brujo muy sorprendido-¡ha pasado tanto tiempo, pero mira que cuanto has crecido!

-ha sí...tengo algo que decirte...es sobre Yuri-dijo Mangel haciendo que Michael se ponga serio.

-pero primero, pasa-se hizo a un lado para que Mangel ingresara a la casa- disculpa si todo esta tan sucio, sabes que siempre fue Yuri la que se encargaba de mantener todo limpio.

-sí, lo entiendo. No te preocupes- cerro la puerta y fue a la mesa-...Yuri tiene un corazón y un alma y los ha cuidado desde esta mañana-sacó el corazón y luego el alma en el frasco.

Michael puso cara de haber visto a un monstro cuando empezó a examinar el corazón y se sobresaltó más al darse cuenta de que clase de alma era la que tenía en las manos...

-oh no, no, esto es malo. Es un maldito vampiro, un chupasangre asqueroso ¿Sabes lo peligroso que ha sido eso?- se acercó a Mangel y lo tomo por los hombros-¡ni este corazón ni esta alma tienen valor alguno! ¡Los vampiros no tienen corazón que funcione! ¿Qué demonios ha hecho para que creciera?

-ella... creo que le dio cariño, pero ella piensa devolvérselo a ese vampiro- Michael negó rápidamente y lo sacudió.

-esto es enserio, lo devuelva o no, ella está en grave peligro ¿para qué demonios querría ella su alma?- dijo Michael con el ceño fruncido.

Michael es la clase de hombre que cuando se preocupa por algo (ya que siempre esta relajado), es capaz de destrozar la idea que se tiene de él. Uno siempre lo ve tranquilo, rara vez de mal humor, pero cuando se enoja es capaz de matar a cualquiera.

Cuando Michael tenía 18 años, aceptando un favor de un hombre que había conocido, se hizo cargo de una de las pocas bestias más poderosas y majestuosas. Resultaba que el padre de Yuri era hijo del mismísimo primogénito de un dragón de la segunda generación de dragones celtas que existe. Pero no, Yuri no es nada del otro mundo, no exactamente algo del otro mundo, si lo fuera, no sería humilde con otros seres vivos. Los dragones son orgullosos y con un complejo de superioridad que provocaba odio en cualquiera. Yuri era hija de un demonio de la prehistoria humana.

La abuela de Yuri era humana, así como su madre. Gracias a ello, la raza se había perdido. Si no fuese así, Yuri sería un dragón .había algo que heredo sin embargo, la resistencia a los ambientes calientes y al fuego. Su piel era suave, pero tras esa suavidad estaba el secreto de sus orígenes, orígenes que desconocía de ella.

Desde pequeño había sido un brujito atrevido, con más agallas que altura incluso.

*recuerdo de Michael*

Se acercó al dragón, aprovechando que estaba medio muerto y le sonrió, pícaro

-creo que estas en una mala situación... ¿o no?

-los niños como tu son cobardes, pero eres diferente. Me parece que quieres morir -dijo con su voz gruesa, casi infernal

-te quiero ayudar- se acercó al dragón- y puedo ayudarte, soy brujo. Llevo sangre de las Bernan, supongo que las debes conoc-lo interrumpió

-soy más antiguo que esas brujas de pacotilla, y si, las conocí. Asesinaron a mis esclavos

-en fin, ¿quieres que te ayudo o no?

-eres un brujo, no me tomes el pelo. ¿Qué es lo que quieres a cambio?

-tu alma

***

Le tomaron 10 años sanar las heridas del dragón, Yuri llego a manos de Michael con tan solo 3 años, no tenía recuerdos de su abuela, casi y apenas hablaba. Michael la crio por el afecto que le tenía a su amigo, el dragón sin nombre que vaya a saber dónde estaría ahorita.

*actualidad*

Yuri estaba en manos de un asqueroso vampiro. Michael Cada vez apretaba más los hombros de Mangel. Lo quería asesinar

.......

Hace varios años una Yuri con 7 años había llegado a la cabaña con un gatito negro lleno de heridas y desnutrido. Michael simplemente no pudo negarse a la cara de pena de la niña, pero le pidió que le dejase revisar las heridas al gato y que mientras fuera a buscar algunas frutas por el bosque. Ese gato era un brujo, uno joven pero prodigio y lo conocía. Era el aprendiz de uno de sus colegas. El gato con una transformación dolorosa, que mejoraría con el pasar de los años, se convirtió en un niño unos tres años mayor que Yuri, su única diferencia a los niños físicamente era su cabello verde, seguía estando desnutrido y lleno de cortes, unos leves y otros profundos

-esta... ¡está muerto!-dijo respirando violentamente-están...-tosió sangre- están cazando a los brujos, brujas, hombres lobo, dragones, ogros, híbridos en general con ayuda de una vampira y- fue interrumpido

-niño, cállate de una vez, claro que lo sé... ¿te vieron, verdad?

-sí, pero él me dijo que viniera aquí...

-¿Qué?, no voy a dejar que te quedes aquí prodigio, no ahora que te vieron

-¡hare lo que quieras, debe haber una forma de que pueda quedarme!

-la hay pero...

-¿pero?

-tienes que renunciar a tu educación como brujo y como niño y vas a ser el guardián de la muchachita que acaba de irse. Se llama Yuri, esa es una condición, la segunda es que, entregaras tu vida a ella en caso de que se vea en peligro- a Mangel no le agradaba de todo las ideas, pero no tenía otra opción que aceptar-júralo rápido y vuelve a tu nuevo cuerpo, Mangel

Asintió y con mucha dificultad se transformó en un gato, con el tiempo Mangel entendería que quizás esa misión era la mejor decisión que había tomado en su vida

......

El brujo tomo del cuello a Mangel y lo estrello contra la pared. No cuido de Yuri, había dejado que ese vampiro se acercara a quien para Michael, era su hija. Comenzó a darle varios golpes en la cara, Mangel no hacía nada, sabía que estaba en perfecta falta, si Michael decidía matarlo en ese preciso instante, no diría ni una sola palabra para negarse, había jurado cuidar de Yuri y no lo cumplió. Le agradecía a Yuri por todos los momentos vividos, por estar ahí. Porque no se aburrió de ese gato amargado. Michael seguía golpeándolo mientras la vista de Mangel se nublaba

Hasta que recordó su razón para vivir. Yuri despertaría, le serviría la comida y pasarían todo el día juntos, y no solo eso ¿Quién la acompañaría y cuidaría de ese asqueroso vampiro?

Detuvo el puño del brujo, hoy no era el día, mañana tampoco lo seria

-no he cumplido mi promesa aún.

Cambiando el DestinoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora