Capitulo 18- Cruda realidad.

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Maldicion...

Vánely

Y ahí estaba yo, dando golpes desesperados y patadas al aire, me ahogaba en inmensos gritos de una extraña mezcla entre desesperación y una cólera que aprisionaban mi mente bloqueándola de otras posibles ideas para escapar de allí.

Ya no me importaba nada, estaba tan cerca pero tan cerca de lograrlo... Me frustro solo al pensar lo qué pasó y como de una mejor manera lo hubiese planeado todo.

El tiempo parecía ir lento y todo se resumía a movimientos fuertemente forzados para obligar a que me suelten de una vez por todas y así lograr correr, pero, a simple vista y a pura lógica eso no iba a pasar, Linkin es una persona fuerte y grandemente robusto al igual que Parker, solo que éste físicamente era un poco más delgado, cosa que no disminuía su fuerza.

-¡¡¡Suéltenme!!!- Grito desesperada y colérica.

Caminábamos por un largo y gran pasillo que consistía en paredes llenas con pinturas de frutas y panoramas naturales.

Luego de constantes forcejeos que solamente acababan mi energía y no inmutaba a los sujetos pude distinguir una gran puerta de madera que a simple vista parecía Caoba refinada, estaba impregnada de tallados delicadamente hechos, portaba un marrón que pocas veces había visto, un marrón interesante, intenso y concentrado, un marrón que daba lucidez de elegancia. Una vez frente a aquella puerta una persona salió detrás de nosotros con un aro que contenía incontables llaves, ¿Acaso ese club era tan grande? Ni siquiera me percaté de que hubo una persona detrás de nosotros todo ese tiempo pero es que ni se distinguía; de éste emanaba inseguridad y timidez, era alto, flacuchento y con ese medio jorobado con que se distingue a todas las personas altas.

Inmediatamente sacó las llaves y abrió la cerradura dando incontables vueltas haciendo que salga de su lugar cada uno de los seguros que aquella contenía.

La puerta se abrió lentamente rechinando, parecía que esto era antiguo. Linkin aseguró bien mi agarre.

-No Link...

Mis súplicas fueron interrumpidas al notar algunos gestos extraños que hizo Parker, más bien parecía como si me hubiese mandado a callar.
El tipo flacucho los miro extraño como si sospechara algo de ellos y al notar esto ambos se pusieron rectos y no me miraron más.

-Usted debe aprender quien manda aquí bruja desquiciada- Dice Linkin poniendo énfasis desquiciada. Me dejo bastante confundida.

-Si... Ehm... ¡Bruja! - ¿Acaso me había metido sin mi conciencia sana en una obra de teatro mal pagada?

El sujeto de menos masa corporal entrecerró los ojos.

-Vigilenla bien. Hay órdenes de que debe estar lista para esta noche, tendrá visitas. Por el momento déjenla encerrada sin agua ni comida. Más adelante vendrán por ella para alistarla y por lo menos beberá un jugo ¡Jaja!

Sentí unas ganas inmensas de patearle las bolas y ¿adivinen que? A Vánely Dariela Cambell (Si, tengo un segundo nombre el cual odio levemente) nadie la humilla, absolutamente nadie. Le di una patada justo en sus testiculos y esa risa pasó de ser abierta al público a convertirse en un grito ahogado.

-Hija de puta- Dijo agarrandose sus partes...

De repente se levanta y me clava una bofetada que me hizo sacar por obligación el aliento de vida que tenía, quede paralizada con el rostro de lado. Linkin reaccionó de una manera extraña pues parecía que se le iba a lanzar a golpearlo pero Parker discretamente sostuvo su brazo haciendo que éste controlara sus impulsos.

Vantú.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora