Rescatándote
-Es mejor así, mi señor -respondió Hinata mirando directo a sus hermosos ojos azules. -Por favor, confía en mí.
Y por primera vez en su vida, Naruto sintió terror. Además de estar furioso. Tan cerca para rescatar a Hinata y a la vez tan lejos, no podía confiarse en la habilidad del mago. No mientras hubiera caballeros negros con arcos, no si era peligroso para ella, no mientras la lucha se libraba, no mientras el maldito abrazaba a su esposa...
Shinju no dudó y dobló el brazo alrededor del cuello de Lady Hinata.
Después, se retiró con rapidez hacia la bruma que llenaba el patio. Tora le seguía.
-¡Maldigo tu alma podrida, maldito mago! -La furia se apoderó de Sir Naruto en un arrebato de ira fiera e infernal -¡TE MATARÉ!-
El Sannin escuchó con detenimiento como el sonido de los cascos de al menos dos caballos se alejaban en la niebla. El tiempo era limitado, pero como señor feudal debía imponer el orden en el castillo. Y luego matar al maldito que había secuestrado a su esposa. Talvez cinco minutos, pero ya era toda una vida ante los ojos del Sannin. La niebla de las explosiones mermó considerablemente, al igual que los gritos de los hombres.
-¡IRUKA! -grito entre la multitud. -¡SHIKAMARU!
A las puertas del castillo se divisaron dos figuras conocidas. Sir Iruka corrió hacia su señor. -de los ocho KuroiZetsu que llegaron hemos matado a tres..- informó –Utakata apresó a dos, y los otros dos -indicó con la cabeza hacia los hombres encapuchados que llegaron a él de rodillas -ya se rindieron. Los cinco del muelle están apresados en las mazmorras del castillo...
-Y el que falta es el llamado Tora...- terminó de indicar Shikamaru -y Shinju..
Los ojos del Sannin se fijaron en los KuroiZetsu.
-¿Cuáles eran sus planes luego de robar el castillo?- preguntó el Sannin con su voz grave y letal a los dos encapuchados que estaban de rodillas frente a él.
Los hombres lo veían aterrorizados. 'El canto del Rasengan' seguía en la mano de su amo. Sin dudarlo la acercó a la garganta de uno de ellos. Y movió su ceja acentuando la pregunta.
-solo robábamos... y nos íbamos de aquí -dijo uno.
-pero ahora que no hay un barco esperándonos en el muelle...
-¿HACIA DÓNDE SE DIRIGE SHINJU?- gritó perdiendo la paciencia Sir Iruka.
-Hacia las cuevas...- intuyó el Sannin.
Ellos asintieron.
-Si ella muere... ustedes también...- sentenció el Sannin -¡Iruka!, quedas al mando del castillo.
Sir Iruka asintió. 'El canto del Rasengan' entró segura en la funda de Naruto.
-Yagura, prepara a Kurama... no pueden estar muy lejos.
-¡Esperad, mi señor! -exclamó Anko que estaba tendida junto a su hijo, Kabuto apenas despertaba del aturdimiento provocado por el golpe del mago.
-¿Qué sucede?. -Naruto estaba demasiado ansioso por partir y rescatar a su dama.
-Debo decirle algo antes de que persiga al mago –enfatizó Anko -Hinata-san puso girasoles dentro de la bolsa. Sir Toneri pronto sufrirá un ataque de estornudos. Le empezarán a llorar los ojos y se quedará indefenso.
Naruto miró a Anko -¿Estás segura de eso?
-Sí, mi señor. Tiene una terrible alergia a los girasoles... Hinata-san nos lo explicó hace poco, antes de que cambiara sus ropas por las de 'Minato'.
ESTÁS LEYENDO
Sannin de Konoha
FanfictionAdaptación de Anelis Evans. En la era medieval un poderoso caballero Sannin se dispone a reclamar la Isla de Byakko como su nuevo hogar, salvo que la dama regente acepte como su candidato ideal. UA. NaruHina.