Cartas de Amor a Lydia

El Gran Partido

El día llegó, era una noche fría, con un poco de niebla, los estudiantes llegaban de a poco, las gradas se llenaron, los profesores se acomodaron y el Couch sopló el silbato para dar inicio al juego. Era un juego rudo, el instituto contrario siempre pérdida contra nosotros, era obvio que había un cierto odio entre todos los jugadores y se notaba. Pero eso no importó cuando Jackson logró anotar el primer punto. Jordan y Jayden jugaban en conjunto, se la pasaban entre los dos mientras corrían por el campo esquivando a todos, juntos eran imparables. Nadie pudo evitar que metieran tantos puntos.
Al medio tiempo, fue nuestro espectáculo. Después de una excelente rutina Jenna y yo fuimos lanzadas por los aires para hacer una voltereta y caer en brazos de los chicos animadores. Todo salió excelente esa noche, nuestra rutina, el partido de los chicos, las ventas escolares. Así que al final fuimos a Loocki's para celebrar.
Jordan, Jayden, Sean, Jackson, Jenna y yo. En una mesa compartida pedimos una pizza y unas sodas.
-. Me encantó su rutina chicas, tendrán que planear otra para el siguiente partido.- Dijo Sean amablemente. Él también había metido algunos puntos, pero no se había lúcido tanto como el capitán.
-. Tendremos algo mucho mejor para entonces.- comentó Jenna.
-. Ustedes jugaron excelente, 20 a 5 fue mucha diferencia.- dije con una sonrisa, el otro equipo había sido destrozado.
-. Sabes que ellos no son el problema, sino Rushmore.- dijo Jackson. Y la verdad era que si, Rushmore era un instituto un poco más lejos que era el principal rival de los chicos, era un odio mutuo. En el día de los inocentes, ambas escuelas se juegan bromas tan pesadas que una vez su director termino llorando. Además de que en las fiestas en las que están los dos institutos nunca terminan bien. Travis, el capitán del otro equipo, es muy apuesto, pero nada caballero, siempre quiere golpear a Jackson. Ya saben, entre capitanes.
-. Les patearemos el culo.- dijo Jordan.
-. No estoy tan seguro hermano, Travis esta furioso este año, le ganaron al instituto cercano 30 a 4 hace un par de noches.- Dijo Jayden con cara de preocupación.
Uf eso era bastante feo, en la final estoy segura de que quedaría Bealls High contra Rushmore.
-. Tranquilos chicos, somos Bealls High, ganaremos.- dijo Jackson pero no supe descifrar si estaba nervioso o tranquilo.
Nosotras por otra parte, no teníamos problemas, Rushmore no tenia equipo de animadoras. Así que su instituto pagaba un poco para que animemos a ambos. Nosotras no teníamos nada contra Travis y su equipo, ellos eran amables con nosotras. Pero era obvio por quien dabamos todo.

El jueves pasó rápido, ya era Viernes. Hoy compartía biología con Sean y esta noche sería nuestra cita. Estaba nerviosa.

-. Buenos días Lydia.- Me dice cuando tomé asiento junto a él.
-. ¿Cómo estás Sean?-.
.- Estoy estupendo, y más porque esa noche saldremos.- Y me dio una sonrisa seductora.
.- Lo sé Sean, deja de hacerme esa cara.- era muy gracioso tratando de subir y bajar las cejas, guiñar el ojo no le salía.
.- A donde ire...-. Pero no pude terminar porque la profesora entró.
.- Es una sorpresa.- Me susurró.
Y con esa respuesta estaba más nerviosa.

Las clases pasaron rápido, y fui con Jenna a casa para que me ayudara a prepararme para la cita. Arreglé mi cabello, mi maquillaje, me pinté las uñas y me puse unos jeans con una blusa y una chaqueta, debajo mis botas negras. Hacía un poco de frío.
Cuando Sean pasara por mi, Jenna se esconderia. Teníamos un plan, ella se quedaría a dormir y cuando yo regresara le contaría todo.
La puerta sonó y baje rápido las escaleras para abrir la puerta. Del otro lado, me encontré con un apuesto Sean, vestido con unos Jeans negros, una remera blanca y una chaqueta de cuero junto con sus vans. A pesar de que estaba bastante simple, se veía genial. Me agradaba eso, él podía deslumbrar sólo con su mirada tan profunda como el mar.
-. ¿Nos vamos?-. Me preguntó con una sonrisa, mientras lo inspecciona internamente.
-. Claro.-
Condució un rato en su Jeep negro polarizado, hasta que llegamos a un parque completamente vacío, era hermoso, árboles, flores, césped recién cortado. Nunca había venido.
.- Vamos.- Dijo bajando del auto para abrir mi puerta.
Caminamos hasta llegar al medio del parque, un mantel rojo brillante sobresaltaba en el césped. Lleno de velas y en el medio una canasta con dos copas. Era hermoso, no podía creer que Sean hiciera todo esto para mi.
-. ¿Qué te parece?-. Me preguntó tomando mi mano para que nos sentemos.
-. Me fascina.- Le dijé y no podía ocultar una sonrisa boba que salía sin permiso de mis labios.

***
Jordan y Jayden en Multimedia.