Cartas de Amor a Lydia

Fin del Verano

Hoy es el último día de vacaciones y este mi último año de instituto. Deberé enfrentar grandes cambios. Dejar a mis amigos, elegir una buena universidad y mudarme.
No se si estoy lista, pero todavía me queda este tiempo y voy a disfrutarlo al máximo posible.

Hoy es el primer día de mi último día.
Al levantarme, me visto y cepillo mis dientes. No hay tiempo para desayunar. Jenna esta esperando que la pase a buscar, así que me apresuró para no llegar tarde.

-.Hola Jenna, que tal.
-.Lydia! No nos vemos hace dos días, como te atreves a decirme sólo 'Que tal'.- Jenna siempre fue de esas amigas que no pueden sobrevivir por si solas. Pero yo ya estaba acostumbrada.
-.Pero estoy bien gracias.- Y me da un fuerte abrazo dentro del auto.
-. Estas lista para nuestro primer último día?-.Le digo con felicidad.
-. Siempre lista.- Y me observa con una agradable sonrisa. Mientras se retoca el labial en el espejo del auto.
-. Entonces aquí vamos.-

20 minutos después llegamos al instituto. Todo sigue igual, los adolescentes entrando en la jungla. Casilleros repletos de libros, pisos limpios que no durarán mucho por las pisadas y escupitajos de los estudiantes, los profesores entrando con su mayor cara de felicidad (irónicamente).
Jenna logra ver a nuestro grupo de amigos y nos acercamos a ellos. Nos conocemos desde el primer año de preparatoria y nos hemos vuelto inseparables.

Primero esta Jackson el mujeriego, cada día se acuesta con una chica diferente. Por su ejemplar físico perfecto es él mas deseado en el instituto, capitán del equipo de Lacrosse. Su melena y sus brillantes ojos negros le dan su fama de chico malo. Además de que nunca olvida su chaqueta de cuero junto con su motocicleta.

Por otro lado, están Jordan y Jayden, conocidos como los gemelos más sexys del instituto y los Reyes de las bromas. Absolutamente todas fueron a causa de este par. Atraen a todo tipo de chicas. También juegan lacrosse.

Y después esta Jenna, mi mejor amiga desde la infancia, tiene una melena rubia y unos ojos celestes que impresionarian a cualquiera que se cruce por su camino. Desafortunadamente (para los chicos) ella sale con Nick, mi hermano, de 19 años. Guapo y honesto, es un gran persona y debo admitir que es un excelente partido. Es él hombre que todas desean.
Después estoy yo, Lydia, mi cabello es pelirrojo natural. Tengo ojos verdes y una estatura promedio.

Se preguntarán por qué encajo en el grupo de atletas? A sí, porque olvide mencionar que Jenna y yo somos animadoras. Pero eso no nos hace huecas y superficiales, somos inteligentes y honestas. Este no es un instituto como todos los demás.

-. Hola.- digo y levantó mi mano para saludarlos.
-. Lydia, Jenna, las estábamos esperando para entrar.- Dice Jackson a la par de que nos saluda a ambas con un abrazo.
-. Chicas chicas y más chicas nuevas que conquistar este año.- dice Jayden subiendo y bajando las cejas.-
.- Este será un gran año hermano.- Agrega Jordan.
.- Bueno si este par dejara de babear podríamos ir a nuestras clases, no Lydia?-. Me dice Jenna.
.- Claro, chicos tengo que ir a buscar un libro en mi casillero, nos vemos en el almuerzo?-. Les dije.
.- Claro-. Responden los chicos.

Al llegar a mi primer clase, estaba sola, no había señales del grupo, Biología avanzada era solo para unos pocos. Tomé asiento junto a un chico nuevo, al parecer.
Me mantuve escuchando a la profesora Lenstein, hasta que sentí un pellizco en mi brazo.

-. Disculpa, eres Lydia, no?
-. Correcto, y tú eres..?
-. Me llamo Sean, quería preguntarte si podías prestarme un lápiz para tomar apuntes. Parece que me lo deje en casa.
-. Seguro, aquí tienes Sean, gustó en conocerte.- Le tiendo el lápiz y le doy un apretón de manos.
-. Igualmente preciosa.- y me guiñó el ojo descaradamente.

Hice caso omiso a su último comentario y me gire para atender a la profesora. La verdad era que Sean es bastante apuesto, un cabello rubio brillante y unos ojos azules como el mar. Se veía alto y musculoso, me pregunté si tal vez entraría al equipo de Lacrosse.

Al final de la clase la profesora dijo que esos serían nuestros respectivos lugares durante el semestre y la verdad no me apetecía cambiarme, Sean parecía bastante agradable.

Cuando el timbre sonó anunciando el almuerzo no podía esperar para ver a los chicos y comer algo, la clase de Historia con el profesor Roggers, me había dado hambre. Me aburría mucho.

Al encontrarme con Jenna fuimos por unas hamburguesas en la cafetería y nos dirigimos a nuestra mesa en el centro, donde se encontraban todos.
.- Qué tal sus clases chicos?-. Dice Jenna en general.
.- Nos dormimos en Filosofia y nos enviaron con el director.- Dijo Jordan señalando a Jayden.
Los jugadores de Lacrosse tenían una especie de "inmunidad" es decir que nunca eran castigados. El instituto se basaba en el Lacrosse, movía mucho directivo escolar. Entonces si los jugadores estaban despreocupados ganaban y si ganaban, el director era feliz y todo seguía en pie.
Era como un pase libre.

-. Bueno mis clases fueron normales, el entrenador dijo que tengo que seleccionar un nuevo capitán para el siguiente año, cuando nos graduemos.- Dijo Jackson entusiasmado.
-. Es genial Jackson-. Digo con una sonrisa.
-. Y que hay de ti Lydia-. Me responde.
-. Conocí un chico en mi clase de biología, es nuevo, se llama Sean, es bastante musculoso, tal vez lo conozcas Jackson. Supongo que hará las pruebas para entrar al equipo.
-. Ah si, ese chico, el entrenador me dijo que lo han expulsado de su anterior instituto por una pelea con un rival del otro equipo, lo dejo en el hospital.- dijo bajando la vos como si fuera un secreto del FBI.
-. Pues a mi me parece agradable.- comenté mientras le daba un mordisco a mi hamburguesa.
-. Bueno si es ese que esta ahí es bastante sexy-. Dijo Jenna señalando a un chico rubio sentado sólo en una mesa en la esquina.
-. Creo que deberías decirle que venga Lydia, esta sólo.- me dice Jordan.
-. Buena idea.- respondí y fui hacia su mesa.

-. Eh... Sean, quería preguntarte si te gustaría sentarte con nosotros, ya sabes, para no estar solo.- Le doy una cálida sonrisa.
-. Si, claro, gracias Lydia, es que todavía no pude conocer a nadie.- me dijo con una sonrisa nerviosa.
-. No hay problema.- le dedique una cálida mirada.
Entrar a un nuevo instituto no era fácil.

Las horas pasaron lentas pero al fin llegó la hora de la salida que tanto habíamos estado esperando. Nos iríamos a Loocki's y Sean ya estaba invitado. Al parecer a los gemelos les había caído bien, pero Jackson no estaba del todo convencido.

Fue una buena tarde, pero ya era hora de volver a casa.
Me despedí de todos y conducí de vuelta a casa.

***
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