Extra I: Unión

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Hola, lamentó la demora ;-; espero que les guste y lean hasta el final. Gracias.
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—Shôto, detente. —Dijo, Midoriya en un suspiro ahogado por los labios contrarios—.

—Lo siento, no puedo hacerlo. —Respondió, con un sonrojo notable—. Amo besar tu piel... —puntualizó para continuar con su cometido—.

Sus respiraciones se encontraban agitadas, sus cuerpos calientes y todo giraba en torno pareja, quien consumía los sentidos del otro con su cuerpo. El ambiente cada vez se volvía más lascivo, más pasional. El aire que los rodeaba era color carmín, y sus cuerpos se fascinaban al tacto contrario. Shôto, trataba de identificar cada parte de piel de su amante. Saboreaba su cuello, al tiempo que una de sus manos de enredaba en lo cabellos verdes, y la otra se abría camino en la ropa de Izuku.

—Detente, te digo que basta. —Reprochó Deku en un susurró—.

—No quiero, y no lo haré.

—Alguien nos podría escuchar, Fuyumi aún está abajo.

Esa frase hizo "clic" en la mente del joven Todoroki, sería muy vergonzoso que su hermana mayor los encontrase así. Su pareja tenía razón.

—No quiero. —El chico semi-albino estaba haciendo puchero, aunque fuera casi imposible de creer, Todoroki Shôto mostraba una faceta muy consentida únicamente ante su novio—. Solo me detendré si me prometes que cuando estemos solos me dejarás hacerte lo quiera.

—Muy bien, o eso creo. —Deku no podía negarse a su pareja cuando se ponía así—.

Midoriya había acertado, después de un tiempo cuando ambos habían puesto en orden sus emociones, y ropa, Fuyumi subió a ofrecerles un poco de té y galletas. Asimismo, se quedaron conversando los tres sobre la vida en la escuela y otros detalles de héroes...

Fuyumi saldría de viaje esa noche. Los intentos de Izuku de volver a su hogar, fueron todos frustrados por Shôto, haciendo así que se quedara la noche en la mansión Todoroki.

—Chicos, me iré ya. —Dijo fuerte la chica—. Pueden comprar o preparar algo, Midoriya-san*, siéntete como en tu casa. Hasta luego.

Entre los dos prepararon la cena, y luego de disfrutar su comida casera, se dispusieron a ver películas. Se encontraban solos en una gran casa, en la misma cama y cubiertos por la misma sabana. Todoroki hizo varios movimientos estratégicos para quedar frente a su compañero.

—Te amo. —Susurró Shôto, para luego besar cariñosamente los labios ajenos—.

—Yo también te amo. —Recibió la respuesta por parte del peliverde—. Amo todo de ti—. Posterior a esas palabras besó la cicatriz característica de su novio.

—Ahora eres todo mío, ¿cierto?

—Lo soy. —Respondió con un tono carmín en el rostro Deku.

Todoroki no pudo evitar sentirse cautivado por las palabras y la expresión de su compañero. Ambos se encontraban embelesados mirándose mutuamente, con una luz mínima donde alcanzaban solo a ver el rostro contrario. Sus respiraciones se mezclaban su la voz de uno chocaba con la cara del otro.

Estaban acostumbrados a las caricias y besos, pero antes de este día no habían ido "tan lejos". Sin embargo, ansiaban tener un momento donde pudieran ser completamente del otro, ser un mismo ente, y complementarse el uno al otro, llenando las inconsistencias ajenas y destruyendo los miedos que los cubrían respecto a su relación.

Antes de darse cuenta, sus labios ya estaban juntos, juntándose suavemente. Sus brazos y manos se centraban en abarcar la mayor cantidad posible de información del cuerpo de su amante. Mientras entrelazaban sus dedos, con su otra mano Todoroki se abrió paso entre las ropas del peliverde, satisfaciendo su tacto con la piel del abdomen de Izuku, que pese a tener sus músculos marcados y firmes su piel era suave. La mano libre de Deku se desplazó a la espalda de Shôto, y deslizando su dedo por su columna, provoco un escalofrió que le recorrió todo el cuerpo a su novio.

¿Otro frío invierno? [TodoDeku]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora