2

24.8K 2.7K 2.2K
                                    


Sus dulces ojos castaños reflejaban mi angustia, y no quiero incomodarlo. Por lo tanto, sólo retiré mi pregunta.

-¿Cómo te llamas?

-Mi nombre es Osamu Dazai, gusto en conocerte.

-Mi nombre es __, un placer conocerte, también.

-__, podrías volver a poner el mundo como estaba?

-Tanta prisa tienes?- volteé a verlo. No lo había visto de cerca. Siendo sincera, es muy atractivo. Me pregunto qué piensa, o por qué está aquí, hablando conmigo.

-Pues, tengo que ir a.. -Dijo, pero le interrumpí.

-El tiempo paró, prisa es lo último que deberías tener.- Se tensó un poco ante estas palabras, dándose cuenta que es verdad. Una pequeña curvatura en mis labios apareció, en forma de burla discreta.

-Bien, me quedaré contigo un poco más.- Dejó de recargarse para pararse bien, y meter las manos en sus bolsillos. Es muy alto, tengo que inclinar mi cabeza hacia arriba para mirarlo -¿Y... qué pretendes hacer?

-No debería importarte.-di media vuelta.

-Tienes razón, pero, paraste el tiempo y no tengo nada más que hacer.

-Tienes el mundo para ti solo, haz lo que quieras.

-Bien, haré lo que quiera.- Dijo, para después ponerse enfrente de mí, y preguntar - ¿Qué quieres conseguir?

-Felicidad. - Bajé la mirada un poco.- Que la gente sea feliz.

-¿Cómo conseguirás felicidad parando el tiempo de esta manera? ¿Te hace feliz?

-Creando un plan. -Levanté la mirada, y observé con cautela la ciudad.

-¿Un plan?- ladeó un poco la cabeza.

-Sí, un plan de vida, supongo.

-¿Supones?

-Quiero hacer con mi vida algo que haga felices a los demás.

-¿Cuatro de cada tres palabras que dices se tratan sobre felicidad?

-¿Tres de cada dos palabras que dices son estupideces?- al terminar mi oración, soltó una pequeña risa, y reí también.

Levanté mi mano y dije: Off

El mundo volvió a como estaba.

Para las personas no pasó nada. Toda esta plática no pasó en ningún momento, fue un momento que no existió, fue un montón de nada.

-Ya hice mi trabajo aquí, ya hice feliz a una persona, ahora sólo me quedan Siete mil setecientos millones de personas.

-¿Enserio piensas hacer felices a todos?

-Enserio.- volteé a verlo con mirada seria, mostrándole que no es mentira, pero sólo le provocó un suspiro.

-Pues aún no soy feliz.

-Entonces prometo que te haré feliz.

|Terminada| Cuando el tiempo espere por nosotros. (Dazai y Tu) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora