Nightclubbing.

Las paredes tienen oídos.

-Matt, encontré a este tipo merodeando el refugio. -Hablo John mientras sostenia a alguien por el cuello.

-¡Ah! ¡Pero si es mi buen amigo, Scott! -Exclamó Matt acercandose brusacamente a Scott.

-¿Podrias decirme que demonios quieres? -Dicho esto comenzó a ahorcar a Scott.

-Yo... -Matt duramente podia hablar.

-¿Tu, que? -Preguntó Matt sujetando más fuerte el cuello de Scott.

-Se a donde irá... -Contestó Scott.

-Dime a donde... -Susurró Matt acercandose a la oreja de Scott.

-El faro de Alejandría. -Contestó.

-Después de todo no somos tan diferentes ¿no es así? ayudame a acabar con su patetica vida y te juro que podrás quedarte a la chica. -Dijo Matt mientras estiraba su mano hacia Scott.

Scott se limitó a estrechar la mano de Matt.

-John, dale un arma al buen Scott. -Matt rompió el silencio que habia.

-Pero Matt, apenas llega y ya.... -Dijo John pero fué interrumpido.

-John, John, John... Nuestro amigo Scott es de fiar... ¿Verdad? -Matt apretó más la mano de Scott tras esa pregunta.

-S-Si, asi es Matt... -Respondió.

-Bien, avisale a todos John, nos vamos de viaje...