Si Fuera... Si Pudiera (Rubelangel)

41. Recuerdo Haberlo Amado

Recuerdo haberlo abrazado como si él fuera lo único que me importaba en esta miserable vida.

Entramos lentamente a su departamento. Cerré la puerta con una de mis manos que se separaron de su espalda a duros esfuerzos, cada fibra de mi ser gritaba su nombre. Él se sentó en el sofá más cercano a la entrada, yo sólo me arrodille aun sin deshacer el abrazo.

Recuerdo el contacto de su nariz contra mi clavícula. Aún puedo recordar la sensación de sus lágrimas recurriendo mi cuello hasta perderse en mi pecho. Como la lluvia cuando tocaba mi rostro, podía disfrutarlo de una manera, de una manera hermosa, pero... me llenaba de una nostalgia enorme el sentirme así. ¿No ha ocurrido que disfrutas de la lluvia y de un momento a otro sientes una tristeza inmensa pincharte el pecho, de una manera tremendamente dolorosa? Así se sentía cuando Mangel lloraba.

No sé cuánto tiempo pasamos en esa posición. Sólo sé que yo trataba de sosegar sus sollozos. Trataba inútilmente de calmar el huracán que se adueñó de su pecho. Sentí que fue como combatir una sequía con tan sólo una gota de agua. Me sentía inútil. Me sentía impotente.

Él pareció calmarse un poco, fue hasta entonces que salió de su refugió sólo para instalar su mejilla contra mi pecho. Escuche como respiraba pesadamente, y yo no dije nada, sólo esperaba que los latidos de mi corazón lograran transmitir todo el amor que tenía para él. Que mi respiración lograra calmarlo.

Bastaron pocos momentos para que su respiración se regularizara, pero aun así él no parecía querer despegarse de mi pecho, y yo no me opuse. Escuche como suspiraba y susurró.

-Camila dijo que yo era un idiota.

Recuerdo haberle apretujado más contra mí, recuerdo como la sensación de ira comenzó a florecer en mis entrañas. Asentí, dándole a entender que lo estaba escuchando. Muchas veces no necesitas consejos ni nada de esos sermones, sólo necesitas ser escuchado.

-Ella quería que la presentarah como mí noviah, pero apenah estabamoh saliendo. No la conocía de más de ocho meseh, era ilógicoh. Le había dicho que era demasiadoh pronto, que debiamoh ehperar un poco más. Recuerdo que ella me grito, me dijo lo patético que era. Me dijo que si acaso era una ehpecie de idiota o gilipollah para creer que alguien como ella saldría con un... con un gordo como yo. Me dijo que sólo me buhcaba por fama, por interés, que yo nunca le importe –levantó su mirada lentamente para soltar un sollozo y luego bajar la cabeza- ¿Eh que siempre va a ser así?, ¿Siempre seré el chico marginado que no logra conseguih el amor por su físico?, ¿Eh que acaso nunca llegará eha persona?

Recuerdo el sentimiento de fuego en mi pecho. Apuesto lo que sea a que todo mi ser estallaría de cólera, inconscientemente gruñí y me aferre aún más a él, si es que eso era posible. Me relaje lentamente. Suspire y me separé un poco de su anatomía, con una mano sujeté delicadamente su mandíbula y levante su rostro, lanzándole una mirada dulce y le susurré muy cerca de sus labios.

-Nunca en tu vida vuelvas a decir una tontería como esas, Mangel. Tú no eres un idiota. No eres un gilipollas y ella no es digna de ti. Mangel, eres una de las personas más lindas que conozco –sentía su aliento combinarse con el mío, creando un bochorno embriagador- Nunca, ¿De acuerdo?

-Pero... -le interrumpí.

-¿Vas a creerle más a una chica que a mí. Tu mejor amigo? –sonreí al ver que el negaba con sus labios curveados-. Eso creí.

Recuerdo que tenía una enorme desesperación por besarlo, en serio lo hacía. Sólo quería estampar sus labios con los míos y hacerle sentir mi amor. Quería besarlo delicadamente, con toda la dulzura posible. Quería hacerlo sentir amado y borrar con mis caricias cada frase que salió de la boca de Camila, y de cualquier persona que lo haya lastimado a lo largo de su vida. Quería besarlo con todo el amor que tenía solamente para él.

Pero entendí que en ese momento yo era su mejor amigo y ya, solamente eso. Me contuve, controle a la terrible bestia que se adueñaba de mi pecho y rugía por besarlo y hacerlo mío. Porque supe que lo amaba. Recuerdo haberlo amado. Y si lo hacía, tenía que esperar, esperar y quererlo en aquel lapso. Esperar a que él me quisiera como yo lo hacía.

Recordé su llanto. Recordé como busco refugio en mis brazos. Recordé como me confió sus miedos y sus dolores. Recordé que no había dos como él.

Recuerdo haberlo amado.

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Desde Coralsk actulizando dos días seguidos, hasta Rubén ukeandose a Mangel. Bienveeeeeeeenido a Wattpad :v

Ustedes dirán, ¿WATAFAK? D:

Bien, si no me siguen no estarán enterados, así que les recomiendo que lean el último mensaje en mi tablero. Tengo el tiempo medido y no puedo explicarlo. Mañana sí o sí actualización aquí y en el otro fic. Probablemente edite este cap cuando tenga posibilidad, I don't know ;-;

Espero les haya gustado y disfrutado. Cualquier falta ortográfica o de redacción ir a la caja de quejas en sugerencias, que queda en www.tucrushnoteamaynomeinteresaporqueyonotenertiempo.com y tu queja será enviada a la papelera. No mentira... a no serrrrrr...

Voten y comenten, hijos de la guayaba. :)