La cena

1.9K 94 95
                                        

Silencio, en eso se resumía aquella cena, en un silencio incómodo en el que las miradas tomaban el lugar de las palabras y sus integrantes se comunicaban a través de estas, ya sean buenas o malas.

El único sonido, además de la lavadora que se oía de fondo, era la comida siendo masticada. Esta cena es un desastre y el Sensei lo sabía, pero no iba a rendirse tan fácil, lograría que esos 7 se llevaran bien y eso sería muy difícil, por no decir imposible, después de todo los ninjas asistieron, lo que significa que están dando de su parte y él estaba muy agradecido con ellos.

Era la primera cena que los ninjas tenían desde que Morro entró al equipo a petición del Sensei Wu, era prácticamente la primera vez que socializaban desde que Morro dejó de poseer a Lloyd, obviamente sin contar las veces en las que casi se mataban.

Varios tipos de miradas estaban siendo lanzadas en esa cena, el ninja rojo mandaba miradas asesinas y de odio puro al fantasma de mechón verde, quien intentaba ignorarlas evitando el contacto visual.

La única chica del grupo se dedicaba a ver los rostros de todos, especialmente las de su hermano, que no dejaba de ver a Morro ni siquiera para comer, miradas indirectas para Morro, si bien no era odio lo que sentía por él, tampoco le alegraba que se uniera al equipo y sus manos estaban listas para cuando necesitase arrojarle agua si es necesario, también observaba el rostro del ninja verde y las emociones que expresaba, le preocupaba su amigo y como este llevaba la situación, finalmente el rostro del Sensei Wu, calmado y sereno, como si nada estuviera pasando ¿Cómo lo hacía? Se preguntaba la ninja del agua.

Zane se dedicaba a darle pequeños bocados a la comida que había preparado anteriormente intentando evitar cruzar miradas, especialmente con Kai y sus miradas que matan y con Morro, no sabía cómo sentirse al respecto, por un lado le incomodaba su presencia y le tenía cierto temor, y por el otro, él era como el hijo del Sensei y lo que hiciera feliz al Sensei lo haría feliz a él, aunque fuera aceptar a Morro en el equipo y tener que convivir con él. Pero adaptarse era difícil.

En cambio el ninja del rayo parecía un manojo de nervios, que intentaba ocultarlos comiendo rápido. Sus manos temblorosas que no podían quedarse quietas, junto con sus piernas, y el sudor que bajaba por el rostro de Jay estresaban de cierta manera a Morro, que a veces le dirigía miradas leves de asco, miradas que el de traje azul notaba y solo lo ponían más nervioso y agitaban su respiración, intentando no atragantarse con el agua.

Cole era el de la mirada más neutral, a veces, como Kai, le dirigía malas miradas a Morro, pero no con la misma intensidad que el castaño, y otras veces como Zane y Nya intentaba ignorar la situación.

Misako era la que intentaba hacer conversación hablando sobre el clima de ese día o lo deliciosa que estaba la comida que preparó Zane pero sus intentos eran fallidos y los ninjas solo se limitaban a responder sus comentarios con un "Sí" o un "No", a veces ni siquiera hablaban y solo asentían.

Y finalmente Lloyd, el pobre chico no sabía que pensar, que decir o cómo reaccionar, su mente era una alocada mezcla de sentimientos y emociones, más alocada que la mezcla de condimentos que Cole le ponía a su sopa de pato.

Entre aquellos sentimientos se encontraban el miedo, enojo, terror, preocupación, desesperación, ansiedad y muchos otros que no lograba identificar, solo se quedaba con la mirada perdida, viendo el rostro de Morro, como este comía (o intentaba comer), intentando descifrar lo que pensaba, si en verdad hacia esto por el Sensei o era solo otro intento de poseerlo, pero ¿Para qué? Eso asustaba al rubio porque, por más que intentaba y le daba vueltas al asunto no podía encontrar una razón malvada de su estadía, aparentemente, permanente.

One-Shots de NinjagoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora