Fue la primera vez que te vi, nunca había visto a alguien tan perfecto.
Recuerdo pensar que tenía que tenerte o moriría, y entonces susurraste que me querías; me sentí tan, pacífica.-Te odio, te odio tanto.
-No, no me odias.
-Debería... Debería odiarte.
-¡Hice todo para hacerte feliz! ¿Quieres saber de qué tengo miedo? ¡De todo! Tengo miedo de moverme, de respirar, de tocarte. No puedo perderte, no sobreviviría, y eso es tu culpa.
ESTÁS LEYENDO
Menos que uno
PoetrySomos más o somos menos. Aún así seguiremos escribiendo de lo que no podemos tener, de lo que tenemos y de lo que hemos perdido. *Textos recopilados. *Algunos escritas por mí.