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"Sabía que tenía que tomar
mi decisión.
Pero nunca hice tiempo.
En la oscuridad, desde hace
un tiempo.
No puedo quedarme,
hasta ahora
No puedo quedarme."

-"I Can't Stay", The Killers.

Se esperaba llantos, se esperaba furia, decepción en su mirada, puños apretados, a sus labios temblando.
Pero no, simplemente no.
Desde que la vio allí, en el ascensor, medio dormida pero con esa mirada tan viva.Con ese rostro de revista y ese cuerpo de infarto, supo que ella era distinta.

Si quieres conservarla, debes ir muy lejos.

Y nuevamente ella lo miraba, parada al lado del chico al que acababan de secuestrar. Su mirada aún irradiaba vida, llena de adrenalina, si, estaba nerviosa podía sentir le como palpitaba de rápido el corazón.
Pero ella no estaba lista para salir corriendo de allí aún.

Con pasos lentos y firmes se acercó al muchacho, el padre del pobre chico les debía mucho dinero, pero Gerald se encargaría de que el muchacho le entregue a su padre.
En bandeja de plata.

0-0

Ella agradecía que Dean encendiera la calefacción, para ser una noche de verano, había refrescado.

-¿Quieres encender la radio?-le preguntó su voz ronca. Ella sólo negó.
Aún podía escuchar el disparo del arma de Mat, aún podía escuchar a Dean amenazar a aquel muchacho, aún podía ver el rostro de Mike, lleno de angustia al soltarle la mano.

Él no quería eso, ninguno de ellos pidió esa vida, pero la tenían. Y sólo les quedaba vivirla.

-¿A dónde vamos?-preguntó para disipar sus pensamientos. Él se encogió de hombros- Hey, uhm ¿me cantarías algo?

El la miró de reojo.

-Kaydence, ¿Quieres hablar?

-No.

-Oh vamos Kay...

-¿Porqué intentas dejarlo? ¿No es peligroso?, es decir si ellos, tus uh
"enemigos",si te ven en la televisión o algo así ¿Ellos no intentarán hacerte daño?Ellos podrían reconocerte, ellos podrían intentar vengarse- se remojó los labios- Ello podrían hacernos daño- su voz comenzaba a temblar- Dean tu sabes que esto es peligroso, vivirás bajos las luces, no puedes mantener este secreto, no puedes...

El soltó una corta risa, cargada de amargura.

-Oh nena- murmuró, su voz sonó tan sonora y ronca, Kay sintió su piel erizarse- Cariño, no te preocupes por eso, vengo planeando esto desde hace tanto, a ellos no les importa mi fama, les importa el negocio. Lo que es justo, es justo. Mientras nadie irrumpa en la zona del otro bando todo estará en paz, ellos no podrían atacar, no sin ser atrapados antes.

-Suenas demasiado seguro.

- Estoy seguro- afirmó él- Nena, estoy tan seguro que hasta me asusto a mi mismo- negó con la cabeza- He esperado esto por tanto ...- suspiró.-Tanto tiempo.

Ella asintió, con timidez estiró su brazo y posó su mano en la pierna de él.
Sintió el cuerpo de él tensarse, por una milésima de segundo, claro.

-Oye, no sé cantar, realmente apesto- frunció la nariz- Pero puedo rapearte algo, soy malditamente bueno en eso- aseguró alzando ambas cejas.

Ella sonrió.

-¿Algo cómo qué?-inquirió mirándolo fijamente. Él se relamió los labios como por quinta vez.

-Mierda Kaydence no me mires así- soltó con una risa nerviosa ella rió también mientras él negaba con la cabeza- Muy bien, rapearé algo uhm solo una pequeña parte de lo último que he estado escribiendo ¿De acuerdo?

-De acuerdo.

-Uh But look at this baggage I got
My life is crazy, I travel a lot, but
When I dip out in the morning you could trust-la miró-I'll be thinkin' about you looking out the window of my bus yeah, yeah.

-'Cause I still remember you.-susurró ella, muy bajito. El detuvo el auto, la miró completamente anonadado, luego con el ceño fruncido el le preguntó.

-¿Cómo lo supiste?

-Le pegué una verdadera ojeada a tu cuaderno, lo siento-murmuró desviando su vista a la ventanilla.-Suena a una canción de despedida...

-Lo es- le contestó él y tragó duro.

0-0

Siete meses después.

Mientras todo daba vueltas a su alrededor, mientras su mano se aferraba a esa botella de alcohol.
Mientras caía de rodillas en aquel suelo frío.
Mientras que en su mente se repetía aquella tarde de abril, él podía verla.
La tristeza reflejada en su cara, sus labios fríos después de aquel beso.
Su sonrisa vacía.
Mientras se rendía, y su cuerpo chocaba contra el suelo, el aún recordaba todas esa putas con las que se acostó.
Durante todo lo que duró el tour, cada día una chica distinta, él seguía recordando esa sonrisa vacía.
Él le había dicho "no te rindas", ella contestó " sólo no dejes de llamar".
Cada noche, la llamaba.

Hasta que las cosas se pusieron más difíciles, colgar cada vez dolía más.
Veía noticias en Twitter , ella iba de la mano de un muchacho distinto cada día.
Y entonces, mientras ella conseguía un contrato cómo modelo de Whilhelmina, él era anunciado en el Time Square.
Y, mientras él arrojaba dólares a la multitud, ella deslumbraba en las pasarelas. Todo iba bien.

Sólo que mientras él la extrañaba, ella no contestaba sus llamadas.
Todo iba bien, porqué mientras todas esas cosas pasaban, él seguía recordándola.

James DeanDonde viven las historias. Descúbrelo ahora