Capítulo 15

14 3 0
                                    

Ese día volví solo a casa, me sentía triste y feliz a la vez mientras veía mi reflejo en el agua de un lago, cerca de mi casa. Estaba feliz, ¿por qué? porque sabía que Daisuke en verdad al que quería era a mi, entonces...en verdad lo quiero, Daisuke me gusta, ¿acaso debería decirselo? ¿no se notaba ya demasiado?, ¿de qué serviria decirselo? se iba hasta dentro de seis años a otro país, se encontraría a miles de kilómetros de distancia y al final se olvidaría de mí, conocería a alguien mejor y llegaría aquel día que tanto temo, en el que nos reencontremos y no se acuerde de quien soy, ni de los momentos que hemos pasado juntos. Con esos pensamientos en la mente volví a casa, rezando porque todo fuera un sueño, una pesadilla en la que el ser más querido se iba de mi lado durante mucho tiempo, rezando porque nunca se olvidará de mi, no él.
Al día siguiente desperté gracias a los rayos del sol que dieron contra mi cara, me desperté medio dormido aún, levanté mi cara de la almohada con mucho esfuerzo, y miré el reloj que estaba encima de la mesita de noche, eran las nueve de la mañana, me levanté rápido de la cama y me asee, iba a llegar tarde a clase y tenía que darme mucha prisa.
Salí corriendo de casa sin hacer mucho ruido para no despertar a mi abuelo y que se enfadara, corría a toda velocidad por las calles, intentando chocarme lo menos posible con la gente, hasta que llegué al instituto, medio asfixiado pero llegué y solo en 15 minutos, entré en clase, y después de la reprimenda del profesor me senté atrás.
Pasaron una a una las primeras clases de la mañana como de costumbre, en el recreo estuve solo, pero da igual, me puedo acostumbrar a eso, o eso creía.
La soledad poco a poco fue una rutina, pasaba las mañana solo en el instituto, aún estando rodeado de gente, me sentía solo, llegaba solo a casa y pasaba así el resto del día. Así pasaron los primeros tres días, en mi opinión fueron los más duros. Era de noche, encendí mi móvil "5 mensajes nuevos" me imaginaba de quién eran.
-Ken, ¿como estas?
Te echo de menos, llevas mucho tiempo sin hablarme, ¿te ha pasado algo?,quiero que sepas que me va bastante bien aquí, la gente es amable conmigo he hecho muchos amigos y me va bien con los estudios a pesar de que me cuesta un poco el idioma, espero que a ti también te esté llendo igual de bien, por favor escribeme en cuanto puedas.
Te quiero, y te extraño mi gatito ❤.
Una lágrima se escapó al leer los mensajes, le echaba tanto de menos, pero de ninguna manera iba a decirle que yo no estaba bien, no queria darle preocupaciones, me gustaba saber que estaba bien, y que por lo menos el había encontrado felicidad en distanciarnos.
-Hola mi pequeño Daichi.-escribí.- te echo de menos, no soy capaz de mentirte, nada es lo mismo desde que te fuiste, pero no estoy tan mal, a mi también me va bien en la escuela pero me gustaría que estuvieras aquí conmigo, por lo menos me gustaría verte una vez más solo eso... ¿sabes? Creo que me resulta más fácil expresar lo que siento cuando no tengo que mirarte a los ojos, quizás me sienta intimidado a veces cuando me miras, te quiero, y te echo muchisimo de menos...Ojalá volvieras....y no te fueras nunca más.- al escribir todo eso, miré el mensaje, me lo pensé varias veces, y al final decidí enviarlo, no tenía nada que perder.
Apagué el ordenador, no tenía ganas de ver que me respondería mi Daichi...no aún, me tumbe sobre la cama esperando a que algo interesante pasara en mi vida, hasta que decidí levantarme, y vi algo que preferiría no haber visto, eramos él y yo, mi pequeño daichi conmigo, en una foto de hacía unos meses.
-¿¡POR QUÉ!?.- grité a la nada.- ¿por qué...?.- las lágrimas fluian libremente de mi cara y corrían desde mi cara hasta mi cuello sin parar.- ¿por que te fuiste...?.- caí arrodillado en el piso con la foto en las manos.

- caí arrodillado en el piso con la foto en las manos

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

-Vuelve....por favor... vuelve conmigo...- me decía a mi mismo entre sollozos.
En ese momento, encendí el portatil. Y le envíe otro mensaje.
-Daichi...¿no puedes volver antes?
Esperé la respuesta con ansias.
-No se.. puedo preguntarle a mis padres si puedo ir el verano de vacaciones, pero no creo que pueda quedarme más tiempo, ¿por qué? ¿Me extrañas mucho?
-Ni te lo imaginas... siento un vacío por dentro que no había sentido nunca... vuelve por favor... no puedo vivir sin ti Daichi....
-Ken....yo... no se si podre.... no depende de mi... aún soy menor de edad, no puedo volver solo...yo...lo siento.
-Te quiero Daichi.
-Dios...Ken...no pensé que te fuera a afectar tanto, ¿de qué tienes miedo? ¿De que te olvide? ¿De que te sustituya?.
-¿Sustituirme? No somos nada... no tengo porque temer eso.
-No somos nada porque tú no quieres, es obvio que siento algo por ti igual de fuerte que lo que sientes tu por mi.
-Quieres decir... ¿Que quieres que seamos pareja?
-Sólo si tu quieres claro ❤
-Dios como me dices eso, claro que quiero, te amo Daichi, te amo muchisimo.
-¿Ya se te quitó el miedo eh? ¿Ahora si puedes creerte de verdad que soy y siempre seré tuyo~❤ ce-lo-sii-tooo?
En ese momento me sonroje muchisimo, y apagué el móvil para acostarme a dormir, ahora eramos oficialmente pareja, acaso...¿cambiaría algo entre nosotros? ¿sería muy difícil mantener una relación a distancia?

Me duele quererteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora