Advierto que hago spoiler de The Unwritten Rule de Elizabeth Scott
No sé como empezar esto porque como siempre tengo una montaña de pensamientos abalanzándose sobre mis dedos, sin darme la oportunidad de decidirme o arreglar mis ideas. Estoy vacía, confundida y a pesar de todo, feliz por todo.
Leí un libro llamado The Unwritten Rule, donde se muestra a una chica enamorada del novio de su mejor amiga, ella se sentía muy culpable por ello y a pesar de que el chico sentía lo mismo por ella, trato de silenciar sus sentimientos para no herir a su mejor amiga, quién no era más que una persona vacía y egoísta que la utilizaba para subir su autoestima y como trapo de lagrimas. Al principio pensé que el libro sería monótono y que no tendría algo que me atraparía. Pero a lo largo de la lectura, comencé a darme cuenta que la esencia del libro no era el amor que sentían los protagonistas, sino lo toxica que era la mejor amiga en su vida y la manera en la que la chica fue abriendo los ojos lentamente.
Después de leerlo me quedé pensando mucho sobre que personas debería eliminar de mi vida y en si tenía personas tóxicas a mi alrededor y como la chica, no estoy consciente de ello. Pensé que todo iba de maravilla y que en mi vida solo habían personas que a pesar de sus defectos me apreciaban tanto como yo a ellas. Supuse que todo iba bien.
El viernes pasado mi mejor amiga y yo tuvimos un encontronazo con las demás chicas del grupo y pasamos todo el fin de semana alejadas de ellas. El lunes bien temprano al salir de mi casa le pedí a Dios que alejara a las personas toxicas de mi alrededor y al llegar al colegio todas ellas se sentaron a mi alrededor a decirme el porqué de sus actitudes, se disculparon conmigo y les dejé todas mis inquietudes en claro, luego de esto decidimos dejar todo atrás. Mi mejor amiga llegó después de esto cuando me encontraba hablando con la otra María sobre algo irrelevante. Me levanté, dejando a María sola en la conversación para contarle que todas habían hablado conmigo. Ella solo me vió con la cara en blanco y me dejó hablando sola para ir a sentarse lejos de mí. No ha vuelto a hablarme ni a los demás.
Luego de que literalmente me ignorara y se alejara de mí, pensé que era una de sus habituales crisis en las que quería alejarse de todos y la dejé, sabiendo dentro de mí que no era una de estas crisis. Pasé todo el lunes distraída, sentía mi corazón latir rápido, tenía nauseas y un gran vacío en mi estómago y no podía dejar de pensar en como acercarme a ella porque no quería perderle, por que pensé que lo valía. Toda la clase de física estuve prestando atención pero dentro de mi mente no quedaba nada, solo podía pensar en si había hecho algo mal, si estuvo mal arreglarme con mis amigas o si solo era una de sus crisis. Mis nauseas estaban matándome y estaba en una situación en la que pensé que si me paraba dos segundos me desmayaría.
Logré caminar al puesto del abuelo de una amiga que me lleva siempre a mi casa como pude, ella también estaba enferma y con mareos, aunque por causas diferentes, por lo que estaba al pendiente de ella y de mí. Esperando que no le pasara nada principalmente porque mi mente no estaba para otra cosa más. Gracias a dios legré llegar y sentarme a disimular que no me sentía para la mierda. Hablamos de banalidades, aunque realmente solo respondía, porque por mi cabeza solo se preguntaba si debía acercarme a mi mejor amiga.
En el camino a mi casa, me pasó por la mente The Unwritten Rule. Pensé en que Sarah se apegó a Brianna porque pensó que la necesitaba, sin darse cuenta que en realidad era al revés, y que en toda la amistad fue solo una nube toxica en la que Sarah se entregó cuerpo y alma en siempre estar para su amiga, que solo la hacía sentir como the girl next door y bajaba constantemente su autoestima. Al final ella logró darse cuenta de ello, pero para eso tuvo que pasar mucho tiempo de agonía.
Comencé a pensar en todos los pro y los contra de nuestra amistad, en todas las cosas que ha hecho por mi y yo por ella, y con eso no me refiero a regalos o favores superficiales, me refiero a cuantas veces estuvo realmente para mí, cuantas veces me hizo sentir mal, cuantas veces prefirió a otros sobre mí y un montón de otras cosas tanto buenas como malas. Ahí me di cuenta que eramos Sarah y Brianna y que nuestro Ryan era mi tranquilidad. Que yo fui totalmente leal y que no tengo nada por lo que sentirme culpable o mal y que quizás fui más su amiga que ella la mía.
Pasé todo un día sintiéndome mal y distraída, sin recordar que esa misma mañana le había pedido a Dios que alejara la toxicidad de mi vida. Quizás muchas personas no crean en Dios y me den una respuesta lógica para lo que pasó excluyendo mis plegarias y quizás tengan razón. Pero fue una señal de que debía dejarla ir. Dejar de preocuparme tanto por personas que no se si me consideran tan importantes en su vida como yo a ellas. Y dejar de dar más de lo que dan por mi, por que realmente estoy cansada de de ser la que siempre está para todos cuando pocos están para mí. No es justo.
No debería sentirme mal por las malas actitudes de la gente si sé que no hice nada mal. Porque no me lo merezco. No debería ser pisoteada por las personas que quiero, porque si ellos me quisieran, no lo hicieran.
Lo más loco es que esta semana he estado genial con mis amigos mientras ella está con personas que juró odiar, que no la benefician en nada y que realmente no le agradan. Yo no voy a desearle nada malo, más bien le deseo todo lo bueno que pueda desearle a una persona, que sea feliz lejos de mí, que consiga amigos que la soporten y se amolden a ella como yo alguna vez lo hice y que simplemente sea feliz, porque si considera que soy una amiga hipócrita o falsa como estuvo publicando en facebook toda la semana a través de imágenes cuando yo no he hecho nada mal ni nada que se pueda considerar hipócrita o falso, entonces no debería volver a mi vida. Porque es una persona tóxica.