encuentro entre las supernovas

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En lo que había ordenado a las insufribles clones en conseguir la información de una mujer pura en la nueva isla a la cual habían arribado, Buffet, en donde habían oído rumores de otras criaturas de que había una alma pura femenina, Hecatombe había convencido a Juria de que saliera del barco y tratara de recomponerse, alegando que en su estado actual, deprimente, temeroso, y sin un atisbo de libido sexual, haría que ella se debilitara al tal punto que ya no pudiera existir, lo cual significaría que Juria perdería todo su poder

Después de todo, con el paso del tiempo, el primer atisbo del poder del pecado capital de la lujuria, el cual había despertado cuando el tatuaje del corazón/útero tribal apareció en el abdomen, casi llegando a la pelvis, que se produjo cuando Doflamingo le había arrebatado de forma violenta su primera virginidad, estaba empezando a desaparecer

Lo cual resultaba ser bastante problemático, sin poderes y siendo aún muy cobarde como para salir y tener contacto con "el mundo exterior", sería una enorme desventaja en batalla, sobre todo entierra ya que en el agua podía usar a Umi, pero las dos, tanto marioneta como creadora, sabían que no podían depender siempre del pobre océano para todo, no se debía abusar

Sin un buen contrargumento para decirle a Hecatombe, la demonio no tuvo otra que aceptar, mas eso no significaba que le gustara la idea, aunque sabía bien que tenía que recobrar el libido y con ello los poderes de la ero ero, pero no quería decir que la simple idea de salir del barco la hacía temblar, se sentía alterada y con unas ganas casi satánicas de volver a su habitación y esconderse para siempre, algo lo cual Hecatombe impidió, aunque ella entendía bien los sentimientos de su creadora, ya que estaban conectadas telepáticamente, así que iba despacio con ella, tratando de relajarla

Al llegar a la costa de la isla, Hecatombe le dio tiempo a la demonio de nuevamente acostumbrarse a un ambiente externo, algo que la peli blanca con aguamarina le agradeció profundamente; debía admitir, que estar afuera era hermoso, el aire fresco, el azul del cielo, el enorme paisaje, relajaba su sistema y le hacía sentir en paz, ¿Por qué se había privado de tanta belleza todo este tiempo?, vio un lindo pájaro rosado volar por el lugar, haciéndola recordar el por qué, y aunque lo odiaba, ella no se mentía, el miedo de que le volviera a suceder lo mismo o peor aún, volverlo a encontrar el

Pero debía ser valiente y superar lo sucedido, no solo por su bien personal, sino también por su reputación y sobre todo por el poder, ser más fuerte y superior a todos los demás, así, nadie podría hacerle daño otra vez, después de todo, ella se había puesto en mente ser la villana más grande que este mundo hubiera conocido y convertirse en el ser supremo, pero no podría hacerlo en este estado tan débil, como patético, no, así no debía ser la futura conquistadora del mundo

Un ser tan fuerte que podría igualársele a un dios

Si... así quería ser ella

Decidida, Juria le pidió a su marioneta que la dejara sola, para así ella poder demostrarse a sí misma que podía superar sus miedos, una poco extrañada pero satisfecha Hecatombe, asintió y se fue a merodear por ahí, recordándole que si la necesitaba solo debía llamarla mentalmente, así, se despidió mientras la demonio entraba en el pueblo

Con gran esfuerzo, ignoraba las miradas de la gente, su cuerpo temblaba de manera casi invisible, a la vez que gritaba desesperada en su interior, no le gustaba ser el centro de atención, pero era algo inevitable siendo ella una imagen no común a lo acostumbrado, ella era única, y eso llamaba la atención, veía los pensamientos lujuriosos que la gente tenía en su mente y le producía asco, sobre todo porque no estaba usando sus feromonas de efecto afrodisiaco para atraer a nadie, ya que ella si las podía "esconder" no como su manifestación Hecatombe, la pobre tenía que lidiar con ellas, por lo cual le tocaba siempre ir abrigada, por eso le dio la defensa corporal corpus concupiscentiæ

Sin más entro a un restaurante donde fue atendida con mucha elegancia y favoritismo, claro, ella a pesar de lo diferente de su apariencia era una mujer muy hermosa, con mirada cautivadora y curvas apetecibles, fue sentada al lado de una mesa donde comía una mujer como si fuera su primera comida en años, la demoniza la vio detalladamente era joven, alta, con grandes pechos y delgada, lo común en estándares de belleza humanos aunque a Juria o le parecía atractivo, con un desproporcionado apetito

Su rostro tenía unas facciones poco marcadas, cara ovalada, labios finos llevar pintados al estilo geisha y pelo liso y de color rosa lleva suelto, también tiene los ojos purpúreos, y su rasgo más llamativo es el piercing que tiene bajo su ojo derecho

Estaba vistiendo una chaqueta marrón y una camiseta sin mangas, que sujeta con tirantes a sus pantalones cortos a rayas negras y naranjas. También calza unas botas altas de color marrón oscuro, lleva un cinturón naranja con una hebilla dorada y medias hasta la pantorrilla de estampado rosa, rojo oscuro y amarillo; también lleva un sombrero al estilo ruso, de color verde claro.

En cuanto había terminado de verla, supo quién era, nada más y nada menos que Jewelry Bonney apodada La Glotona, otra supernova además de ella, aunque ella no tenía el mismo precio que Juria, de hecho, era muy bajo a comparación, aunque la peli blanca y aguamarina no se iba a poner a hacer comparaciones porque sería a lo mismo que los hombres compitiendo por quien la tenía más grande

Recibió su comida, comía calmadamente, degustando los más exquisitos platillos que ofrecía el lugar, era muy visible que a ella le estaban dando un trato más que preferencial, no es como si a la demonio le fastidiara pero al parecer a la peli rosada si, ya que no recibía la inmensurable cantidad de comida desde que esa otra entro al lugar, después de todo, la que estaba en la mesa de al lado, había conseguido, solo con su presencia, cautivar a los camareros y a los cocineros, esto a Bonney no le parecía justo

- ¡oye, yo también había pedido un plato de espaguetis y me dijeron que ya no había! -grito la supernova- ¡pero la perra de al lado tiene dos platos! -señalo a Juria pero esta la ignoro

- Disculpe señorita pero ella había pedido espaguetis antes que usted -le contesto el camarero nervioso, por no decir asustado

- ¡mentiroso, yo estaba aquí antes!

- Pero.... - el mesero no sabía que decirle, ya que tenía razón, pero la otra cliente era tan hermosa que no pudo evitarlo

- Oye -dijo Juria para que Bonney se volteara a verla

- ¡¿Qué?! -respondió la fémina molesta

En ese instante, un plato de pasta voló hasta estamparse brutalmente en la cara de la peli rosa mientras que calmadamente Juria se levantaba para salir del establecimiento, con enorme fuerza mental y agradeciendo que se estaba dejando llevar por la ira, por que la otra se había atrevido a llamarla 'perra', ¿quien se creía esa estúpida para insultarla?, se lo haría pagar caro, lo bueno es que esa otra supernova era una mujer, ella no tenia ningún problema con las mujeres, "te jodiste maldita" pensó la demonio

Les guiño el ojo a los trabajadores del lugar, con corazones en los ojos ellos le decían que la cuenta era por parte de la casa, justo como ella quería

Ya recuperada del golpe, porque la fuerza había sido tal que la había hecho chocar estruendosamente contra la pared, casi haciéndola quedar inconsciente; lanzo un grito de furia, en lo que le habitaba a uno de sus subordinados que fuera por los demás, ella iba a matar a la maldita que se atrevió a insultarla

Demoness's PainDonde viven las historias. Descúbrelo ahora