Toxic

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Al final Juria había decidido perder el tiempo en la base marina, aunque al principio pareció ser una buena idea para saber cuáles eran los conocimientos que tenían los marines en esa isla, se tornó en una pérdida total de su tiempo y una total decepción, ya que al parecer alguien había tenido la misma idea de ella

Cuando entro a los archivos secretos del cuartel se dio cuenta, casi instantáneamente que ese lugar ya había podido ser asaltado, era fácil intuirlo, había desorden en el almacén, pero era muy sutil, de modo que solo un ojo experto, como los de la demoniza, podrían notar esos milimétricos detalles

Además, al revisar algunas carpetas se dio cuenta de que faltaba información confidencial, a ver, ¿y cómo se les podía perder eso?, si es información importante y lo tienen en una jodida carpeta con una marquilla que dice 'top secret', ¿Cómo carajos se les desaparece la información?, ¿la dejaron perder?, ¿son así de idiotas?... o también esa podría también ayudar a fundamentar su teoría de que este lugar ya había sido saqueado anteriormente

Reviso todo de manera rápida hasta encontrar alguna pista de lo que se habían llevado, que al parecer había sido algo bastante importante, una sustancia llamada vactrius, ella no sabía mucho sobre esa extraña sustancia, pero había leído sobre ese químico en algunos documentos robados que le traían sus clones u otros nakamas, debía ser algo un tanto importante

Juria sonrió mientras pensaba "creo que encontré una nueva aventura", reviso por otros lados por si había alguna otra pista de más documentos desaparecidos o si encontraba un modo de probar quien fuera ese alguien que se llevó la información primero, alguna pista de ese ser misterioso, no fue hasta que capto un aroma diferente, la dominio sonrió, había captado el aroma del ladrón, o mejor dicho ladrona, porque a pesar de que oliera a metal y un tanto molesto olor a veneno, era un olor femenino, pero había algo más en su olor, algo que conocía muy bien

- Pero mira nada más que interesante –se dijo a si misma- una D... esto será divertido –se rio mientras se dirigía a la salida del cuartel dejando atrás, varios cuerpos sin almas de los pobres soldados que hubieran ahí, quemándose, en el edificio envuelto en llamas

En un bar de mala muerte cercano a un muelle, entraba una mujer de 1'80 de altura, de buen físico puesto que era atractiva, cabello negro ondulado y un poco largo, vestía don un conjunto simple de una camisa manga larga morada, con unos jeans azules que le llegaban debajo de la rodilla, as unas zapatillas cafés, con una extraña mascara de gas que cubría su rostro, para cualquiera que no la conociera diría que era una mujer con un gusto para los accesorios muy extraños o que proviniera de alguna isla cuyo aire no fuera el más sano que se pudiera decir

Pero no, esa mujer de apariencia femeninamente inocente era nada más y nada menos que Toxic una mercenaria que increíblemente tenía una recompensa de 16'000.000 millones de beris, un numero bastante alto para alguien que no era un pirata y que fuera una mujer, ya saben, los marines podían ser un tanto machistas con las mujeres, a menos de que ellas fueran jodidos monstruos inmisericordes... o chicas muy atractivas, ¿Qué?, también hay pervertidos en la marina también gente, son como la plaga, están por donde sea

La mujer de cabellos negros como la noche se acercó a un hombre de unos 36 años, rebosante de belleza masculina dada a su edad, de cabellos negros y un bronceado envidiable, que combinada bien con sus ojos amarillentos, era un casanova de ese bar, aunque fuera un simple barquero trasportador de mercancía, no mucha, pero lo suficiente como para que pudiera darse la buena vida del alcohol y mujeres que siempre quiso

Ella toco su espalda para que el volteara a verla a la máscara, el sonrió de maniera cautivadora, aunque no le causo ni la más mínima reacción de agrado a la chica

Demoness's PainDonde viven las historias. Descúbrelo ahora