Criminal. H.S

CAPITULO|XIII

Abrí mis ojos despacio,escuchaba voces algo lejanas,las cortinas blancas se movían al compás de la brisa,desvió mis ojos a mi izquierda,veo a dos enfermeras – dejándome saber en donde me encuentro.– hablaban de algo que no podía entender,no sé si es porque mi cabeza sigue delirando o el echo de que no puedo escuchar. ¿Porque estoy aquí?.
Un intento por hablar para llamar su atención,se hace presente pero apenas podía mover mis dedos,sentía cuerpo tan cansado y anestesiado,que no podía moverme. Un tubo endotraqueal descansaba dentro de mi boca,intento hablar el tubo no me lo permitía,pero con la poca fuerza que me queda,intento gritar. Mi voz parecía algo entumecida,tampoco podía hacer mucho debido al tubo molesto. Las enfermeras fueron a mi,pero todo se volvió negro.

Mis ojos se abren de golpe,un dolor de cabeza dándome la bienvenida,el tubo molesto ya no estaba,agradecía a Dios por eso. Mi cuerpo seguía un poco adormecido pero también adolorido,intento sentarme pero el dolor punzante se llevó mis fuerzas. El doctor camina apresuradamente hacia a mi.— Debe descansar,señorita. Cualquier fuerza abrupta,puede ser peligroso.— Lo escuchó decir,recuesto finalmente mi cabeza de la almohada,él me observa unos segundos mientras toma unas notas.
— Señorita...— Dice y vuelve a ojear su tabla de apoyo. — Danna. — Pronuncia despacio,mientras saca una pequeña linterna y la pone enfrente de mis ojos,mientras los examina a ambos con mucha precisión. — Soy el doctor Roni.— Murmura,estaba con la mirada fija en mis sábanas,mirándolas algo pérdida. — Señorita Danna. ¿Me escucha?— Vuelvo mi atención al doctor,noto una mirada de preocupación,en su rostro.
— ¿Recuerda lo qué pasó?.— habla suave,yo hablo los labios para responder pero vuelvo a cerrarlos,niego con la cabeza.— Hmm,recibió un disparo en el abdomen,por lo que le hicimos una radiografía. La bala por suerte no fue profundo,ni puso en peligro ningún órgano.

>> Le pusimos el tubo endotraqueal,cuando llegó tenía respiración dificultosa. Ha estado en coma,durante dos días. Debido a que perdió mucha sangre.— Abrí mis ojos como platos,gruñí al recibir un dolor fuerte de cabeza,trayendo consigo los recuerdos de lo que ha ocurrido.— ¿Todo bien?.— me limite a asentir.— Cuando llego,había perdido el conocimiento,pero puede estar tranquila,por suerte la bala no puso en peligro ningún órgano,ni penetró muy profundo. Si guarda reposo correctamente,sanarás rápido.

Mis lágrimas estaban descendiendo por mis mejillas,las limpié con brusquedad. — ¿No tiene a alguien a quien pueda llamar?.Tratamos de buscar algún contacto en su celular pero esta bloqueado. Trato de pensar,¿quien pudo ser?. La idea de que Marcus esté detrás de esto,me pone la piel de gallina. El miedo vuelve a mi,sintiéndome pequeña.— Señorita, ¿Está bien?. Puede llamar a alguien si así lo desea.

Respiro hondo,mientras dedico una mirada al doctor.— Necesito hacer una llamada.— Digo con voz ronca,el doctor asintió,y se dirigió afuera de la habitación.

¿Como paso todo esto?.
Solo estaba de vuelta a casa,tomando el atajo de siempre,nadie ha llamado,¿ni siquiera Harry?. Seguro que ya he perdido mi trabajo,doy una leve mirada a la ventana,que me quedaba de lado derecho,el sol se había ido en un instante,podía escuchar las fuertes lluvias golpeando la ventana.La puerta volvió a abrirse,y vi una enfermera con mi bolso en su mano.

Me lo entrego y se retiro,inmediatamente. Saco mi celular,marqué el número de Harry. No he pensando en nadie más.
Uno,dos,tres timbrasos.

— ¿Si?.— Escucho una voz femenina del otro lado de la línea,mi rostro palideció por un momento. "Cálmate,no es nadie importante."

Aclare mi garganta.— ¿Esta Harry?.

— ¿Quien le llama?.— Pregunta curiosa.

Tome un suspiro.— Soy su novia.— Apreté el celular tanto que por un momento pensé que se rompería .