Los aromas de la amortentia || EXO

11: Regalos mágicos.

Incluso para dos personas de la misma casa, festividades como las navidades eran muy diferentes.

Cuando el expreso escarlata se detuvo en la estación nueve y tres cuartos de King's Cross ese diciembre, la diferencia fue perfectamente notoria apartir del primer instante en que ciertos estudiantes pusieron un pie fuera de la máquina de vapor.

Y es que mientras unos, tales como Park ChanYeol, no encontraron a sus familiares esperando por sus llegadas, otros cuantos afortunados como Byun BaekHyun fueron recibidos calurosamente con fuertes abrazos.

Por supuesto, fue el segundo quien más llamó l atención que no quería, como cada año. Pues no era usual que aquellos pertenecientes a la casa de Salazar fuesen recibidos con muestras de afecto tan... Poco privadas y afectuosas.

Él siempre se había caracterizado por ser la excepción, sin embargo, y su hermanito TaeHyung parecía realmente emocionado de ver a tanta gente vistiendo de forma inusual como cada año desde que sus padres le permitían acompañarlos a despedir o darle la bienvenida al hijo mayor de los Byun.

TaeHyung aún no tenía once, pero muy seguido BaekHyun cerraba los ojos y le pedía a Merlín que hiciese los sueños de un niño tan bueno realidad... No cree que exista modo de explicarle a alguien que no habrá magia en su vida y que se perderá de cosas como estudiar en Hogwarts, sin romper un corazón en el intento.

Su madre horneó galletas y papá no soltó su brazo pese a ya haberlo asfixiado con un abrazo de oso. Increíblemente le tocaron los padres más cariñosos y pese a que él mismo no lo heredó, el menor sí.

ㅡ¡Hermano! ¡Cuéntame de tus clases!

BaekHyun tuvo que forzar el agarre de su amado padre para romperlo y así caminar libremente de la mano del pequeño de nueve años. ㅡ Verás, TaeHyung. Este año he aprendido muchas cosas nuevas...

ㅡ¡¿Cómo volar?!

Ante su cuestionamiento a modo de exclamación, algunas familias junto a sus hijos recién llegados les dedicaron a los cuatro miradas enternecidas y cabezadas a modo de saludos cordiales... Otras, sin embargo, fruncieron el ceño para con la escena.

ㅡMuggles ㅡ siseó la señora Kim, madre de JongDae.

Y ChanYeol se encogió ligeramente de hombros ante lo gélido de su mirada, dedicándole una preocupada al hijo de familia que había palidecido observando un poco más allá, como cierto muchachito pelirrojo de mejillas regordetas se encontraba con su madre y una pequeña casi tan adorable como él.

Estaba claro que tenía un gran problema, y si Park prefirió no hacer comentario alguno, fue debido a las fechas en que se encontraban.

ㅡPodemos dejarte en tu casa, si gustas. ㅡ La mujer ofreció a ChanYeol, mirando su carísimo reloj. ㅡ Creo que tus padres están retrasados.

El alto sonrió a la fuerza, únicamente por educación. ㅡ No se moleste señora Kim, en realidad ellos no dijeron que estarían aquí. Al que espero es a Kreacher, nuestro elfo doméstico.

ㅡDesde que el Ministerio aprobó las estúpidas propuestas de Granger para el Departamento de Protección de Criaturas Mágicas, esas alimañas se creen con los suficientes derechos como para desafiar a sus amos.

ㅡOh, eso no pasa con Kreacher, se lo aseguro. ㅡ ChanYeol hizo ademán de restarle importancia al asunto y tiró del cuello de tortuga que estaba vistiendo, sintiéndose acalorado pese a la temperatura bajo cero a la que se encontraban. ㅡ Es un elfo excelente por más malhumorado, el problema es que ya está muy anciano. Hace poco cumplió los seiscientos años.

JongDae lo codeó ligeramente con una sonrisa divertida esbozada en sus labios. ㅡ Viejo, imagina que nosotros viviéramos tanto.

Tras rodar los ojos, la madre del muchacho pescó su oreja entre sus delgados dedos y tiró de él, arrastrándolo fuera de la estación.